Detenido en Alicante un grupo que pirateaba películas en los cines

La Policía Nacional ha desmantelado en Alicante un grupo de cuatro personas que grababa en los cines películas para distribuirlas posteriormente a través de Internet. Fuentes policiales han indicado que ésta puede ser la mayor operación contra la piratería cinematográfica a nivel europeo, al calcular que los cientos de películas distribuidas por los acusados a través de la red han supuesto un perjuicio económico de unos cinco millones de euros a los propietarios de las obras.

Las investigaciones se iniciaron después de que los empleados de una sala de proyección de Alicante descubrieran a uno de los detenidos mientras grababa una película de estreno, con un equipo de grabación de alta definición y un soporte para fijar el mismo. Los detenidos, todos de nacionalidad española, realizaban grabaciones de películas en salas de cine de esta ciudad en horarios con pocos espectadores. Ponían los archivos a disposición de los internautas "el mismo día del estreno y con calidad similar al original", a pesar de carecer del permiso legal. Para ello, los presuntos piratas informáticos utilizaban una o varias páginas web, relacionadas entre sí, en las que se publicaba el enlace a la descarga. "Estos archivos son de gran calidad y ofrecen multitud de obras cinematográficas, videojuegos y programas de software para su descarga", han señalado las fuentes policiales. Los agentes calculan que mediante este método se han copiado y difundido cientos de títulos de estreno en 2009, de los que se han efectuado unas 10.000 descargas de cada obra, lo que supone un perjuicio económico para los titulares de los derechos de las películas de unos cinco millones de euros.

Se han realizado dos registros domiciliarios en los que se han intervenido tres ordenadores de sobremesa, un portátil, una cámara de vídeo de alta definición y un minidisk con la grabación del sonido de las películas. Los agentes también han encontrado "numerosa documentación y facturas acreditativas de los ingresos percibidos en concepto de publicidad". Por el contenido de los ordenadores intervenidos, la Policía ha descuberto que los detenidos tenían contratados servicios de albergue en servidores de Francia y Alemania, y que podían controlar de forma remota otros trece terminales. Los cuatro detenidos por un presunto delito contra el derecho a la propiedad intelectual han sido puestos a disposición judicial