Virus y calor, la amenaza que no cesa en verano

En verano, nosotros descansamos; nuestros ordenadores no. Tampoco los riesgos que corren nuestros equipos. La empresa Recovery Labs señala que las averías aumentan un 30% durante el verano. Las razones fundamentales son dos: los archiconocidos virus y el calor.

El Centro de Alerta Antivirus (CAT) recuerda que las alertas de virus aumentan un 20% en verano. Podemos explicarlo por tres causas. En primer lugar, gracias a las vacaiones, el aumento del tráfico en la Red, y las posibilidades de entrar en sitios poco seguros, se dispara en verano. A esto podemos añadirle que los creadores de virus también tienen vacaciones y disponen de más tiempo libre para crearlos. Un tercer elemento de riesgo consiste en que, al irnos a descansar y dejar el ordenador apagado, nuestro antivirus queda sin actualizarse. A la vuelta, podemos encontrarnos con más de un nuevo microbio electrónico dándonos la bienvenida al volver a la rutina.

Frente a esto, los expertos recomiendan seguir las medidas habituales contra los virus con especial cuidado durante los meses de verano. Pero, además, una buena medida para un primer reencuentro con el ordenador al volver a casa, es actualizar el antivirus antes de abrir cualquier correo electrónico o ponernos a navegar.

Cuidado con el calor

Que el sol brille con fuerza en el cielo es un problema para nuestros sensibles ordenadores. El disco duro es un elemento que resulta especialmente vulnerable a las altas temperaturas. Si alcanza temperaturas muy altas, sus delicados componentes de precisión pueden dilatarse y comenzar a dar problemas. Los expertos los comparan con un tocadiscos de vinilo. Si el disco se dobla, la aguja ya no puede seguir el surco y la música dejará de sonar tan bien como debiera. Y esto, en el caso de un disco duro, podría terminar con la pérdida de nuestra información o con la visita a un caro servicio de recuperación de datos.

Pero existe otro riesgo para nuestros equipos: los cambios de tensión o los cortes de suministro. La subida de la demanda de electricidad en verano a causa del aire acondicionado provoca cada año cortes o subidas de tensión en varios lugares de España. Obviando la frustración que un apagón produce cuando uno está utilizando el ordenador y no ha guardado su trabajo o su partida de videojuego, que el corte se produzca en un momento crítico para el equipo, como el apagado, puede dañarlo gravemente.

Para ambos problemas derivados del calor existen soluciones sencillas e intuitivas. Contra el calor, en casa o en el trabajo, un buen ventilador. Para el ordenador, también. Los expertos aconsejan que nos aseguremos del buen funcionamiento de los ventiladores de los equipos y que tengamos cuidado para no obstruir los conductos de ventilación. Alejar al equipo de la luz del sol es también una buena idea.

Los problemas eléctricos también pueden ser resueltos con sencillez. Existe un tipo de enchufe llamado "protector de tensión" que presenta una mayor resistencia en caso de una subida brusca de voltaje. Existen varios modelos asequibles en el mercado y pueden resultar especialmente útiles si pensamos viajar con el portátil a algún lugar con una red eléctrica inestable.

Contra los cortes de luz, lo mejor sigue siendo guardar nuestro trabajo con frecuencia, pero existen también los Suministradores de energía ininterrumpida (UPS en sus siglas en inglés). Funcionan como una batería auxiliar conectada a la red eléctrica que se pone en funcionamiento en cuanto detecta cualquier tipo de carencia en el suministro.

De cualquier manera, después de todo un año intensamente juntos, un tiempo alejados puede resultar positivo para el ordenador y para nosotros. Tal vez, un libro nos ayude a desconectar. O, mejor aún, no hacer absolutamente nada.