"Se supone que son las grandes empresas de antivirus las que fabrican los virus"

Almudena Grandes ha visto como su novela 'Atlas de Geografía Humana' pasa a la gran pantalla de manos de la directora Azucena Rodríguez. Además, la escritora sabe sacar partido a la tecnología, conseguir que ésta le haga la vida más fácil: "Me he aficionado a ver películas en mi ordenador porque los niños creen que estoy trabajando y me dejan en paz".

Hace 18 años que compró su primer ordenador y con él escribió su primer libro. Ahora tiene dos, "uno para trabajar y otro para navegar por Internet desde que me entró un virus mientras escribía una de mis novelas. Eso es una mala pasada, pero no de la tecnología, sino de las personas. Se supone que son las grandes empresas de antivirus las que fabrican los virus. También este año, el día de nochevieja, se me estropeó el lavavajillas y tenía en casa veintitantos invitados. Eso también es tecnología, ¿no?".

Almudena Grandes sólo puede navegar por Internet cuando no está escribiendo, como actualmente: "Ahora estoy enganchada a la retransmisión en directo del Juicio del 11M. Me paso la vida mirando Datadiar TV, que lo da en directo. Sistemáticamente miro el tiempo cuando voy de viaje, compro billetes de avión y entradas de cine y, sobre todo, consulto mi correo. Me entusiasma el correo electrónico. La mejor manera de contactar conmigo es mediante e-mail porque no me gusta el teléfono móvil, me parece muy pesado". Para Almudena lo ideal sería "poder llamar tú y que no te llamaran. Es que me pongo de mal humor sino conozco a quien me está llamando".

La exitosa escritora madrileña confiesa que su nombre también le ha generado más de un problema telefónico: "Al llamarme Almudena, mi nombre suele estar de los primeros en la agenda y eso da pie a muchos malentendidos. Recuerdo un mensaje que recibí de mi íntimo amigo, el también escritor Eduardo Mendicutti, en el que me pedía perdón por lo que había pasado y esperaba que siguiéramos siendo amigos. Me preocupé muchísimo, menos mal que no era para mí. A las que se llaman Vanesa seguro que no les pasa".

El lado bueno de la tecnología

Almudena Grandes recuerda que aparatos como el ordenador o el móvil son sólo una parte ínfima de lo que usamos, la versión doméstica. La importancia de la tecnología "está en los hospitales, salvando la vida de la gente, o en la investigación".

Puestos a soñar, Almudena no piensa en ella misma, desearía acabar con el hambre en el mundo y está convencida de que se podría conseguir: "Hablé con un amigo biólogo, partidario de los transgénicos, y me aseguró que tecnológicamente es posible acabar con el hambre en el tercer mundo, con plantaciones que no requieren agua. Habría que acabar con las personas que impiden que estas investigaciones salgan adelante".