El jefe de investigación del CSIC niega los efectos negativos de las atenas de telefonía

"Las antenas de telefonía móvil no causan cáncer; lo único que podrían producir es un calentamiento térmico del cuerpo", asegura el director de Investigación en Bioelectromagnetismo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Juan Represa.

Según la teoría expresada por Represa, cuantas más antenas existan, menos radiación habrá, ya que la intensidad de las emisiones sería de menor alcance.

Represa añadió algunos ejemplos: "Llevamos viviendo 60 años entre ondas AM/FM de radio, que emiten 1.000 veces lo que una antena radiofónica, sin que se les haya atribuido ningún caso de cáncer". La radiación que emiten las antenas de telefonía móvil no es peligrosa si éstas cumplen con la normativa de mantener unos niveles de radiación seguros (una máxima de 2 watios)," señaló el científico en la jornada "Las Redes de Radiocomunicación y el Desarrollo Local", celebrada esta mañana en Gran Canaria.

Las operadoras han denunciado las trabas que encuentran para instalar estos dispositivos, en muchas ocasiones por el temor de la población a los efectos que podrían tener sobre su salud. Por ello, las empresas de telefonía llevan tiempo negociando con el Gobierno, Comunidades Autónomas y Ayuntamientos un acuerdo que facilite esta tarea, pero aún éste aún no ha llegado. Otro de los ponentes del acto, José Antonio Rodríguez, alcalde de Jun, (en el municipio de Granada) - un pueblo que destaca por el gran uso que hace de las tecnologías - manifestó su preocupación ante el hecho de que la falta de antenas de telefonía pueda afectar al sector turístico.