Los beneficios de Microsoft caen un 97,25% en el último trimestre
Las acciones de la compañía no acusan el dato negativo y suben 2 dólares
El número uno en suministro de programas para ordenadores personales ha registrado unas ganancias netas, descontados los cargos extraordinarios, de 66 millones de dólares (unos 77 millones de euros, 12.800 millones de pesetas).
Esos beneficios incluyen 2.600 millones de dólares (unos 3.000 millones de euros, 500.000 millones de pesetas) de dólares en pérdidas por inversiones, lo que representa una reducción de las ganancias del 97,25% con respecto al segundo trimestre de 2000.
Entre abril y junio de este año, el cuarto trimestre fiscal de la compañía, el volumen de ventas de Microsoft ha sido de 6.600 millones de dólares (unos 7.700 millones de euros, 1'2 billones de pesetas), un 13% más que con respecto al mismo trimestre del año anterior.
La semana pasada Microsoft informó de que estaba en el camino de lograr los beneficios de las operaciones que se había fijado para este año, pero ya advirtió que en este trimestre presentaría un récord de pérdidas.
Antes de conocerse los resultados, las acciones de Microsoft han cerrado hoy en Wall Street con una ganancia de 2 dólares por acción (2,34 euros, 390 pesetas).
El Gobierno tiene hasta el 3 de agosto para responder a la apelación de Microsoft
El Gobierno de EE UU tiene de plazo hasta el día 3 de agosto para dar una respuesta a la petición de Microsoft de que el tribunal reconsidere parte de la sentencia del 28 de junio en el caso antimonopolio contra el gigante de la informática.
Microsoft sostiene que la sentencia de junio "pasó por alto o interpretó de manera incorrecta" un tema central en el caso. La empresa señaló que el tribunal debería revisar su sentencia en la cuestión técnica de si la empresa "mezcló estrechamente" en su sistema Windows los códigos relacionados con su navegador Internet Explorer y aquellos ligados al resto de funciones del sistema operativo.
A finales de junio, el tribunal de apelaciones rechazó la sentencia de desmantelamiento que pesaba sobre Microsoft y renvió el caso a un tribunal de primera instancia, aunque confirmó algunos de los cargos presentados por el Gobierno estadounidense contra el número uno mundial del software.
