Francia abre la tercera dosis de vacuna a todos los adultos y restablece la mascarilla en lugares cerrados
Todo el que no se ponga la dosis de recuerdo contra la covid antes de que expiren los siete meses desde que se completó la primera pauta verá cancelado su certificado sanitario, advierte el Gobierno
Francia quiere que todos los adultos se pongan la dosis de recuerdo contra el coronavirus y que lo hagan lo más rápido posible: la fecha se adelanta a los cinco meses después de haber completado la pauta original y no a partir de los seis meses, como hasta ahora. El ministro de Sanidad, Olivier Véran, ha anunciado este jueves que todo francés mayor de 18 años deberá ponerse la tercera dosis si quiere mantener válido su certificado covid. Tendrá para ello dos meses: a partir del 15 de enero, quien no haya validado su vacuna de recuerdo a un máximo de siete meses después de la última inyección, ya no podrá utilizar el código QR que le permite acceder a lugares públicos cerrados o viajar, ha advertido.
El Gobierno quiere evitar al máximo volver a las medidas de restricción absolutas como ha sucedido en Austria o Alemania. Pero si bien este jueves no hubo anuncios “ni de confinamiento, ni de toque de queda, ni cierre anticipado de comercios o limitación de desplazamientos”, como adelantó Véran al comienzo de una conferencia de prensa. Salvar las navidades dependerá de que los ciudadanos sean capaces de “conciliar libertad y responsabilidad”, puntualizó el ministro. Y eso pasa, ante todo, por vacunarse, pero también por cumplir más estrictamente los “gestos barrera”, especialmente las mascarillas, que vuelven a ser de uso obligatorio desde este viernes en espacios públicos cerrados, incluso en aquellos que exigen el certificado covid, anunció también Véran. Además, los prefectos podrán determinar en casos concretos si se exige su uso también en exteriores, por ejemplo en mercadillos de navidad o de antigüedades, muy populares en estas fechas.
La decisión de vacunar a todos los adultos “concierne en la práctica a 25 millones de franceses, de los que seis millones ya han recibido la dosis de recuerdo, por lo que quedan 19 millones de franceses elegibles a la vacunación de recuerdo y a los que llamamos a vacunarse en los dos próximos meses”, ha declarado Véran, que ha asegurado que el país cuenta con dosis suficientes para garantizar la nueva medida. “Tenemos vacunas suficientes para vacunar a todo el mundo. Y hay dos meses de tiempo para que todo el mundo se vacune”.
Hasta ahora, solo los mayores de 65 años y las personas en riesgo, además del personal sanitario, estaban autorizados a ponerse la dosis de recuerdo, que el mes que viene también se abría a los mayores de 50 años. Con la nueva medida, todo adulto que haya cumplido los cinco meses desde su última dosis podrá optar a la de recuerdo. La aplicación TousAnticovid que sirve de rastreo de casos y en la que se puede subir el código QR cambiará próximamente de color conforme se acerque la fecha máxima de la nueva dosis, adelantó Véran. Si no se carga el nuevo código, el certificado dejará de ser válido, una medida que entrará en vigor a mediados de enero.
Por el contrario, Francia no abrirá la vacunación a los menores de entre 5 y 11 años “al menos hasta principios de 2022″, indicó. De ahí que el ministro de Educación Nacional, Jean-Michel Blanquer, haya anunciado una revisión del protocolo en las clases de primaria, las más afectadas por la quinta y nueva ola de coronavirus. Según ha adelantado junto a Véran, cuando se declare un caso de covid las aulas no serán ya sistemáticamente clausuradas, sino que se efectuará un test a todos los alumnos y todo el que dé resultado negativo podrá regresar a clase.
Actualmente, en toda Francia hay 8.500 aulas cerradas, lejos aún del pico de 12.000 clausuradas en lo peor de la cuarta oleada de pandemia, pero en un aumento progresivo que ha desatado las alertas. En total, 180.000 familias se han visto afectadas por el cierre actual de clases.
Francia afronta la quinta ola de coronavirus que es “sin duda más fuerte y más larga” que la sufrida durante el verano, debido sobre todo a las bajas temperaturas invernales y al hecho de que por ello la gente se queda más en lugares cerrados, reconoce Véran. El avance “fulgurante” de la nueva ola, como la definió esta semana el portavoz del Gobierno, Gabriel Attal, se demuestra cada día en los nuevos datos sanitarios, que no dejan de aumentar. Este miércoles, se registraron 32.591 nuevos contagios de coronavirus, la cifra más alta desde el 24 de abril.
En un intento más de incitar a los no vacunados a ponerse sus dosis, el Gobierno ha anunciado también este jueves que los test PCR que sirven como certificado covid tendrán una validez de solo 24 horas y no, como hasta ahora, de 72 horas. Los tests de covid dejaron en septiembre de ser gratuitos para toda persona que no esté vacunada o carezca de una prescripción médica, en un intento más de fomentar la vacunación de la población. Actualmente, el 75,1% de la población total ha completado su pauta.
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