Un hombre confiesa haber rociado con ácido sulfúrico a las dos mujeres agredidas en Málaga
La investigación sostiene que el ‘El Melillero’, expareja de una de las mujeres, participó en la agresión pero el nuevo arrestado fue quien vertió el líquido cáustico. Las víctimas siguen hospitalizadas
La investigación sobre la agresión machista a dos mujeres de Málaga a las que un hombre arrojó ácido sulfúrico ha quedado completada. La Guardia Civil ha detenido esta semana al que se considera autor material de los hechos: Juan José G. R. Era la pieza que faltaba en las indagaciones policiales hasta que fue localizado y arrestado el pasado miércoles en una vivienda de Fuengirola. En su declaración judicial, él mismo ha confesado haber rociado con ácido a las dos mujeres. Acusado de dos delitos de asesinato en grado de tentativa, ya ha ingresado en prisión. Allí se encuentra igualmente al expareja de una de las víctimas, José Arcadio D. N., conocido como El Melillero, al que la Guardia Civil considera coautor de los hechos. Otras dos personas que presuntamente le ayudaron durante sus dos días de fuga también están en la cárcel. Las víctimas permanecen hospitalizadas, aunque sus familias han solicitado a los centros hospitalarios no facilitar más información sobre su evolución.
Un día después de su detención, El Melillero fue trasladado hasta la finca donde le habían localizado tras 48 horas de una fuga que incluyó dos persecuciones policiales y la participación de más de 200 agentes policiales. La Guardia Civil quería reconstruir los hechos. “Yo no he hecho nada, yo no fui”, aseguró entonces José Arcadio D. N. Aquel día fueron detenidas cinco personas más por ayudarle en su huida, pero fuentes de la investigación explicaron que esta seguía abierta y no se descartaban más detenciones porque algo no terminaba de cuadrar, como finalmente han podido confirmar.
Desde el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) han afirmado que el ahora detenido ha admitido ser la persona que roció con ácido a las dos mujeres. De hecho, fuentes policiales han explicado que el arrestado aún tiene diversas quemaduras en los brazos, fruto de las salpicaduras del ácido sulfúrico que arrojó a través del hueco de la ventanilla del coche a las dos mujeres. Aquel encuentro no fue casual: la Guardia Civil ha intervenido dos balizas de seguimiento en los vehículos de cada una de las mujeres agredidas, lo que permitían a los agresores conocer cuál era su ubicación en todo momento.
Los hechos se produjeron el 12 de enero. Cerca de las dos de la tarde, un coche en el que viajaban los dos detenidos se acercó hasta el coche blanco en el que viajaban la expareja sentimental de El Melillero, de 26 años, así como una amiga de esta, de 29 años. Tras una discusión, el ahora detenido presuntamente arrojó ácido sulfúrico por una rendija de la ventanilla al interior del vehículo y se dio a la fuga junto al coautor de la agresión machista, que fue detenido dos días más tarde tras una intensa búsqueda por toda la Costa del Sol. Las dos mujeres resultaron gravemente heridas y tuvieron que ser trasladadas a centros hospitalarios. Una de ellas, la exnovia, tenía quemaduras en la mitad de su cuerpo y las vías respiratorias afectadas, por lo que fue llevada en helicóptero hasta la Unidad de Grandes Quemados del hospital Virgen del Rocío, en Sevilla.
José Arcadio D. N. cumple ya dos meses en prisión, de donde solo salió días después de su arresto para participar en un juicio como acusado de dar una paliza a otra expareja, con la que tiene un hijo en común. El juzgado, de hecho, le condenó a más a siete meses de cárcel por golpear repetidamente a la mujer tras encontrársela en una discoteca de Marbella en el año 2016. El hombre posee un largo historial delictivo y hasta el pasado enero contaba con siete órdenes de detención por distintos delitos, así como condenas por delitos contra la seguridad vial y agredir y lesionar a un agente de la Policía Nacional. Maltrato, amenazas, robo con fuerza e intimidación, pertenencia a grupo criminal o tráfico de drogas son otros delitos de los que se acusa y que aún están pendiente de juicio.
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