Las farmacias valencianas reparten mascarillas a los mayores en un día festivo sin colapsos
Algunas boticas se quedan sin existencias, pero las colas para recibir tres unidades por cada persona no se han generalizado. Muchos establecimientos estaban cerrados por San Vicent Ferrer
Ha habido demanda, y también colas, incluso se han acabado las existencias en algunas farmacias, pero en líneas generales el primer día de reparto de las mascarillas contra la pandemia en la Comunidad Valenciana está transcurriendo con normalidad con una demanda importante pero contenida. A ello ha contribuido la festividad de San Vicent Ferrer, un santo al que le atribuyen poderes milagrosos contra la peste tanto en el siglo XV, en el que vivió, como posteriormente. No es día laborable en la provincia de Valencia y en numerosas poblaciones de Alicante y Castellón y muchos dispensarios están cerrados. Nada que ver con la situación de Cataluña, otra de las autonomías que ha iniciado hoy este reparto, donde no es festivo y el sistema informático se ha colapsado por la gran afluencia de clientes.
Las farmacias dispensan tres mascarillas quirúrgicas por persona, previa presentación de la tarjeta sanitaria (SIP) de la Consejería de Sanidad. Los receptores son las personas mayores de 65 años y a aquellas que pertenezcan a grupos de riesgo. Para retirarlas, los beneficiarios pueden acceder ellos mismos a los establecimientos o bien ceder su SIP a algún familiar.
A la una y media de la tarde, un hombre mayor entra a un farmacia de la Gran Vía de Valencia, donde varias personas guardan cola, para preguntar si quedan mascarillas de las suministradas por la Generalitat. Le han dicho que solo han venido 80 y se han agotado. “Esto de las mascarillas…”, dice el hombre quejoso. “Y mañana tampoco me aseguran que lleguen más”, critica. Tras las mamparas, Cristina y Duvravka atienden. Han recibido 83 mascarillas y las han agotado en cuatro horas. “Mientras había, todo bien, pero cuando se han acabado, ha cundido un poco el pánico”, cuenta una de ellas. “Llega un suministro limitado por día”, añade la otra. Explican que el Colegio de Farmacéuticos mandó una circular al respecto y la Consejería de la Sanidad envió otra instrucción sobre cómo debía ser la dispensación. Pero los crónicos no aparecen como beneficiarios de las mascarillas gratuitas. Asmáticos o hipertensos aún no tienen cargada la SIP hoy.
Otro señor, que tiene a su esposa con cáncer, tampoco tenía cargada la SIP con las tres mascarillas. “Entonces ¿qué colectivos son?”. El teléfono de la farmacia lleva sonando toda la mañana. Al realizar el pedido de mañana a mediodía, Cristina ha visto en el banco de datos que no quedaban existencias para el día siguiente. “Son tres mascarillas por paciente, vienen en cajas de 50 y las farmacias las tenemos que higienizar y repartir”, apostilla Duvravka. No saben si van a llegar más y comentan que la gente se queja de que sean quirúrgicas y no FPP2. “No estamos debidamente informados pero ¡jolín!, te están dando mascarillas”, añaden.
En la calle Maestro Palau, otro establecimiento de farmacia, abierto 12 horas, sí quedan mascarillas. “Las gente ha ido viniendo a lo largo de la mañana pero no ha habido una avalancha”, explica Lucas, que atiende en el mostrador. Una patrulla de agentes de policía se ha pasado a primera hora de la mañana para decirle que andaban por los alrededores por si surgía alguna cosa. “Pero problemas no ha habido, la gente ha sido muy cívica y han esperado haciendo cola”, añade.
Tampoco en las farmacias abiertas en torno a la plaza del Ayuntamiento de Valencia ha habido problemas. Como coinciden tres farmacéuticas en explicar, al no ser boticas de barrios con mucha densidad de población, en los días festivos no suelen tener muchos clientes, sobre todo durante el confinamiento cuando lo que antes eran multitudinarios lugares de paso, ahora son páramos desérticos.
Aun así han vendido bastantes, salvo en un establecimiento de los cinco consultados en el centro que no las había recibido. “Nosotros hemos despachado la mitad de las existencias del día. La gente es muy respetuosa", comenta una encargada, frente a la iglesia de San Agustín. “Muchos no saben bien las condiciones, pero se las explicamos. Solo una clienta ha montado un poco de escándalo, porque venía de otra farmacia con sus tres mascarillas y quería otro paquete. Cuando le hemos dicho que su SIP no permite más de momento nos ha acusado de no querer regalárselas. En fin...", destaca una dependienta. “Y esto no es un regalo, es como un medicamento con receta”, apunta la otra.
Manuel, de 88 años, ha bajado a la farmacia aprovechando el soleado día y se ha vuelto a casa con una mascarilla puesta siguiendo las instrucciones que, con gran amabilidad, le ha dado una farmacéutica que le llama por su nombre de pila. “No son las mejores mascarillas, pero mejor eso que nada, ¿no?”, comenta un cliente que se marchaba con su paquete.
El Colegio de Farmacéuticos de Valencia ha señalado esta tarde que la situación no ha sido “caótica”, aunque se han producido colas en algunos municipios, preparados para recibir a los clientes con líneas de separación gracias a las indicaciones del día anterior de la Diputación, según recoge Efe. Los colegios están en contacto con la dirección General de Farmacia para supervisar la primera jornada de entrega de mascarillas. La consejera de Sanidad, Ana Barceló, ha reiterado esta mañana que habrá mascarillas para todos los que las necesiten, y que no es necesario ir a recogerlas cuanto antes, si, además, la mayoría de beneficiarios no debe salir de casa por el momento.
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