Valencia recibe el quinto avión con material sanitario y consolida su canal chino de importación
La Generalitat prevé la llegada de más cargamentos en los próximos días tras establecer contactos fiables. La industria cerámica está preparada para reiniciar su actividad de manera paulatina a partir de este viernes
El quinto avión con material sanitario adquirido por la Generalitat valenciana en China aterrizó la noche del jueves en el aeropuerto de Manises con 76,3 toneladas de productos con motivo de la pandemia de coronavirus, y eleva a un total de 170 las toneladas que han llegado a la Comunidad Valenciana en los cinco vuelos negociados por el Gobierno autónomo. Si el anterior vuelo era un Antonov de una línea rusa se adelantó al horario, proveniente de la ciudad china de Shenzhen, haciendo escala en Moscú, el que tomó tierra ayer es un Boing 777 de carga de unas líneas aéreas etíopes, que partió de Shanghái e hizo escalas en Nueva Delhi y en Addis Abeba, con un retraso de varias horas pero sin más incidencias, según apuntan fuentes de la Generalitat.
En total, el avión transporta 1.280.000 mascarillas (de las que 80.000 son de alta seguridad FFP2), 4.250.000 guantes, 121.050 monos de protección (EPI) y 27.600 gafas de protección ocular. El presidente Ximo Puig destacó que, en las últimas 76 horas, han llegado a la Comunidad Valenciana 143,3 toneladas de material sanitario procedente de China para la protección de sanitarios y de personal sociosanitario valenciano. Los cinco vuelos que han llegado en los últimos quince días han traído para la Comunidad Valenciana 170 toneladas de material sanitario, entre los que figuran 6,58 millones de mascarillas, 5,45 millones de guantes,352.000 monos de protección y 97.600 gafas de protección ocular. No se ha conseguido de momento importar respiradores, el producto que más escasea y más requerido en el mercado. Los nuevos equipo de ventilación que han llegado a los hospitales valencianos proceden de las donaciones de Inditex (22) y el BBVA (49).
Puig señaló que el “tsunami” de la pandemia de coronavirus ha generado una situación “muy difícil” para poder comprar suministros, aunque destacó el canal “fiable” que la Generalitat ha abierto en China ha permitido la llegada de material, a lo que se une el trabajo de empresas textiles de la Comunidad que se están reconvirtiendo. El presidente incidió en que, al mismo tiempo, la Generalitat está exigiendo al Ministerio de Sanidad que suministre a la Comunidad Valenciana la parte de material sanitario que le corresponde para dar servicio a los profesionales sanitarios y sociosanitarios, señala la nota oficial.
Desde el primer vuelo que se logró gracias a la intermediación del empresario chino afincado en Ontinyent, Chen Wu Keping, con el que contactó la secretario autonómica de Economía Sostenible y exedil de la población valenciana, Rebeca Torró, el Gobierno valenciano ha ido consolidando un canal asiático de suministro dentro de la jungla en que se ha convertido el mercado mundial de productos sanitario. Al frente del departamento de compras, Puig ha situado como comisionada a la secretaria autonómica de Modelo Económico y Financiación, María José Mira, una persona con buenas relaciones con el mundo empresarial que ha ampliado la red de contactos. El equipo negociador, que se ha amoldado al horario chino (seis horas más que en España), ha abierto nuevas vías de suministro y transporte con garantías de seguridad que se traducirá en nuevos envíos en las próximos días, según unas previsiones que, de momento, se están cumpliendo.
Al margen del rimbombante nombre de ‘La ruta de la seda’ con el que la Generalitat ha bautizado estos envíos, como si se tratara de un nuevo proyecto mediático y no de una operación surgida de la desesperación por la falta de material sanitario, lo cierto es que la Comunidad Valenciana ha conseguido traer más cargamentos que otras comunidades autónomas en las dos últimas semanas. Para costear todas las operaciones, Puig he insistido en pedir al Gobierno central más liquidez. Algunos empresarios, que prefieren mantener el anonimato, también han hecho aportaciones económicas.
La cerámica, preparada para reactivarse
Por otra parte, las empresas del sector de baldosas cerámicas podrían reiniciar su actividad productiva a partir de la madrugada del 10 de abril, fecha en la que deja de estar en vigencia el permiso retribuido recuperable y el resto de las medidas restrictivas de la actividad “siempre que así lo estimen oportuno”. En un comunicado de la patronal azulejera Ascer se asegura que “una vez cumplido el periodo de parón total impuesto por el Ejecutivo, el sector irá retomando la actividad de producción de baldosas cerámicas muy lentamente y de forma diferente en cada empresa”.
El inicio de la actividad se llevará a cabo “cumpliendo y respetando las medidas de seguridad y de prevención de riesgos para la salud sus trabajadores”, señalan desde Ascer. La patronal asegura que ha hecho llegar a todos sus asociados el protocolo de medidas del Ministerio de Sanidad Procedimiento de actuación para los servicios de prevención de riesgos laborales frente a la exposición al coronavirus (SARS-COV-2), y añade que desde antes del inicio del periodo de alarma ya se venía cumpliendo “sobradamente” en el conjunto de las empresas cerámicas.
“El inicio de la producción y la actividad será progresivo y sólo se recuperará muy lentamente a lo largo de los meses”, advierte el comunicado. Alerta de que la demanda “ha bajado estrepitosamente” en las últimas semanas debido a que sus principales mercados, como la UE y EE UU, han tomado medidas de contingencia para frenar la propagación de la Covid-19,y porque el sector se está viendo “amenazado” en esos mercados internacionales por otros productores internacionales que no han tenido que parar su fabricación.
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