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Ni casas en llamas, ni infancia robada: Greta Thunberg da su discurso más impersonal en Madrid

La intervención de la activista en la COP25 no tuvo el tono personal ni la emoción de otras de sus famosas intervenciones ante mandatarios

Greta Thunberg, durante sus discursos en la COP24 de Katowice (2018); la sede de la ONU en Nueva York (en enero), y el miércoles, en la COP25 de Madrid. En vídeo, los discursos de Greta.Vídeo: EPV
Fernando Peinado

Greta Thunberg pronunció este miércoles en Madrid un discurso menos personal que en otras ocasiones. La activista sueca dedicó buena parte de sus 11 minutos en el estrado del plenario de la COP25 a citar datos de informes científicos para apoyar su mensaje de alerta sobre la situación del clima.

En su intervención más destacada en la cumbre, Thunberg arrancó precisamente explicando por qué esta vez iba a usar solo datos, en vez de emociones. "Hace un año y medio no hablaba con nadie si no tenía que hacerlo, pero entonces encontré una razón para hablar. Y desde entonces he dado muchos discursos y he aprendido que cuando hablas en público conviene empezar con algo personal o emocional para captar la atención. Cosas como 'tu casa está en llamas', 'quiero que entréis en pánico' o 'cómo os atrevéis", dijo la activista refiriéndose a los discursos que ha dado en Davos o en la sede de la ONU en Nueva York. 

Acto seguido, Thunberg añadió que su discurso de este miércoles sería diferente "porque la gente se queda con las frases y nadie recuerda los datos", y pasó a citar informes de Naciones Unidas y otras estadísticas sobre la desigualdad en la contaminación entre países pobres y ricos. De hecho, durante su visita de seis días a Madrid, Thunberg se ha apartado del foco, cediendo la voz en sus intervenciones a activistas y científicos.

"¿Cómo comunicas esto sin sonar alarmista?", le preguntó a la audiencia, y tras dar las cifras, llamó a la movilización ("Cada gran cambio en la historia ha venido del pueblo"). Poco después de su intervención, inició su viaje de vuelta a Suecia en tren, autobús eléctrico y coche eléctrico.

Los emocionantes discursos de Thunberg, que siempre contenían datos científicos además del giro personal, explican parte del éxito de su movilización. Han sido recogidos en un libro, Our House is On Fire (Nuestra casa está ardiendo) y acumulan millones de visionados en YouTube. Estos son algunos de los fragmentos más conocidos.

"Nunca eres demasiado pequeño para marcar una diferencia"

Hace un año, en la Cumbre del Clima de la ONU en Katowice, Polonia, Thunberg pronunció su primer gran discurso. Fue el 12 de diciembre de 2018, en el pleno donde se reunieron los delegados de los Gobiernos (aquí, el discurso completo).  Con dos trenzas y serena seguridad arrancó presentándose.  

"Mi nombre es Greta Thunberg, tengo 15 años y soy de Suecia. Mucha gente dice que Suecia es solo un país pequeño y que no importa lo que hagamos. Pero he aprendido que nunca eres demasiado pequeño para marcar la diferencia y si algunos niños pueden aparecer en los titulares de todo el mundo simplemente por no ir a la escuela, imagina qué podríamos hacer todos juntos si realmente quisiéramos".

"Nuestra casa está en llamas"

Thunberg habló el 25 de enero de este año ante la élite mundial reunida en Davos, Suiza, en uno de sus discursos más desafiantes (aquí, el discurso completo).

"Nuestra casa está en llamas. Estoy aquí para decir que nuestra casa está en llamas. Según el IPCC [panel de expertos de la ONU] estamos a menos de 12 años de no poder deshacer nuestros errores (...) Los adultos siguen diciendo que debemos dar esperanza a los jóvenes. Pero yo no quiero su esperanza. Quiero que entren en pánico, quiero que sientan el miedo que siento yo cada día. Y luego quiero que actúen, quiero que actúen como si lo hicieran en una crisis. Quiero que actúen como si la casa estuviera en llamas, porque así es".

"¿Cómo se atreven?"

Thunberg intervino el 23 de septiembre en una cumbre Climate Action en la Asamblea de la ONU en Nueva York. (Aquí, el vídeo completo). Fue su discurso más duro, en el contenido y en la forma, cinco minutos de tensión en los que visiblemente afectada echó en cara la inacción a los presentes.

"Mi mensaje es que les estaremos vigilando. Todo esto está mal. Yo no debería estar aquí arriba. Debería haber vuelto a la escuela al otro lado del océano. Sin embargo, todos ustedes vienen a nosotros, los jóvenes, en busca de esperanza. ¿Cómo se atreven?

Han robado mis sueños y mi infancia con sus palabras vacías. Y sin embargo, soy uno de los afortunados. La gente está sufriendo. La gente está muriendo. Ecosistemas enteros se están derrumbando. Estamos en el comienzo de una extinción masiva y todo de lo que pueden hablar es de dinero y de cuentos de hadas sobre el crecimiento económico eterno. ¿Cómo se atreven?".

Una protesta de activistas obliga a la ONU a cerrar el pabellón de las salas plenarias

E. P.

Los servicios de seguridad de la Organización de Naciones Unidas han cerrado el acceso al pabellón 10 de IFEMA, donde se encuentran las dos salas plenarias de la XXV Conferencia de las Partes de la Convención Marco de la ONU sobre el Cambio Climático, al producirse una protesta multitudinaria de activistas de la sociedad civil a las 15.00. Ello ha demorado las intervenciones del secretario general de la ONU, António Guterres, y del ministro de Ciencia, Universidades e Innovación, Pedro Duque.

La acción ha tenido lugar mientras dentro del plenario los países exponen sus posiciones respecto a los objetivos de la Cumbre del Clima en el pabellón 10. Las protestas han durado en torno a 15 minutos hasta que los servicios de seguridad de la ONU y de la cumbre han desalojado a los manifestantes, mediante un cordón de seguridad que ha logrado sacarlos del pabellón 10, aunque han continuado en otros pabellones de la zona azul, lanzando y cantando sus consignas.

Entre los manifestantes, que los organizadores cifran en "cientos", había activistas de organizaciones de la sociedad civil, movimientos ciudadanos, sindicatos, grupos indígenas, de jóvenes, así como entidades de mujer y juventud que demandan a los países ricos "un paso adelante en la ambición y en la acción para luchar contra el cambio climático".

En concreto, inspirados en las caceroladas de América Latina, han hecho ruido con cazuelas y han portado pancartas mientras los ministros estaban en el plenario, ajenos a lo que fuera acontecía. Al mismo tiempo, fuera del IFEMA un grupo más reducido de activistas procedentes de la cumbre social se han unido a la acción fuera de la conferencia. Los autodenominados "cacerolazos" quieren llamar la atención de los países ricos ante la "injusticia la inacción ante miles de millones de personas en los países del sur, que están viendo como sus vidas están siendo devastadas por la emergencia climática".

En este contexto, denuncian que después de una semana de negociaciones climáticas en Madrid se han producido "pequeños o ningún avance en la mayoría" de los asuntos clave, incluida la necesidad de que los países ricos y las industrias contaminantes que "históricamente" han provocado la crisis climática de proporcionar financiación para apoyar a las comunidades que están afectadas por desastres "cada vez más severos".

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Sobre la firma

Fernando Peinado
Es reportero de la sección de Madrid desde 2018. Antes pasó ocho años en Estados Unidos donde trabajó para Univision, BBC, AP y The Miami Herald. Es autor de Trumpistas (Editorial Fuera de Ruta).

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