Barcos y buzos para ‘pescar’ residuos
Faenan en sus caladeros de siempre y tienen sus bases en 12 puertos de España y de Portugal, pero desde el verano pasado las tripulaciones de más de medio centenar de barcos de pesca y un buen número de buzos voluntarios junto con Asociación Chelonia hacen algo más que pescar: recogen residuos de los fondos marinos. Se han convertido en parte integrante, y muy importante, del proyecto Mares Circulares, de Coca-Cola en España.
Nadie conoce mejor la dimensión del problema de la acumulación de residuos en el mar y los fondos marinos que los pescadores, que cada día se enfrentan a la aparición, entre sus redes, de numerosos restos que, en la mayoría de los casos, son objetos o elementos de plástico que en gran parte pueden ser reciclados.
Esta es una de las razones por las que Coca-Cola ha integrado en su gran proyecto Mares Circulares, cofinanciado por The Coca-Cola Foundation, a más de 50 buques de pesca con base, entre otros, en los puertos españoles de Garrucha y de Almería, en la provincia homónima; de Ribeira y Muros, en A Coruña; de Isla Cristina y Punta del Morral, en Huelva; de Caleta de Vélez, en Málaga; de Corralejo, en Fuerteventura; de Bueu, en Pontevedra, y de Alcúdia, en la isla de Mallorca. A todos ellos se les ha facilitado un sistema de almacenaje de residuos a bordo, personalizado en función de las características de cada barco y del tipo de pesca que se lleva a cabo, y la Asociación Vertidos Cero ha formado a sus tripulaciones y patronos de cofradías para que, en sus tareas diarias, integren en el trabajo, en sus propias embarcaciones, la separación y el almacenamiento de los residuos en contenedores. El último paso de su labor consiste, de regreso de sus campañas, en descargarlos en sus respectivos puertos, donde siempre les espera personal de la Asociación Vertidos Cero, que les ayuda en la segregación y la gestión final de la basura que hayan “pescado”.
Un trabajo fundamental
El papel de los pescadores, como el del personal de esta asociación, que cuenta con una amplia experiencia en el ámbito de las basuras marinas y colabora con Coca-Cola en el proyecto Mares Circulares coordinando la actividad en barcos y puertos, está resultando muy positivo, pues un 70% de las basuras que se vierten al mar van a parar a los fondos marinos, donde resulta muy difícil recogerlas, sobre todo cuando esta basura se deposita en profundidades superiores a los 80 metros.
Para la directora de Proyectos de Vertidos Cero, Estíbaliz López-Samaniego, que califica de amplio y muy ambicioso el proyecto Mares Circulares, la idea es trabajar codo con codo con los pescadores para que los residuos que se recuperen puedan convertirse en un nuevo material: “Acceder a las basuras marinas que están por debajo de los cien metros es muy complicado. La única forma de llegar es con la colaboración de los pescadores que día a día se encuentran con el problema, y que alcanzan esas profundidades. El sector pesquero conoce bien la problemática y, en gran medida, la flota quiere trabajar con nosotros porque quiere ser partícipe de la solución. Esperamos que el trabajo complementario de técnicos y pescadores dé lugar a unos mejores resultados y a que el sector integre en su día a día la recuperación de residuos. Nosotros vamos a trabajar con ellos para recuperar esos residuos del mar y darles una adecuada gestión”.
Nuevos datos para el estudio
La buena disposición de las cofradías de pescadores y el trabajo de sus miembros están ayudando a entender mucho mejor qué ocurre con las basuras marinas, cómo se desplazan los residuos con las corrientes y cómo se almacenan en las costas y en los fondos del mar, ya sean someros o profundos, y también proporciona datos muy valiosos. Datos que Coca-Cola en España está poniendo a disposición de investigadores para que, con ellos, se elaboren estudios científicos y mapas con la localización de residuos que, como es el caso de los plásticos PET, después de recogidos, serán también reciclados e incorporados a la cadena de valor de Coca-Cola. La directora de Responsabilidad Corporativa de Coca-Cola Iberia, Ana Gascón, incide especialmente en esta cuestión: “Mares Circulares responde a la dimensión externa de nuestro compromiso con los envases dentro de la estrategia de sostenibilidad Avanzamos y, en concreto, al objetivo de recoger el 100% de los mismos para que no terminen como residuos, especialmente en los océanos”.
“Mares Circulares es un proyecto de carácter integral y circular que no solo incluye la recuperación de espacios naturales, sino que también contempla la prevención con campañas de sensibilización ciudadana y la generación de estudios científicos y economía circular”, afirma Carmen Gómez-Acebo, directora de Responsabilidad Corporativa de Coca-Cola European Partners Iberia.
En el trabajo de limpieza y conservación de los fondos marinos de especial importancia, como son los de las reservas marinas protegidas, juega también un papel determinante la asociación Chelonia, que ha puesto a disposición del proyecto Mares Circulares varios buzos y marineros voluntarios que en lugares como el almeriense Cabo de Gata, la isla Graciosa, en Canarias, o la de Sāo Miguel, en Azores, siguen sumergiéndose para librar de basura unos ecosistemas tan bellos como frágiles.
Esta noticia, patrocinada por Coca-Cola España, ha sido elaborada por un colaborador de EL PAÍS.