La gripe se relaciona con entre 1.400 y 4.000 muertes al año en España

Raro será que en un certificado médico ponga que la causa de la defunción es la gripe, pero las complicaciones de la infección son determinantes para el fallecimiento de entre 1.400 y 4.000 personas al año en España (la cifra varía según el año por el tipo de virus y factores como la meteorología), según los datos que ha presentado la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) en Madrid.

Que haya sido esta sociedad médica la que ha dado el pistoletazo de salida para la campaña de vacunación de este invierno no es casual. Las personas mayores son, generalmente, más vulnerables ante el virus. Por eso mismo también son de las que más se benefician de la inmunización. En concreto, la SEGG calcula que reduce la hospitalización de personas mayores en más de un 30%, y la mortalidad por todas sus causas en un 50%.

En España, el año pasado, aproximadamente el 60% de los mayores de 60 años se vacunó contra la gripe, una proporción todavía lejos del 75% que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), según la SEGG. Los datos del Gripómetro del Grupo Español de estudio de la Gripe son algo más optimistas, y hablan del 67% entre los mayores de 65 años.

La SEGG insta a todos los mayores a vacunarse, así como a personas con enfermedades crónicas (cardiovasculares o pulmonares, entre otras, enfermedades hepáticas o renales crónicas, metabolopatías crónicas, enfermedades crónicas sanguíneas, neuropatías crónicas, inmunodeprimidos). También aconseja la inmunización a embarazadas y personal sanitario, en este último caso para evitar que se vean afectados (se supone que están más expuestos), y también para que no sean vehículo de transmisión de la enfermedad a pacientes más vulnerables. También aconseja para los mayores la vacuna del neumococo.

La vacuna de la gripe debe administrarse cada año, porque los virus circulantes cambian, y hay que adaptar el antígeno a los predominantes cada temporada.