Privatizar las autonómicas no supondría un gran ahorro, según la FORTA

Solo un 0,5% del presupuesto. Eso es lo que suponen las televisiones autonómicas, de promedio, en los presupuestos de las comunidades autónomas, según ha informado el secretario general de la Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos (FORTA). Enrique Laucirica ha asegurado que la desaparición de estas cadenas no resolverá “prácticamente en nada" los problemas de financiación de las autonomías.

Enrique Laucirica ha reconocido que hay algunas plantillas de las televisoras autonómicas que están sobredimensionadas y que se harán ajustes internos en los próximos meses —como es el caso de Canal 9 de Valencia, que ha anunciado una reducción significativa de su plantilla-. Sin embargo, el secretario de FORTA ha insistido en que no se puede echar la culpa de esta situación a la "mala gestión de las televisiones autonómicas, aunque muchas veces lo parezca".

"Las televisiones autonómicas se han gestionado seguramente tan mal como el resto de servicios públicos", ha señalado Laucirica. Y defiende que la creación de las televisiones autonómicas fue "una demanda social", igual que la prestación de otros servicios públicos como la educación o la sanidad. Las televisiones autonómicas dan empleo a un grupo de 10.000 trabajadores e implican un gasto de 1.000 millones de euros al año. El 75% de su financiación proviene de fondos públicos, según los datos de FORTA.

Sobre la reforma de la Ley Audiovisual, que flexibiliza los modelos de gestión de las televisiones autonómicas, Laucirica la considera "interesante" porque da a la comunidades un "mayor margen" para reformar las estructuras de sus cadenas y "asegurar su supervivencia" en un momento en que tanto los ingresos por publicidad como las subvenciones de las administraciones se han reducido. La reforma de la Ley Audiovisual permite cuatro opciones a las autonomías: externalizar el servicio, suprimirlo, mantener la gestión directa o privatizarlo.

Desde el inicio de la crisis, la inversión publicitaria en medios audiovisuales ha caído un 35% y, según Laucirica, "la mayor parte del sector está en la ruina o camino de la ruina".

Sobre la fusión de Antena 3 y La Sexta, ha dicho que es una disyuntiva. De completarse la unión, plantearía problemas insuperables para el resto de operadores del sector audiovisual, ya que se convertiría en un mercado "dominado por un duopolio"; pero la "no materialización" de la fusión podría provocar la desaparición de La Sexta.

Castilla-La Mancha y Madrid se han pronunciado abiertamente por la privatización. Castilla y León ha dejado en manos de empresarios locales el canal autonómico, pero ni su audiencia ni su situación financiera son ejemplares. Otros operadores tienen en vigor contratos con empresas comerciales para determinados servicios como la publicidad o los programas informativos.