Los defectos en la autofagia celular causan el vértigo
Ratones con déficit de una proteína son incapaces de andar rectos o con la cabeza erguida
La autofagia celular (literalmente, comerse a sí mismo, que es como se denomina el proceso de limpieza y renovación de los tejidos, porque hay que destruir primero los viejos existentes para renovarlos) puede ser nuestro protector para desarrollar vértigos. O, lo que es lo mismo, cuando este proceso no funciona bien, aparecen problemas de equilibrio. Es lo que han descubierto en ratones un equipo dirigido por Carlos López-Otín, del Departamento de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Oviedo.
"Al eliminar el gen que codifica una de las proteasas que regulan el proceso de
autofagia en el organismo, la autofagina‐1, nos sorprendió observar que los ratones
presentaban alteraciones en su comportamiento típicas de los desórdenes del oído interno relacionados con deficiencias en el equilibrio y en la percepción de la aceleración", afirma Guillermo Mariño, investigador asturiano que ha participado en el trabajo y que actualmente se encuentra en el Institut Gustave Roussy de París.
Una de las potenciales aplicaciones de este trabajo en la vertiente clínica es el diseño de
fármacos específicos que puedan activar una autofagia deficiente y mejorar los síntomas de las personas que sufren vértigo. De forma más general, este descubrimiento permitiría avanzar en el tratamiento de otros trastornos relacionados con la disminución de actividad autofágica en las células, explican los investigadores, aunque matizan que las patologías relacionadas son extremadamente complejas y en ellas influyen múltiples factores.
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