_
_
_
_

Los hombres que matan a sus parejas actúan con plena conciencia

Un estudio del CGPJ concluye que sólo en el 8,8% de los casos tenían como atenuante las drogas o las alteraciones psíquicas

Los hombres que matan a sus parejas o exparejas ni están locos, ni son drogadictos o alcohólicos, sino que actúan con premeditación y plena conciencia, y son extremadamente violentos, según un estudio del Grupo de Expertos en Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

Tras analizar 147 sentencias sobre violencia machista, dictadas por los tribunales del jurado entre 2001 y 2005, el estudio concluye que el alcohol, las drogas o las alteraciones psíquicas sólo han sido atenuante del delito en el 3,4 y el 5,4 por ciento de los casos, respectivamente. El estudio concluye que el maltratador suele ser un varón extremadamente violento, de entre 30 y 45 años, que actúa con premeditación y plena consciencia y que suele agredir a la mujer por la noche, especialmente entre las nueve y las dos de la madrugada, una franja horaria que acumuló el 35 por ciento de los homicidios.

El 94,4 por ciento de los asesinatos fueron cometidos por hombres y sólo el 5,51 por ciento restante los llevaron a cabo mujeres. De las 147 sentencias analizadas, sólo una absolvió al acusado (no se demostró su participación en los hechos), es decir, que el 99,32 por ciento de las sentencias condenaron al acusado.

Por nacionalidades, siete de cada diez homicidas eran españoles y el 26,9 por ciento extranjeros, casi la misma proporción que entre las víctimas (70,4 por ciento españolas y 29,5 por ciento extranjeras).

Sólo un ataque

En ocho de cada diez asesinatos, el agresor utilizó un solo procedimiento de ataque (puñaladas, por asfixia o tirando a la víctima por un balcón) y en el 26,1 por ciento restante, combinó dos y hasta tres tipos de agresión para acabar con la víctima.

Además, según el CGPJ, en 55 de los 147 homicidios analizados, el agresor utilizó sus propias manos y mató a su víctima estrangulándola o con objetos contundentes, precipitación o sumersión.

En cuanto al grado de violencia, el informe explica que en los casos en los que se ha asesinado con un arma blanca, el autor apuñala una media de dieciséis veces, lo que denota "brutalidad de la acción" un elevado nivel de violencia en la ejecución de los hechos, destaca el informe.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_