Aumenta la tensión de la polémica de las encinas del Tibidabo
La baronesa Thyssen quiere encadenarse a un ejemplar en señal de protesta
Lejos de solucionarse, la polémica en torno a las encinas del Tibidabo sube de tono por momentos. La Plataforma SOS Tibidabo ha llevado a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña la tala de estos árboles por considerar que el Ayuntamiento de Barcelona, que prevé construir allí una nueva montaña rusa, ha iniciado los trabajos antes del plazo legal.
La portavoz de SOS Tibidabo, Francesca Graells, ha explicado que la plataforma vecinal denunció ayer mismo ante la Fiscalía que los trabajos de la tala de las encinas centenarias se habían iniciado antes del 25 de abril, fecha programada para el comienzo de las tareas.
Aunque el Ayuntamiento ha afirmado que sólo se talarán 58 ejemplares de encinas, SOS Tibidabo dice que son 250 los árboles que caerán a tierra.
Para compensar la tala de las encinas, la concejal del distrito de Sarrià-Sant Gervasi, Sara Jaurrieta, ya explicó que se trasplantarán ocho de los ejemplares y que se plantarán otros 190.
A los dos agentes implicados se ha unido un tercero. La baronesa Thyssen, Carmen Cervera, había anunciado que se encadenaría a uno de los ejemplares para manifestar
su indignación e intentar evitar la tala de árboles, aunque finalmente no ha aparecido "por problemas de agenda" al avanzarse la tala, aunque mantiene su intención de hacerlo, según SOS Tibidabo.
La nueva montaña rusa que se construirá en el parque de atracciones del Tibidabo, y que entrará en funcionamiento en noviembre, consumirá menos energía y será más accesible a personas con minusvalía, según el consistorio.
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