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Detenidos cinco trabajadores de un geriátrico de Málaga por estafar y maltratar a los ancianos

Entre los arrestados se encuentra la directora del asilo, que inyectaba sedantes a las víctimas pese a carecer de titulación

Cinco personas han sido detenidas esta tarde en Alhaurín de la Torre (Málaga) acusadas de utilizar el geriátrico en el que trabajan para desposeer a los ancianos de sus bienes mediante engaños y malos tratos con la ayuda de la directora del centro, que inyectaba supuestamente a los ancianos sedantes pese a carecer de titulación para ello. Dos juzgados de Málaga investigan este caso, que se destapó tras las denuncias interpuestas en diciembre por un matrimonio de ancianos a los que supuestamente estafaron al conseguir que firmaran mediante engaño poderes notariales en favor de los detenidos y de un empleado que en marzo denunció los delitos que se cometían en el establecimiento.

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Según las primeras investigaciones, la directora de la residencia privada Nuestra Señora de Gracia, C.B.J., de 49 años, se encargaba de seleccionar las posibles víctimas, "que generalmente presentaban un mismo perfil, con solvencia económica y sin familiares cercanos". Una vez captados y, con la excusa de tramitarles ayudas económicas, conseguían que firmaran poderes notariales a favor de uno de ellos y obtenían las llaves de sus casas con engaños como regar las plantas o recoger el correo, "tras lo que entraban en ellas y obtenían los documentos y efectos que necesitaban". Según la Subdelegación del Gobierno, la directora "administraba medicación sedante a las víctimas a través de inyectables, careciendo de titulación".

Tanto ella como los otros detenidos "tenían coaccionadas y amenazadas a las víctimas y a los empleados, a quienes obligaban a mantener los castigos corporales a los ancianos". Los detenidos, que están a la espera de pasar a disposición judicial, son la directora, C.B.J., de 49 años, su hijo D.S.B., de 25, sus hermanos R.B.J. y L.B.J., de 54 y 35 años y la pareja de uno de ellos, A.E.R.M., de 28 años. La mujer que denunció a los responsables del geriátrico ha dicho que le obligaron a firmar ante notario unos papeles en blanco tras sedarla y que pusieron su piso a nombre de la directora, que les quitó su documentación, las llaves y la cartilla de ahorros. Josefa Ruiz, de 74 años, ha señalado que, tras administrarle unos sedantes que les dejaban "flojos" y "sin saber" lo que hacían, la llevaron a un descampado, donde la obligaron a "firmar unos papeles ante un notario" que no había visto "nunca".

En trámites de lograr el permiso

Durante las cinco semanas que ella y su marido permanecieron en el centro, comprobaron cómo las condiciones de salubridad eran "muy malas, como la comida" y que hasta nueve ancianos dormían en la misma habitación, donde no eran bien tratados. La residencia, situada en la calle Torrox de la urbanización Pinos de Alhaurín, carecía de autorización de funcionamiento, aunque está en trámites, según la Delegación Provincial de Bienestar Social.

Mientras, la directora, que está mañana ha prestado declaración ante la Guardia Civil, está "preocupada aunque con la conciencia tranquila" porque, en su opinión, ha actuado "correctamente" y se ha interesado por los 27 ancianos del geriátrico, segun ha explicado su abogado, Rafael Gutiérrez. Por su parte, un hijo de la directora ha señalado que "todo es mentira" y que se trata de una "caza de brujas". "Es muy fácil atacar y están destrozando a mi familia y a las de los ancianos", ha añadido.

Hasta el mediodía, diez de los 27 ancianos habían sido ya recogidos por sus familias y se está a la espera de que lleguen más allegados para hacerse cargo de otros internos, mientras que a los que no tengan familia se le realojará en una residencia pública. Éste es el segundo caso de abusos a mayores en este tipo de establecimientos que se detecta en España en abril, tras descubrir hace dos semanas en Gijón que los responsables de una residencia ocultaban en un furgón a ancianos para evitar que los inspectores detectasen la presencia de más residentes de los autorizados.

Algunos ancianos, acompañados de familiares, abandonan el asilo Nuestra Señora de Gracia, en Alhaurín de la Torre.
Algunos ancianos, acompañados de familiares, abandonan el asilo Nuestra Señora de Gracia, en Alhaurín de la Torre.JULIÁN ROJAS

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