Destituida la cúpula del hospital de Leganés por "fallos administrativos"

El informe encargado por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid sobre el servicio de Urgencias del Hospital Severo Ochoa de Leganés afirma que hubo "irregularidades administrativas" y no descarta, aunque no lo afirma, que se produjera una mala práctica en la administración de sedantes a enfermos terminales. Así lo ha indicado el consejero de Sanidad, Manuel Lamela, que ha anunciado por esas irregularidades el cese del coordinador de Urgencias del centro, Luis Montes, al que se apartó del cargo tras una denuncia anónima sobre prácticas médicas incorrectas, del director gerente y el director médico.

Los seis inspectores que han elaborado el informe indican que se han analizado 339 historias clínicas. Entre ellas, se daban 151 casos de pacientes sedados, aunque en tan sólo 94 casos se acredita el consentimiento de la familia en la aplicación de tratamientos sedantes. En el resto, no aparece dicho consentimiento en el informe clínico. Los inspectores señalan asimismo 25 casos de pacientes en los que detectan "incidencias" que van desde sedaciones excesivas a sedaciones no adecuadas o no indicadas, ha explicado el consejero, que ha subrayado que en la gran mayoría de estos 25 casos los pacientes fallecieron antes de 24 horas tras recibir el tratamiento.

Estos 25 casos serán ahora analizados en el contexto de las historias clínicas de cada paciente en una Comisión, formada por médicos del Severo Ochoa y por tres expertos propuestos por la Comisión Superior de Sanidad, que trasladará los resultados de su estudio a la Fiscalía.

Sin evidencias de malas prácticas

El informe de los inspectores concluye que el análisis de las historias clínicas de los pacientes que fallecieron tras administrarles sedación pautada "no permite obtener evidencia suficiente, pertinente y válida, tanto para poder afirmar como descartar la existencia de mala praxis en los facultativos", pues para cumplimentar las historias clínicas no se siguieron las Recomendaciones para la Sedación del Paciente en Situación Terminal. El informe ha sido elaborado a raíz de la divulgación de dos denuncias anónimas sobre supuesta negligencia en la administración de sedantes a enfermos terminales en el hospital de Leganés.

En el ámbito administrativo, Lamela ha explicado que el informe detecta un "cierto caos organizativo" en la unidad de Urgencias "que no puede admitirse" y exige "medidas contundentes", ya que no se han cumplido ni las normas ni los protocolos establecidos, por lo cual la Consejería ha confirmado el cese del coordinador de Urgencias, Luis Montes, que ya había sido apartado del cargo, y ha propuesto la sustitución del gerente y el director médico del Hospital.

Tras conocer el despido del coordinador de urgencias, unos 300 trabajadores del Hospital Severo Ochoa de Leganés han vuelto a concentrarse hoy a las puertas del centro para mostrar su "indignación" contra el consejero de Sanidad por los ceses y destituciones anunciados.