La profesora despedida por casarse con un divorciado denunciará al Obispado por violar su intimidad

Resurrección Galera, la profesora de religión a quien el Obispado de Almería decidió no renovar su contrato por haberse casado con un divorciado, ha anunciado la presentación de dos denuncias contra esta institución, una por violación de la intimidad, y otra por despido improcedente. El marido de Galera, Johan Romes, también ha anunciado hoy que el matrimonio tiene la intención de acudir al Tribunal Constitucional para que se modifique el acuerdo Iglesia-Estado en lo que respecta a la situación laboral de los profesores de Religión.

Resurrección Galera llevaba siete años impartiendo clase de Religión y Moral Católica en el colegio público Ferrer Guardia de la barriada almeriense de Los Llanos de La Cañada, hasta que a finales del pasado curso el Obispado de Almería le aconsejó que abandonara su puesto por haber contraído matrimonio civil con un divorciado.

Esta mañana Galera ha acudido al colegio al no haber recibido aún notificación oficial de su cese por parte del Obispado de Almería. Sin embargo, según fuentes de la Delegación de Educación de Almería, el nombre de Resurrección Galera no aparece en el listado remitido por el Obispado la pasada semana con las propuestas de contratación al Ministerio de Educación, por lo que se entiende que la profesora no será renovada en su puesto.

En declaraciones a los medios de comunicación, Galera ha manifestado que se siente "triste" por la forma en la que ha sido tratada y por el hecho de haber tenido que enterarse a través de los medios de comunicación y no directamente por el Obispado.

Romes ha afirmado que el colegio no ha recibido aún notificación sobre la persona que impartirá este curso las clases de Religión y que el claustro de profesores, que debía haberse celebrado esta mañana, ha quedado aplazado hasta que se resuelva esta cuestión.

Lla profesora no ha recibido ninguna comunicación oficial sobre su situación laboral, aunque se considera despedida, al no aparecer su nombre en la lista de docentes propuestos por el Obispado.

Total discreción

Por su parte, la portavoz del Obispado de Almería, María Casinello, ha asegurado que les asiste el artículo 27.3 de la Constitución, en el que se garantiza el derecho de los padres a demandar la enseñanza de la religión católica para sus hijos en las mejores condiciones.

Con respecto a la queja de Galera de que no se le haya comunicado por escrito su cese, Casinello ha afirmado que el procedimiento es el mismo todos los cursos y en todos los casos, y lamentó que no haya ido por el Obispado en ningún momento para conocer de primera mano su situación.

La portavoz del Obispado ha insistido en que la Iglesia ha actuado con total discreción y que si el caso se hizo público fue porque ella misma lo denunció a la prensa.

Por último, ha destacado que no se trata de un despido y que el Obispado, en su afán de tratar el asunto desde el punto de vista humano, propuso a Galera que continuara en su puesto hasta completar el pasado curso, con el compromiso de que renovara el contrato en cuanto consiguiera su esposo la anulación de su anterior matrimonio para que su vida se ajustara a los preceptos de la Iglesia católica.

Desde el sindicato UGT el secretario general de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza, Jesús Ramón Copa, ha calificado hoy de "escandaloso y kafkiano" el hecho de que la Iglesia no renueve el contrato de trabajo a una profesora por haberse casado con un hombre divorciado, cuando ha admitido al arzobispo de Lusaka (Zambia), Emmanuel Milingo, tras casarse con una mujer por el rito de la secta Moon.

Sin embargo, Copa ha reconocido que en el caso de la profesora de Almería "no se puede hacer nada desde el punto de vista jurídico porque no se trata de un despido, sino de una no renovación de un contrato con fecha de finalización", pero ha anunciado el sindicato "mantendrá las presiones" para que el Gobierno "haga algo", dado que "el Ministerio de Educación tiene una responsabilidad enorme".