La NASA lanza su tercera sonda espacial en dos años para buscar agua en Marte
La 'Mars Odyssey' entrará en órbita del planeta rojo en octubre tras un viaje de 644 millones de kilómetros
Las dos naves dadas por perdidas en 1999 no fueron las únicas. En total, sólo dos de las cinco misiones estadounidenses al planeta rojo en los años noventa fueron satisfactorias.
Un cohete que despegó ayer de una base militar en Cabo Cañaveral, en Florida, fue el encargado de poner en órbita la nave.
Una cámara instalada en el fuselaje exterior del cohete Delta II ofreció imágenes en directo de las diferentes fases que el lanzador iba experimentando en su ascenso hacia el espacio. Pese a que se necesita cerca de una hora para saber si se ha logrado la puesta en órbita, el lanzamiento fue calificado como un éxito.
"Es un momento excitante. Volvemos a Marte", declaró nada más despegar la nave Jim Garvin, el científico jefe en el Programa Científico de exploración de Marte.
La sonda Mars Odyssey entrará en órbita de Marte en octubre tras un viaje de 644 millones de kilómetros. La nave no está destinada a aterrizar. Sus tres instrumentos darán datos sobre los minerales y rastrearán el elemento hidrógeno aun a varios centímetros bajo la superficie, para aclarar si hay o no agua o hielo. Y Mars Odyssey medirá la radiación de Marte, así como las zonas calientes del planeta.
No se espera, sin embargo, que desvele el pasado de Marte, ni que zanje la cuestión de la vida. La nueva misión está pensada más para responder cuestiones de principios de los noventa que para construir sobre lo que se sabe ahora. Eso queda para las misiones de 2003, el auténtico año marciano. Si todo sale según lo previsto, en 2003 llegará a Marte primero la europea Mars Express, que estudiará la atmósfera, la composición de la superficie, y también buscará agua.
Además posará una sonda en el suelo del planeta y tomará muestras. La japonesa Nozomi llegará una semana después, y los estadounidenses llevarán dos vehículos todo terreno para que recorran la superficie. Son el residuo del complejo plan de exploración de la NASA que ha sido revisado tras los fracasos de la década pasada.
El parecido con la Tierra
Marte, el cuarto planeta en proximidad al sol de nuestro sistema solar posee, pese a su atmósfera inhóspita, muchas similitudes con la Tierra, lo que le convierte en uno de los mejores candidatos para la búsqueda de vida.
"Desde hace 10 años ha renacido el interés por el tema de la vida en Marte porque se sabe que este planeta fue muy parecido a la Tierra, y por las posibles evidencias de organismos fósiles hallados en meteoritos marcianos. Marte es efectivamente un planeta idóneo para buscar vida", dice Agustín Chicarro, jefe científico de la misión de la Agencia Espacial Europea a Marte, prevista para 2003.
Pero el parecido del planeta con la Tierra se quebró en un momento en el tiempo: "Hace 3.800 millones de años hubo un cambio climático que lo transformó. En 100 millones de años pasó de ser un planeta cálido y húmedo a cómo es hoy, seco y frío", explica Chicarro.
¿Para cuándo lo de la vida?. "Pues se habla de 2011, pero con los últimos fracasos todo eso está muy en el aire", dice Chicarro.
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