Por qué este año ha sido el del desnudo masculino en la tele
Las series han roto en 2015 uno de los tabús de la pantalla: mostrar a los hombres (y no sólo a ellas) en pelota picada frontalmente.
Sigue siendo algo tan marciano de ver que cada vez que aparecen (fugazmente) en pantalla la audiencia se sobresalta extrañada, con la sensación de que se la han colado a lo Club de la lucha. ¿Era ‘eso’ lo que creo que acabo de ver, verdad?, se preguntan atónitos. No disfrutarán del mismo éxito que el festival de pechos femeninos y pubis al aire en la ficción televisiva (a ver quién se altera por ver a una mujer sin ropa en 2015), pero este ha sido un buen año para quitarse tabús en las series, que se han animado a incluir, tímidamente, el desnudo integral frontal masculino en sus ficciones. ¿Se podría decir que 2015 ha sido el año de los penes al aire (y sin prótesis) en la ficción de la pequeña pantalla estadounidense? Sí, totalmente. La lista es abultada. Tal y como ha recopilado la revista New York, los hemos visto en The Affair, The Leftovers, Outlander, Flesh and Bone, Sense8, Shameless, Togetherness y Penny Dreadful.
Un año de exhibición sin tapujos en la televisión, con naturalidad y en la antípodas de lo que se cuece en el cine más comercial. Si no lo ha hecho la supuesta cinta de alto voltaje erótico de 2015, ¿quién se atrevería a hacerlo? Jamie Dornan dejó claro por dónde van los tiros cuando dijo que su «paquete» no saldría en 50 sombras de Grey porque la voluntad era «llegar al máximo de audiencia posible sin asquearles y no hacer algo gratuito, feo y gráfico» (curiosamente, los productores no pensaron que era algo «feo y gratuito» enseñar a Dakota Johnson totalmente desnuda en reiteradas ocasiones de la película). Kevin Bacon puso cara a uno de los virales del año con su #FreeTheBacon cuando denunció, en tono cómico y paródico, la desigualdad de despelote entre hombres y mujeres en el cine y la televisión y exigió que los tíos también querían desnudarse. Las chicas de Juego de Tronos también han hecho campaña por acabar con el «mandato de las tetas» (boobs mandate) en la HBO, cadena sobre la que se cuestionó mucho la cosificación que hacía del cuerpo femenino a propósito de la primera temporada de True Detective y hasta John Nieve se posicionó a su favor. ¿Qué ha cambiado para que estas plegarias hayan sido atendidas?
Por un lado tenemos a productores con ganas de igualar la balanza y con sensibilidades bastante alejadas de los estudios de mercado de Hollywood. Mark Duplass, protagonista y creador de Togetherness de la HBO (emitida en Canal+), tiene un largo recorrido en el cine indie –él y su hermano Jay crearon el mumblecore, aquel género que encumbró a Greta Gerwig–, no se ha cortado en protagonizar un desnudo (más incómodo que sexual) en su propia serie. En su show han establecido una medio broma llamada ‘balls equality’ (las bolas de la igualdad) que vendría a ser que cada vez que se ve un par de tetas o un pubis en pantalla, ellos tendrán que plantear una escena en la que también haya un desnudo masculino. «A los productores masculinos les gusta más ver un par de pechos que cualquier parte de la anatomía masculina», lamenta cada vez que se le ha preguntado por su desnudo y por qué él ha roto la tendencia.
Damon Lindelof, creador de The Leftovers (también en la HBO y en España en Movistar+), reivindica la naturalidad del desnudo masculino. «Es como si la línea fina que separa el arte y el porno sea ver la polla de un tío. Eso es lo que nuestra cultura ha decidido», ha denunciado en la revista New York. Desde The Affair, la productora Sarah Treem resta importancia a sus desnudos frontales y asegura en la publicación que vivimos en una «población puritana» y añade que la polémica escena de la segunda temporada de la serie en la que se ve el pene del nuevo amante de Helen (Maura Tierney) fue una decisión igualitaria. «Jeff (Reiner, productor ejecutivo) insistió en hacerlo. Me dijo ‘enseñamos a tías desnudas todos los días en el show, ya viene siendo hora de enseñar a tíos desnudos».
A algunos les sorprenderá comprobar cómo la mentalidad de los ejecutivos de la televisión por cable ha cambiado en un periodo tan corto de tiempo. Al cómico Louis CK la jugada igualitaria no le salió tan bien en 2006, cuando decidió salir en pelota picada en su serie después de que la HBO le pidisese si podía incluir desnudos en el show. «Lo que realmente querían decir era: ¿Por qué no Pamela Adlon (que interpretaba a mi mujer) se despelota? Cuando contraté a Pamela, no le dije que ella tenía que hacer algo por el estilo. No se suponía que fuese una serie de ese tipo. Así que me desnudé yo, grabamos el episodio y ellos reaccionaron como Ok, ya hemos tenido suficiente, gracias«, explicaría después al New York Times. Jeffrey Schwartz, director del documental de la HBO Vito (sobre la vida de Vito Russo, autor de El celuloide oculto) aclaró a la revista Frontiers el porqué de no mostrar desnudos integrales masculinos. «Es más una cuestión económica que de censura. No quieres apartar a la audiencia, y mientras se sienten perfectamente cómodos viendo una escena sexual con un desnudo femenino, hay una pequeña porción de población que no se sentará delante del televisor para ver lo mismo, pero con un hombre».
Tiembla, Jamie Dornan, ahora que la televisión por cable está transformando toda la herencia de la mirada masculina en la pantalla, puede que el cine se anime a hacerlo también y entienda que despelotarte en una cinta erótica como 50 sombras más oscuras no sea algo «sucio y feo». Son cosas del guión, pregunta si no a tu compañera de escenas de cama. Ella ya tiene experiencia en esto.
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