La polémica de los predicadores 2.0: deportivas de lujo, ‘likes’ y celebrities

Deportivas de lujo, likes y religión: estos son los elementos que conforman la Santísima Trinidad de una cuenta de Instagram que con apenas un par de semanas de vida cuenta ya con más de 135.000 seguidores. Hablamos de @PreachersNSneakers, que ha despertado un debate acerca del materialismo existente en la cristiandad al revelar los astronómicos precios de las deportivas que lucen algunos de los pastores norteamericanos más populares entre los millennials.

Deportivas conflictivas

La controversia surgida a raíz de esta cuenta es la responsable de que muchos hablen de ella como “el nuevo Diet Prada”, aunque la cruda -¿o es bendita?- realidad es que su creador no solo desconocía la existencia de la misma, sino que creó la suya sin ninguna intención reinvidicativa. “No comparto su naturaleza combativa y siempre intento frenar cualquiera de las peleas que surgen en los comentarios de mis posts”, aclara su creador, que prefiere permanecer en el anonimato. ¿La razón de esta deseo? “La cuenta ha tomado tales dimensiones que se me ha ido de las manos y ha creado una controversia a nivel internacional que no entraba en mis planes”, nos dice su autor. “La queja habitual es que la cuenta promueve la ira hacia la Iglesia y sus pastores. Al principio pensé que estaban exagerando, pero ahora entiendo el nivel de acoso que esta situación ha volcado sobre algunos de los pastores que aparecen en la cuenta y espero poder reconciliarme con ellos”, dice con cierta tristeza. Uno de los afectados por los mencionados comentarios negativos fue el pastor de la Iglesia Hillsong en Los Ángeles, Chad Veach, que aseguró en los comentarios de la fotografía en la que luce unas Jordan 1 Retro High Off-White Chicago -valoradas en más de 2.000 euros- que esas deportivas fueron un regalo, y aunque lo cierto es que Hillston no cuenta con voto de pobreza, el pastor borró su comentario posteriormente y cambió su cuenta de @chadvcveah a @chadveach.

El motivo de la polémica de sus posts radica en que algunos de los pastores más populares entre las celebridades, como John Gray, lucen las deportivas Air Yeezy 2, valoradas en más de 5.000 euros, por lo que el creador de la cuenta sintió la necesidad de que aquellos de los que donan una décima parte de sus ingresos a la Iglesia en América -Hillsong, por ejemplo, defiende los principios de diezmos y ofrendas- supieran dónde terminan sus donaciones: “En realidad empecé la cuenta como si fuera una broma al ver a un pastor llevar unas Yeezy 750. Fue entonces cuando me di cuenta de que muchos pastores llevaban diseños de streetwear que eran pura tendencia, aclara el creador de PreachersNSneakers, que ha sido entrevistado para un par de medios americanos y que ante su primera entrevista española, parece haber limado de asperezas su discurso, pues sus respuestas huyen de la polémica. “No voy a hablar acerca de si me parece correcto o no que los predicadores luzcan estos diseños, porque no voy a hacer como que sé cuál es la respuesta correcta. Intentar decir lo que es o no apropiado es un terreno resbaladizo cuando no tienes la información necesaria”, dice tajantemente.

El creador de la cuenta sintió la necesidad de que aquellos que donan una décima parte de sus ingresos a la Iglesia en América supieran dónde terminan sus donaciones.

Cuando la Iglesia es el nuevo Coachella

Según el estudio Generación Z: la cultura, las creencias y las motivaciones que moldean a la siguiente generación de Barna Group, afiliado al Impact 60 Institute, esta generación es la primera ‘post-cristiana’ de los Estados Unidos. Aunque en el trabajo se señala que el 59% de la Generación Z en los Estados Unidos se identifica como cristiano, frente al 68% de los adultos, solo uno de cada 11 adolescentes asegura ser un “cristiano comprometido”.

En plena crisis religiosa, los predicadores han hecho de la tendencia más popular entre los millennials y la Generación Z su aliada. Hablamos, cómo no, del streetwear. Deportivas de coleccionista se combinan con diseños Saint Laurent, de la colaboración de Supreme y Louis Vuitton y de la firma Fear of God que, como asegura el ya icónico pastor Carl Lentz, funciona como un auténtico Caballo de Troya: “La gente no se da cuenta de su mensaje cristiano hasta que se lo encuentra en la cara”, dice de las creaciones de la marca. Esta estrategia troyana parece estar funcionando, pues Gigi Hadid y Jay Z lucen con orgullo sus diseños, que también vemos en los predicadores de la era Instagram y que cuentan con la asesoría del pastor Wilkerson Jr, que ofició la boda de Kanye West y Kim Kardashian.

Por si fuera poco, el nuevo church look sirve ya a las fashionistas como una nueva etiqueta con la que definir sus conjuntos. Hailey Baldwin publicó con orgullo en Twitter una imagen en la que lucía una cazadora perfecto de ante con vaqueros -un outfit que antes habríamos tildado de rockero- como un look perfecto para la iglesia. “Lo más divertido de este look es que parece que llevo un mood tipo ‘Me he casado con alguien que va a la iglesia Hillsong”. Un mensaje claramente visionario, pues Hailey está ahora casada con Justin Bieber, que contó con la asesoría de Jerry Lorenzo para crear la colección de merchandising de su tour Purpose. Si te hiciste con alguna de las prendas de dicha colección, que estuvieron a la venta en H&M, recibiste el mensaje troyano del que el pastor Lentz hablaba y la Iglesia ha terminado colándose, literalmente, en tu armario justo en un momento en el que salir del mismo en materia religiosa es más tendencia que nunca.

El cantante dio un giro a su vida cuando, tras sumirse en un torbellino de excesos, fue bautizado a las tres de la mañana en el baño de un jugador de baloncesto por Carl Lentz (630.000 seguidores en Instagram), que lidera la iglesia neoyorquina de Hillsong, una iglesia de origen australiano con dos millones de seguidores fundada en 1983 por los pastores Brian y Bobbie House. Al echar un vistazo a sus redes sociales es difícil distinguir si te hallas ante una cuenta de contenido religioso o ante el perfil del Festival del Sónar. Atractivos millennials disfrutando de multitudinarios conciertos, sesiones de DJs bañadas por luces de león y packs para “llevar el gospel al hogar de aquellos que todavía no han visitado el hogar” compuestos por mensajes religiosos, camisetas o calcetines hacen difícil comprender que Hillsong sea una Iglesia. Pero lo es y presume de campuses -como ellos los llaman- los domingos en el madrileño Teatro Gran Maestre y en la Sala Astoria de Barcelona. “Vamos a ir primero de todo a Lucas, capítulo 18. Si tienes tu Biblia, guay por ti, la puedes abrir, y sino aquí detrás van a parecer los versículos”, comienza uno de sus podcasts. “La Iglesia Hillsong existe para alcanzar e influenciar el mundo a través de la edificación de una gran iglesia Cristo-céntrica, basada en la Biblia, que cambie mentalidades y equipe a las personas a liderar e impactar en todos los ámbitos de la vida”, reza su página web.

Las misas de los domingos de Hillsong se construyen a base de conciertos masivos con asistentes ataviados con sus mejores galas y pastores hablando a su público con diseños de marcas de renombre bajo la luz de los neones. Vanessa Hudgens, Kendall Jenner y Chris Pratt son algunos de sus fervientes seguidores.

Kanye West aseguró una vez que si hablaba de Dios, no podía poner sus álbumes, razón por la cual decidió montar sus ya famosos ‘Sunday services’ los domingos. El último su particular misa tuvo lugar en la madrugada en el Festival de Coachella, y es en estos servicios donde Kanye West luce sus diseños convirtiendo también su paréntesis espiritual en un escaparate para su marca. El coro gospel que lo acompaña cada semana luce modelos de Yeezy mientras el rapero reinterpreta algunos de sus temas en clave espiritual junto a diversos artistas de hip hop, cantantes gospel como Fred Hammond y productores musicales como Frank Dukes. Por supuesto, todos los presentes sobre el escenario llevan sus deportivas Yeezy.

Las localizaciones cambian cada semana -la sede central de Adidas ha sido uno de los enclaves elegidos- y Kim Kardashian, que se convierte en la improvisada testigo audiovisual de estas citas semanales, se ha encargado de explicar al público en el programa de Jimmy Kimmel de qué se tratan realmente los ‘Sunday services’ de su marido: “Es una experiencia sanadora, una experiencia musical en la que no se reza. No hay sermones ni palabras, solo un sentimiento cristiano”, sentencia Kardashian.

Espiritualidad, moda, música y decorados dignos de Pinterest como los que promueve la cuenta Bibles x Coffee son las nuevas armas de la religión para atraer a las nuevas generaciones. Si la espiritualidad comienza a ser el nuevo filtro Valencia de Instagram, quizá pronto entendamos el like como el nuevo ‘amén’.