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Las zapatillas de andar por casa son el nuevo lujo

Todo empezó con una versión peluda de las Birkenstock de Céline. Ahora Isabel Marant arrasa en ventas con un modelo muy ‘hogareño’.

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Si bien entre las bondades de la moda está el convertir en deseable aquello objetivamente ridículo, por feo, extremado, o excéntrico, todavía mayor es su poder para hacer de aquello ordinario algo inexplicablemente exquisito. Algo así es lo que está pasando en estas últimas temporadas con los llamados ugly shoes, ese tipo de calzado sport, técnico, o de uso hasta el momento exclusivamente doméstico; anodino y mayormente antiestético, poco atractivo, que no hemos parado de ver sobre las pasarelas. Se confirma así que las tendencias más estrambóticas y difíciles suelen ser pasajeras, puntuales, mientras las que llegan para quedarse tienen siempre un componente extra como es ,en este caso, y en el de la fiebre por la moda deportiva en general (y ahí está Karl Lagerfeld subiendo sus propias zapatillas de running a un desfile de Alta Costura): la comodidad.

Cuando empezamos a ver pantuflas, chancletas de piscina y sandalias ortopédicas en los desfiles, el verano pasado, nunca creímos que saldrían de allí. Pero empezaron a invadir las calles, aunque fuera momentáneamente y de la mano de modelos, estilistas y blogueras. Este invierno hemos llegado incluso a ver cómo el calzado feísta hacía su primera gran incursión sobre la alfombra roja de la mano de Tilda Swinton. Comentadísimas fueron las sandalias planas de plumas que se puso para el estreno de "El gran Hotel Budapest" durante el Festival de cine de Berlín. El calzado formaba parte de un estilismo firmado de pies a cabeza por Schiapparelli. 

Phoebe Philo fue la primera en darle una vuelta de tuerca a las Birkenstock, esas sandalias con plantilla anatómica que han pasado de las farmacias a los pies de fashionistas de todo el mundo, y estas se han seguido sofisticando, porque esa es la gracia y la manera de diferenciarse, de la mano de firmas como Houghton, Isabel Marant, Giambattista Valli o Givenchy (Riccardo Tisci apuesta por un modelo de lo más literal y lo estampa con las flores de su colección). La diseñadora francesa ha hecho de las sandalias Holden, tipo zapatillas de estar por casa, no muy diferentes a aquellas también cruzadas con cuña y de felpa que llevaban nuestras abuelas, el calzado estrella de su línea más comercial.  Con apenas unas semanas a la venta, y a pesar de que cada par cuesta 290 euros, el modelo está completamente agotado. Casas como Prada, Marni, MSGM, Christopher Kane e incluso Lanvin y de nuevo Céline, apuestan por sandalias acolchadas, con (doble) suela de espuma, o de caucho. Alexander Wang incluso se ha atrevido con una propuesta en esa misma línea, más concretamente una versión refinada de las clásicas Teva multivelcro, para Balenciaga. Marc Jacobs, por su parte, ha reinventado las ordinarias chancletas de piscina, le ha puesto pompones a las chinelas y ha intentado que combináramos vestidos de lentejuelas con sandalias de suela de goma

Esta primavera los zapatos feos se juegan su suerte en las principales cadenas de ropa. Allí pasarán la prueba de fuego del gran público, quien decidirá si encaja y compra, como ya hizo anteriormente con las planaformas, las cangrejeras, slippers, alpargatas o albarcas, el nuevo concepto de pretty ugly.

Karmen Pedaru es al protagonista de la campaña Primavera/Verano 2014 de la línea Étoile de Isabel Marant-

Isabel Marant Étoile

¿Son o no son las «Holden» de Marant una versión deluxe de las zapatillas de felpa?

Isabel Marant/Zapatop

Aunque tratándose de feísmos, Miuccia Prada «did it first» para la colección Primavera/Verano 2006 de Miu Miu…

Miu Miu

Las Arena rubber sandals de Balenciaga reversionan las gladiadoras que popularizó Ghesquière en la maison, aunque con un toque Teva.

Barney’s

Las Birkentock de leopardo que propone Giambattista Valli en su colección Crucero 2014.

Giambattista Valli

fotografozara1

Los modelos de Zara que ya están tiendas.

Zara

La firma italiana MSGM y sus Teva multicolores para la Primavera/Verano 2014.

MSGM

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