“Quiero tiempo para mí”: El fenómeno de los retiros de bienestar

Querer romper con todo. Aunque sea por unos días, quizás tan solo unas horas. Ese mito moderno de abandonar la rutina y los quehaceres diarios para reconectar con partes olvidadas de nuestro cuerpo ha dejado de ser una fantasía, y cada vez más personas reividican su derecho a dedicar tiempo para sí mismas. “El retiro y la meditación es una de las tendencias que más ha crecido dentro del sector turístico, los llamados viajes de bienestar”, declaró al diario New York Times Beth McGroarty, vicepresidenta de investigación de Global Wellness Institute, la organización sin ánimo de lucro que promueve el bienestar mundial a través de la educación. En ese mismo artículo la escritora e instructora de mindfulness Caren Osten Gerszberg relataba en primera persona los beneficios que obtuvo tras experimentar un retiro a las afueras de Boston. Allí aprendió a tomar conciencia de cada paso, cada bocado, cada respiración para obtener una visión de la vida sin distracciones. “Piensa en ello como un spa para la mente”, fueron sus palabras después de vivir una semana alejada del móvil y compartir una vida austera en un monasterio alejado del mundanal ruido.

Leire (40 años), diseñadora afincada en Madrid, pedía un respiro a su ajetreada vida cuando decidió emprender su primer retiro hace unos meses: “Pasaba por un momento muy estresante y me apetecía compartir un viaje hacia dentro, guiada por mujeres que me inspiraran”. Ese deseo de dirigirse una mirada más introspectiva le llevó a “dejar todo” por unos días y embarcarse en el retiro de MasQi, en el Parque Natural de la sierra de Mariola, entre Alicante y Valencia. Una especie de boutique resort donde el silencio solo se trunca por el sonido de los pájaros o los golpes del gong que conducen las meditaciones. Bautizada como The Energy House por su socia y fundadora Sonia Ferre, esta masía del siglo XIX rodeada de pinos y encinas ofrece en varias jornadas desde cursos intensivos de yoga a planes depurativos para el organismo, programas para aprender a aliviar el estrés diario o incluso una residencia para teletrabajar en contacto con un entorno natural. “En MasQi proponemos aprender a vivir la vida de una forma más saludable, más plena, consciente y en calma”, señala su fundadora. Una especie de balneario para mente y cuerpo en el que compartir el aprendizaje y la experiencia junto a otras personas que son conscientes de que necesitan un cambio, pero no saben muy bien por dónde empezar.

La experiencia vital de Sonia Ferre es un ejemplo. Tras una vida dedicada al mundo empresarial, decidió romper con todo y dirigirse a la meditación y la búsqueda de una alimentación más saludable. Se formó como profesora de yoga y modalidades energéticas como reiki y radiestesia en India, además de especializarse en alimentación macrobiótica. Un tiempo después pondría en marcha MasQi, un refugio que ofrece terapias alternativas como la ayurveda o la bioenergética –la práctica que ayuda desbloquear problemas emocionales trabajando cuerpo y mente– pero, sobre todo, persigue ayudarnos a desconectar. Esa fue la primera impresión que Leire obtuvo al llegar: “El sitio transmite paz, te inspira y hace conectar de forma muy potente contigo misma. Un bienestar general en el que me sentí siempre cuidada, desde la alimentación comiendo cosas ricas y sanas a los bailes o la terapia de bosque. Es un lugar mágico”. Galardonado con el premio internacional Condé Nast Traveller al Mejor Retiro Holístico de 2020, la nutrición ocupa un esencial en su programa, con un menú diario de cocina creativa –en su mayoría vegana– que sigue los principios macrobióticos, como el consumo de verduras cultivadas localmente y solo de temporada. Los precios rondan los 626 euros por persona para dos noches, una tarifa que incluye alojamiento con pensión completa junto a tres actividades y un masaje o terapia. “Todo se vive en un entorno natural, lleno de energía donde el silencio y el descanso acompañan al viajero”, explica Ferre.

Mimar nuestro cuerpo desde el estómago es un punto ineludible del retiro que acoge la casa rural Las Chimeneas en la región granadina de La Alpujarra. Anclada a 1.500 metros de altitud entre carreteras que serpentean la cruda anatomía de Sierra Nevada, sus dueños de origen británico quedaron prendados de la zona tras un año sabático viajando y decidieron quedarse a vivir aquí. Poco a poco adquirieron propiedades en el pueblo reformándolas en un complejo de alojamiento rural y lugar de encuentro para cursos y retiros; el más popular lo imparte la profesora sueca Kia Naddermier (toda una institución de la disciplina ashtanga yoga en Francia al frente del espacio Mysore Yoga Paris), al que se sumó en la parte de gastro Araceli Martín Chicano, fotógrafa y creadora del catering Festín que realiza cenas temáticas en Málaga. Durante un mes esta malagueña se encarga de diseñar los almuerzos que ofrece el retiro, basados en platos casi siempre vegetarianos y cocinados con alimentos de temporada que van más allá del simple gesto de comer. “Intento ofrecer una experiencia donde mi comida ayude en su proceso creativo personal, según lo que necesiten o cómo esté enfocado el programa, y siempre con especias, aromas y matices que también puedan trasladarte a otras culturas. Busco un hilo conductor en mis platos y me gusta explicar lo que van a comer y de dónde viene ese sabor”. Esa sensación de plenitud y calma fruto de habernos dedicado un tiempo a nosotros mismos y cuidarnos por dentro, explica Martín Chicano, es una de sus consecuencias: “Durante los días que estás aquí no tienes que preocuparte por nada más, sólo de disfrutar y compartir con los demás”. Su próxima fecha será del 16 al 28 de agosto, y ronda los 1.000 euros en función del tipo de alojamiento a elegir.

Menorca, el ‘rey’ de los retiros

El Mediterráneo y las Islas Baleares están de moda. Ese estilo de vida sosegado que desprenden al imaginarlos, sinónimo de artesanía y afán por los pequeños detalles, de pueblos empedrados y calas azul turquesa, conquista el mundo y se posiciona como un paraíso mental al que huir cuando fantaseamos con desconectar de todo. Cuando Cristina Lozano planeaba dar vida a su alter ego, una “señora inglesa” en forma casa de huéspedes llamada Cristine Bedfor (Infanta 17, Mahón) tenía claro que Menorca ocuparía su lugar, una tierra en contacto con la naturaleza y el mar que se sintiera como una segunda vivienda para sus invitados. Los retiros de yoga se sucedieron casi de forma lógica, al que fueron añadiendo actividades como talleres botánicos, encuentros de lectura, caminatas y sesiones de meditación. “Con los retiros buscamos que nuestros huéspedes desconecten unos días para volver a recargar pilas y se dediquen a sí mismos el tiempo que a veces no les permite su ajetreado día a día. Todo ello en una localización tan especial como la naturaleza que rodea a Menorca”, explica su equipo. Su universo al completo incita a la calma, decorado junto a su amigo el interiorista Lorenzo Castillo, desde las sábanas bordadas a los ramos de flores recién cortadas o el jardín que alumbra cada habitación por la mañana. Su objetivo es ayudarnos a centrar la mente y conectar con nuestra energía de la mano de expertos en diversas disciplinas; en el último encuentro celebrado a finales de primavera incluyó un taller sobre aromaterapia con aceites esenciales conducido por Mariona Esentiam.

Sin dejar el lado más septentrional de la isla, el mar es el eje del retiro de dos días que propone el hotel Barceló Nura (Carrer Biniancolle, 0803). Cada jornada comienza una clase de yoga al aire libre, en un punto cercano al mar como un pequeño puerto de pescadores o sobre la arena. “Somos conscientes de los enormes beneficios para la salud que ofrece el mar para reducir niveles de estrés y obtener una mayor concentración”, explican desde su centro de wellness. Aquí realizan una consulta sobre el estado físico del cliente y un diagnóstico de la piel, tanto de rostro como de cuerpo antes de determinar el tratamiento más adecuado en cabina acompañado de un circuito de spa. “Como punto de partida solemos hacer un tratamiento a base de algas, rico en minerales vitaminas y oligoelementos para desintoxicar y remineralizar el cuerpo. Finalizamos con un ritual sensorial diseñado con sales de Fornells y aceites esenciales a la carta”. Para ejercitarlo y oxigenar la mente organizan desde paseos en catamarán al atardecer hasta rutas de senderismo sobre los camís de cavalls de la isla, senda históricas que se utilizaban para defender la costa de las incursiones piratas desde el siglo XIV.

Fernanda de la Puente, todo un referente del yoga alternativo en Instagram, es fiel a las Baleares a la hora de plantear sus retiros que estimulan cuerpo y mente. Tras su paso por Ibiza en Can Domo (Ibiza), el próximo retiro de la creadora del estudio Asana Groove, en el barrio de Salamanca, tendrá lugar en Menorca entre el 14 y 19 de junio. El lugar elegido será Es Bes d’Aguila, en el corazón de la isla, una exclusiva finca que alberga una granja orgánica donde impartirá durante seis días clases de meditación sonora y Jivamukti yoga, que combina ejercicios vigorosos con una práctica espiritual y ética. Sesiones de danza extática para liberar tensiones y conectar con nuestro cuerpo, paseos a caballo y en barco o clases de cerámica son otras de las actividades que propone la prescriptora peruana, unida a una inmersión sensorial de la mano de Rowse, la marca de cosmética natural asidua a este tipo de encuentros. “Después de un retiro de Asana Groove sales sintiéndote enraizada y contenta, con la mente despejada, el corazón muy abierto y con ganas de vivir la vida más plenamente”, explica De la Puente. Con alojamiento y pensión completa, el precio asciende a 1.650 euros.

La región mediterránea es también un lugar recurrente para los retiros de varios días que organiza Mercedes de la Rosa. Esta veterana en la práctica de yoga que abrió su primer estudio hace 17 años bajo el rótulo de Zentro Urban (con dos sedes en Madrid, Retiro y Chamartín), realiza desde 2019 dos retiros al año que mutan con el cambio de estación. Con esta disciplina como base de sus programas que abarcan desde el poder restaurativo del yin yoga a otras variantes más dinámicas como el hatha vinyasa, De la Rosa define estos encuentros como holísticos, la palabra tan de moda entre escapadas de este tipo donde cada actividad adquiere sentido como parte de un todo. “Queremos crear conciencia de cómo cuidarnos de una manera sostenible y realista, acorde a nuestro tiempo y capacidades. Técnicas que realmente ayuden a vivir de la forma más plena y saludable”, explica a SMODA.

Con el objetivo de cuidar al mismo tiempo cuerpo y mente planifican desde caminatas por la naturaleza a sesiones de meditación o talleres de comida saludable, el último impartido por Gemma Bes, la nutricionista del tenista Rafa Nadal. “Enseñamos trucos y menús para llevar una dieta sana, incluso de cómo elaborar tu propio fermentado. La idea es que todo sea fácil y práctico. Con las vidas que llevamos tiene que ser cosas sencillas que podamos aplicar”, puntualiza. Sin fecha confirmada para el próximo retiro que tendrá lugar en otoño, los encuentros más multitudinarios que imparte De la Rosa tienen lugar a tan solo 15 minutos del centro de Madrid. Conocidos como retiros ZUY se imparten en Vereda de Cortijo (Torrelodones) algunos sábados, y aglutinan clases de yoga, talleres de nutrición, sesiones de baile o meditación en el jardín. “Al ser solo un día resulta mucho más fácil desaparecer, pero te llevas la sensación de haber estado todo el fin de semana”. Con grupos de hasta 30 personas, su perfil más común es el de mujeres entre 30 y 65 años que buscan cuidarse y encontrar herramientas para vivir mejor. La recompensa no es solo a nivel individual, explica De la Rosa, sino que desemboca en vínculos estrechos con el resto de participantes. “Al final te encuentras con personas que tienen tus mismos miedos e inquietudes, y los comentas desde un lugar muy sincero. Esto genera una conexión muy especial y pura entre todos, incluso para las personas que acompañamos”. La cosmética orgánica es otro elemento definitorio de su programa: “Tratamos desde la ayurverda hasta talleres junto a firmas de cosmética botánica como Rassa o Myalma, esta última de productos de higiene femenina de origen orgánico”.

No solo yoga y meditación: talleres creativos
Tras el éxito que despertaron sus talleres de aromaterapia el año pasado, la marca española de cosmética natural Alme Organic organizará entre el 3 y 5 de junio su primer retiro con el poder restaurativo de los aceites esenciales como temática. Una finca privada rodeada por la tranquilidad del Pirineo Aragonés será el enclave de esta y otras muchas actividades destinadas a mantener el estrés bajo control, dejar a un lado la monotonía y salir de nuestra zona de confort además de crear nuevos vínculos afectivos. “Pretendemos crear un espacio dónde puedas parar y escucharte, prestarte esa atención de la que a menudo nos privamos.  Trabajamos el autoconocimiento mediante la meditación y la astrología y después cada asistente formula sus productos de aromaterapia acorde a sus propias necesidades”, explica Miriam Salas, fundadora de Alme Organic. Los precios oscilan entre 300 y 600 euros según el tipo de alojamiento e incluye pensión completa basada en una dieta vegana.

Pero la evasión no solo se consigue estimulando el cuerpo. Los talleres creativos de varios días cada vez ganan más adeptos, un modo de aprovechar nuestro tiempo libre para fomentar la creatividad a través las manos. Andrea Fernández nació y creció en A Illa de Arousa, isla marinera en las Rías Baixas de Galicia donde desarrolla su labor como ilustradora al frente de La Platanera.“No es el escenario más fácil para sacar adelante un proyecto pero este pueblo me han enseñado a ir a otro ritmo, a disfrutar de las cosas hechas de forma pausada, a respirar y pararme para saber qué es lo que realmente quiero”. Aquí realiza también los retiros artísticos donde combina talleres de serigrafía sobre cerámica y dinámicas creativas con clases de yoga, salidas al Parque Natural de O Carreirón y meditaciones guiadas. “El antiguo cuarto para guardar aparejos de pesca de mis abuelos se convirtió en la zona de trabajo y su casa en un espacio abierto para crear, inspirar y ayudar a otras personas a redescubrir su creatividad”. Todo en un ambiente íntimo y familiar para grupos reducidos, que este año contará con cocina vegetariana de autor a cargo de la chef Silvia Sampons, especialidad en arte y salud. “Al contrario de lo que puede parecer no son retiros exclusivos para artistas o ilustradoras. Es un lugar para aprender, disfrutar de la isla, inspirarse y sobre todo prestarles un momento para que puedan descubrir ese lado creativo que tienen, que son capaces de crear con sus manos. Volver a jugar…”, explica. Para ello no precisan ningún tipo de formación siempre que cumplan un único requisito: “Lo que siempre les pido (y lo único importante para mí) es que vengan con ganas. Abiertas a compartir, aprender y vivir la experiencia”.

El precio del retiro completo (incluye alojamiento de tres noches, cuatro días de actividades y pensión completa) es de 620 euros. La próxima fecha será del 25 al 28 de julio y en agosto del 1 al 4 y del 8 al 11.