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El gato arrasa: maullidos en la Red

A Choupette, el minino de Lagerfeld, le ha salido competencia. Internet vive una auténtica obsesión gatuna con estrellas emergentes. Es el año del gato.

Gatos en la red
D.R.

Es como porno para gente que no ve porno», así se definen los vídeos de gatos en el documental Lil Bub & Friendz. La cinta retrata a una felina con una fisonomía peculiar que ha alcanzado el estatus de celebridad en la Red. Su perfil en Facebook tiene 138.000 Me gusta y su cuenta de Twitter más de 15.000 seguidores. La protagonista del filme se paseó por la alfombra roja del festival de cine independiente Tribeca como una famosa al uso. El actor Robert De Niro –uno de los fundadores del evento– no dudó en pasar un rato con la adorable mascota, que incluso concedió algunas entrevistas. Mejor dicho, las dio su dueño, Mike Bridavsky, feliz por la atención mediática. En septiembre presentarán el libro Lil Bub’s Lil Book: The Extraordinary Life of the Most Amazing Cat on the Planet, que ya puede reservarse en Amazon.

«Siempre ha existido fascinación por estos animales, pero Internet los ha puesto a la cabeza de la cultura online», afirma Juliette Eisner, la codirectora junto a Andy Capper de la mencionada película en la que también aparecen otros gatos célebres como Colonel Meow. El persa himalayo ha sido nombrado consejero delegado del portal Buzzfeed.com y sus imágenes con mensaje pueden adquirirse en Colonel-meow.com por algo menos de 12 euros. Este minino sueña con conquistar el mundo; incluso tiene un grito de guerra, la etiqueta #spreadthefrown. Tras su figura, Anne Marie Avey, quien adoptó al coronel en 2011 y le creó un perfil en Facebook. Lo que empezó como una página para amigos ha llegado a conseguir 160.000 Me gusta. A diferencia de los perros, los gatos suelen estar confinados al hogar; y sus dueños han encontrado en la Red un escaparate para enseñarlos al mundo entero. Además, la fascinación que despiertan en la mayoría de los mortales responde a un hecho. «Suelen adoptar las proporciones de un bebé humano y generan más simpatía y empatía que otros animales», comenta Elisenda Ardèvol, profesora de Estudios de Artes y Humanidades de la Universidad Abierta de Cataluña.

El fenómeno nació en 2007. «Siempre han existido en Internet, pero el boom se desencadenó con el ascenso de la popularidad de Youtube. Entonces, los vídeos de felinos comenzaron a recibir millones de visitas. Más tarde se hicieron populares las Lolcats, fotografías absurdas con mensajes de texto», asegura Andrew Emond, creativo de la empresa de branding Q30 design. Maru fue el primer minino conocido de la Red. En 2008 su dueño comenzó un blog sobre este scottish fold. Al año siguiente, creó un canal de Youtube y sus grabaciones se han visto más de 200 millones de veces. Para contactar con esta mascota que ha publicado un libro, I am Maru, y protagonizado anuncios, hay que hablar con su agente.

Calendario de United Bamboo.

D.R.

En agosto se celebrará la segunda edición del Internet Cat Video Festival que el año pasado acogió a 10.000 personas. Según su fundadora, Katie Czarniecki Hill, «su objetivo es disfrutar en grupo con las peripecias felinas». En realidad, comenzó como un experimento. Un test para romper los límites de la comunidad virtual con un proyecto en un espacio real, tomando como excusa el género más popular de la web. La cita se repetirá en Brooklyn a final de año.

Según Elisenda, este fenómeno está relacionado con la espontaneidad del gato. «Es un animal sociable y doméstico, pero que, a la vez, mantiene su autonomía y es muy independiente, lo que genera todo tipo de situaciones inesperadas. Su comportamiento hasta cierto punto es imprevisible», afirma.

Vinecats.com reinventa la fórmula tradicional de ver clips online. Este proyecto del estudio canadiense Q30 design es un portal monotemático en el que aparecen simultáneamente nueve posts de Twitter y Vine. «Cuando se lanzó esta red social nos dimos cuenta de la abundancia de vídeos de gatos. Queríamos construir algo visualmente interesante», cuenta Andrew Emond responsable del sitio que ya dispone de 40.000 usuarios únicos. En Instagram la estrella se llama Snoopybabe. Más de 180.000 personas siguen a diario los cambios de look de este espécimen que, a primera vista, no parece real. Una de sus fans más reconocidas es la joven actriz Maude Apatow.

No sorprende entonces que la palabra gato tenga más búsquedas en la web que Lady Gaga, según indica un estudio de Comunimals, la primera red social para mascotas. «Se pueden crear perfiles para ellos, compartir sus vídeos e incluso buscar amigos por razas o código postal», comenta Katy Linder, responsable de la plataforma. En tres semanas han llegado a los 3.000 usuarios y esperan ser 50.000 en un año.

Más allá del ciberespacio, los maullidos han cautivado a la moda. United Bamboo los utiliza como modelos de su calendario. Con réplicas de la colección en miniatura, 12 criaturas posan para el deleite humano. Pero la fiebre por estos mamíferos pasa por sentirse como ellos.

La última locura para ligar es ponerse una cola peluda. Tailly, como se llama este invento de Shota Ishiwatari, se mueve con el ritmo cardiaco. Su velocidad revela el nivel de atracción de quien la lleva por la persona con la que está tratando. Cuanto más rápido lata el corazón, más acelerado será su balanceo. Hasta el momento, este revelador de la excitación solo se adquiere por encargo en indiegogo.com/tailly.

Tailly, la cola robótica móvil. ??

Cordon Press

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