Cosas que comprar si te tocan 11 millones de euros

Esta noche se ha celebrado uno de esos sorteos que reducen a la nadería el Gordo de Navidad. Todas aquellas que han puesto la excusa de las probabilidades para escaquearse de comprar la obligada participación, que empieza a ventilarse ya por estas fechas en todas las empresas, no han objetado en conciencia, ni estadística, cuando hay tantos millones en juego. Aquello de que "a alguien tiene que tocarle no es ninguna frase hecha" y, sino, que baje el calvo del spot de la ilusión y lo vea.

Pongamos por un momento que esta noche nos ha pasado como al Hugo de Perdidos pero sin la parte del avión, la isla o el humo negro. Pongamos que saldamos nuestras deudas, reflotamos el país y parte del extranjero. Repartimos, donamos, invertimos, regalamos, ayudamos, guardamos y todavía nos sobra un puñado de euros.

Habrá que pensar que, entonces también, llegará el momento de sacar esa lista de la compra custodiada por la utopía que todas hemos hecho mentalmente o por escrito alguna vez, a base de antojos imposibles y fruslerías varias de temporada. Esa especie de carta a los Reyes Magos que libre de mala conciencia, ahorro o financiación todas quisiéramos enviar alguna vez con la esperanza de recibir algo (o todo) a cambio.