¿Y si fin de año fuese el fin del mundo? Así se prepara un apocalíptico para Nochevieja

¿Alguna vez has pensado que harías si llegara el fin del mundo? Una tercera Guerra Mundial, un desastre natural que devastara por completo la Tierra, una pandemia o un colapso económico que paralizara el planeta. Lo que a priori parece sacado de una película de ciencia ficción, se ha convertido en una obsesión para muchos ciudadanos que sólo piensan en cómo sobrevivir ante un apocalipsis que, para ellos, está a la vuelta de la esquina. Se les conoce como preppers, y no son pocos. Según datos de National Geographic, hay más de tres millones de ciudadanos sólo en Estados Unidos que viven su día a día preparándose para la llegada de una gran catástrofe.

El origen de los preppers se remonta a tiempos de la Guerra Fría, cuando existía una inminente amenaza de guerra nuclear entre la Unión Soviética y Estados Unidos. Tener un refugio con provisiones bajo la casa en los años 60 era algo habitual para afrontar una situación que llegó a ser paranoica. Finalizada la Guerra Fría, el ambiente se calmó hasta la llegada del año 2000, cuando muchos apocalípticos comenzaron a hablar de nuevo del fin del mundo. Los atentados del 11-S, la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos y las amenazas de un ataque nuclear por parte de Corea del Norte volvieron a activar todas las alarmas entre estos ciudadanos. Desde entonces muchos proyectan su vida ante la peor de las situaciones.

¿Pero qué necesita un prepper para enfrentarse al fin del mundo? Blogs, canales de Youtube, páginas webs como American Preppers Network o programas de televisión como Doomsday Preppers aportan todas las claves sobre cómo preparar el kit perfecto de supervivencia, qué pasos hay que seguir para autoabastecer tu búnker o cuál es la mejor forma de sobrevivir en plena naturaleza. Estas son algunos de sus imprescindibles para afrontar el fin del mundo si se acabara esta Nochevieja:

1. Almacena suministros para un año. Uno de los principios que defienden las comunidades de preppers es la autosuficiencia ante una situación de desastre. Y una forma de conseguirlo es a través de la compra diaria de cosas esenciales que podríamos necesitar en un caso de urgencia, tanto alimentos, como ropa u otro tipo de enseres. La idea es que la persona que se está preparando para el fin del mundo, vaya comprando poco a poco todos esos productos que puedan permitirle mantener su nivel de vida y comodidad durante al menos 365 días. Para almacenar ese volumen de compras, necesitamos un refugio.

2. Construye un búnker. Tener un refugio donde esperar a que el desastre pase es fundamental para todo preppers. Bruce Beach, uno de los más veteranos de América, está al frente de la comunidad SAFE. Este profesor jubilado construyó Ark Two, un refugio al norte de Toronto, Canadá, con 42 autobuses escolares enterrados bajo tierra y convertidos en apartamentos individuales para afrontar un posible armagedón. Según la web American Preppers Network, lo importante es buscar un refugio lejos de la ciudad y de zonas habitadas, mejor si está en la dirección opuesta a las salidas de evacuación. También recomiendan que sea espacioso -para unas 15 personas- y se empiece a construir a 3 metros por debajo del suelo. Es muy importante ocultarlo bien y no desvelar a nadie el lugar exacto del refugio.

3. Prepara un Kit de emergencia de 72 horas. En la web americana enumeran 5 cosas imprescindibles para preparar este kit: un purificador de agua, una buena chaqueta que evite la hipotermia, alimentos muy calóricos -mejor en lata-, una linterna LED y un botiquín de primeros auxilios. Con todo, para muchos preppers, este kit se puede quedar corto. De ahí que muchos propongan ampliar la lista e incluir cosas como velas, baterías (mejor si son de un camión), una colección de cuchillos de supervivencia, pastillas potabilizadoras, máscaras de gas, cargadores móviles, una radio, cuerdas, toallitas húmedas, abrelatas o bengalas, entre otras muchas cosas -hay quién añade a la lista algún que otro arma de fuego. También recomienda guardar todo en una caja de plástico para evitar que se moje el kit en caso de grandes tormentas.

4. Aprende a sobrevivir en la naturaleza. Para un prepper nunca está de más saber cómo desenvolverse en plena naturaleza, bien sea un bosque, una selva o un desierto. En este caso también se les conoce como survivalistas, ya que centran su supervivencia en desarrollar habilidades más primitivas, como encender un fuego de distintas formas, fabricar utensilios de madera, pescar, cultivar sus propios alimentos o aprovechar otros recursos que puedan encontrar al aire libre. Todo por si los suministros con los que cuentan se terminan o por si su refugio no es suficiente ante una gran catástrofe. Buscan comprender la naturaleza y aprovechar sus recursos para salir adelante, lo que incluye conocimientos más profundos, como por ejemplo, saber qué insectos se pueden o no comer para alimentarse.

5. Mantén tu coche a punto. La situación de caos de una catástrofe puede suponer salir de casa o del refugio donde estés escondido. De ahí que tener un vehículo en buenas condiciones sea un factor importante. Además de tener el mantenimiento al día, hay que equiparlos con recambios, una batería de sobra, el kit de supervivencia siempre en el maletero, un mapa en papel por si falla el GPS, alguna garrafa de combustible, linternas adicionales y varios tipos de herramientas.

¿Preparado para el fin del mundo?