Joe de ‘OT’, sobre C. Tangana: «A nadie le gusta consumir productos maleducados»

Joe Pérez-Orive es músico y director de marketing de la multinacional Live Nation, pero quizá sea más popular entre el gran público por ser el miembro del jurado de Operación Triunfo que siempre lleva chaquetas militares. Tiene modelos distintos para aburrir y, gala tras gala, sus americanas repletas de galones copan el interés del siempre afilado patio de Twitter. Las colecciona dice, desde años, en honor a Jimmy Hendrix y The Beatles. «No son parte del estilismo del programa», asegura, «si me encuentras por la calle cualquier martes por la tarde me puedes ver así». Gran parte de su colección está firmada por la marca española La Condesa y algunas incluso están personalizadas por artistas exclusivamente para él –no es fácil reinventar una chaqueta militar miércoles sí, miércoles también, durante dos ediciones de concurso–. Horas antes de que la Academia de Operación Triunfo cierre sus puertas hasta nuevo aviso, charlamos con él sobre las polémicas que han copado titulares estos meses –C. Tangana o Mónica Naranjo, entre ellas–, el futuro de los participantes de una remesa de aspirantes a priori más descafeinada que la anterior o por qué defiende con pasión la candidatura de Famous como representante eurovisivo. No se moja sobre quién puede ganar, pero sí confiesa cuánto dinero tiene en la cuenta. Llegas tarde, Broncano.

El Shake it out de Amaia marcó la pasada edición. ¿Qué actuación cambió esta?

Para mí los momentazos de este año han sido La llorona de Alba, The Scientist de Natalia y la versión de Bruno Mars (Uptown Funk) de Famous.

¿Consideras que algún concursante de OT 2018 puede igualar el éxito de los de la primera?

A nivel vocal, desde luego, están a la altura de la mejor Amaia, pero juegan con la desventaja de que es una segunda parte. El programa ya no es novedad y pierde un poco de gas, pero demuestran que en España hay mucho talento, en especial en Pamplona por alguna razón.

¿Debería descansar el formato?

Lo fácil y lógico sería decir que sí, pero la televisión es un mundo muy competitivo. Si descansa puede que otros aprovechen el boom que ha despertado la música en directo en televisión y te quiten un poco del medio. Yo siempre estoy a favor de que se hagan cuantas más ediciones mejor porque cuanta más música en televisión, también mejor.

Mónica Naranjo ha calificado esta edición como “coñazo” y ha dicho que OT es un “formato caduco”. ¿Qué opinas de sus declaraciones?

No estoy de acuerdo y creo que mucha audiencia, tampoco. Conociéndola me sorprendieron estas palabras. No corresponden a la Mónica Naranjo que yo conozco y creo que hablar mal de un formato televisivo no beneficia a nadie, ni a ella misma. Hay que tener cierta cautela porque tiene unos compañeros que todavía están en el programa y si afirma que es un «coñazo» también nos salpica a nosotros.

¿Te dolieron sus palabras?

Sí, me costó creer que de verdad las hubiera dicho. No sé si fue un ataque de celos, de rabia o no sé de dónde viene esa reacción.

¿Ataque de celos por no estar en esta edición?

No sé. Normalmente cuando alguien habla tan destructivamente de unos compañeros o de un programa que se ha portado bien con esa persona la única justificación puede ser rabia o celos. Es evidente que un programa donde se cantan canciones de Coldplay, de Radiohead o de Queen, un «coñazo» no es.

¿Ha faltado un villano en el jurado? No has sido tan duro como cabía esperar.

Bueno sí que he sido duro, pero cuando el programa lo necesita, que suele ser al principio. A medida que avanza no es que yo me vaya ablandando, es que van aprendiendo. Esta misma edición he tenido mucha gente en contra de la dureza de mis palabras con concursantes como Joan o Miki por aquella versión que hicieron de The Cure.

¿OT es el sitio para hacer versiones de grupos como The Cure?

OT es el sitio para hacer versiones de música. Debemos perder un poco la diferenciación tan grande entre el mainstream y el indie. Tanto la música clásica como el heavy satánico se basan en las mismas siete notas, solo son dos formas de interpretarlas.

En redes sociales hay muchas críticas hacia el jurado. ¿Has percibido más odio que el año pasado?

Somos los malos del programa y el fenómeno fan siempre ha sido muy exagerado y alzan la voz contra nosotros. Hay gente que nos piropea, pero también nos dicen barbaridades. Y ha habido muchos escándalos como ‘mariconez’ en los que hemos tenido ejércitos de críticas, pero es parte del juego y sabíamos a lo que nos exponíamos.

De hecho muchos tuiteros se te echaron encima por mojarte públicamente a favor de Ana Torroja. ¿Volverías a hacerlo?

Sí, por supuesto, una y mil veces. Una de las razones por las que la música goza de buena salud es porque hay leyes que la protegen y protegen a los que la crean. Los autores tienen derecho a vivir de algo y cuando ocurrió el fenómeno ‘mariconez’ no es que lo dijera yo, es que lo dice la ley. Me alcé para pedir respeto a un grupo que ha hecho mucho a favor de lo que precisamente defendían los haters. Me alegro de haber sido firme porque para mí la posición fácil hubiera sido mantenerme al margen como hizo mucha gente.

Aparte de director de marketing de Live Nation eres músico. ¿Qué opinas, desde el punto de vista de ambas facetas, de que C. Tangana abandonase el plató de OT sin atender a Roberto Leal?

Para mí, por encima de la música y del marketing, está la educación. Si el ser maleducado es una estrategia de marketing desde luego yo, como director, nunca la he utilizado ni quiero utilizarla. Dejar a alguien con la palabra en la boca y un poco ‘tirado’ no creo que deba ser propio ni de músicos ni de seres humanos. Si es una estrategia de marketing a la larga tu marca se ve debilitada porque a nadie le gusta consumir productos maleducados.

Dijiste que te gustaría que Famous fuera nuestro representante en Eurovisión. ¿Qué opinas de que solo le hayan asignado una canción?

A veces más vale una canción buena que cien malas. Me he posicionado a favor de Famous porque estamos en un momento del programa en el que mi juicio no determina nada, es decir, los votos del público deciden. Y creo que Famous nos daría un toque de color en Eurovisión, no solo porque sea de raza negra sino porque es un espectáculo verle cómo ha aprendido, cómo baila, esa voz de crooner… Con él tendríamos ese fenómeno de novedad y posibilidades de ganar.

¿También lo ves como ganador de OT?

Cualquiera de los cinco puede ganar, aunque está claro que hay un trío que destaca que es el formado por Natalia, Alba y Famous, por intuición creo que pueden ir por ahí los tres primeros puestos. Aunque también está mi defensa de Julia, que tiene una voz maravillosa y representa la faceta mediterránea musical y Sabela, que canta con ese toque de drama de influencia casi céltica. Va a ser determinante lo que canten en esta gala.

La propia Noemí Galera ha hablado de la desgana que han mostrado, en ocasiones, los concursantes de este año. ¿Estás de acuerdo?

En un momento dado del concurso sí que lo vi, sí que noté que estaban en una zona de confort y daba la sensación que sus pretensiones no eran ganar este concurso, sino hacer la gira, ser famosos, tener repercusión en redes… es normal, hablamos de gente muy joven. Tanto profesores como jueces debemos ser duros para que no ocurran cosas como esta.

¿Crees que han perdido naturalidad tras ver el éxito de la edición anterior?

Totalmente. Creo que nos hubiese pasado casi a cualquiera. El año pasado fue un descubrimiento, la inocencia que había frente a las cámaras no es la misma… los de ahora sabían incluso dónde estaban colocadas las cámaras y probablemente su actitud esté destinada a hacer un marketing personal sabiendo continuamente que les están grabando. Por eso se ha perdido un pelín de la chispa que tuvo la edición anterior.

Incluso sabían que si decían marcas comerciales no se emitiría esa parte del programa.

Eso yo no lo vi, pero me pareció una locura y yo no lo hubiese consentido si hubiese sido profesor.

La profesora Itziar Castro fue sustituida por los Javis a mitad de edición. Como miembro del jurado, ¿notaste una transformación –a mejor o a peor– en la interpretación de los concursantes tras este cambio?

Es muy difícil de medir porque podríamos pensar que cuando se fue Itziar ya habían aprendido mucho. Estaba a favor tanto de Itziar como de los Javis, quizá los Javis tenían a su favor ese punto de triunfadores de la edición anterior. Lo que sí se ha hecho es una progresión a partir de la gala 6 tremenda.

Hasta ahora, ¿cuál es tu disco favorito de los chicos de OT 2017?

Desde un punto de vista musical el que más me gusta es el de Alfred. El otro día cuando actuó en el programa realmente me emocioné, porque hace menos de un año era una persona mucho más introvertida, tenía incluso problemas de ansiedad. Su éxito es el de todos esos músicos tímidos y raros que ahora son estrellas.

¿Qué opinas de que se publicaran las imágenes de la ruptura de Amaia y Alfred?

Estar expuesto vende revistas. La vida personal interesa, es un negocio, aunque a mí nunca me ha interesado. No me gustó cuando vi las imágenes porque una ruptura no es agradable, entra en un terreno muy personal.

Como director de marketing, ¿qué opinas de que algunos concursantes se vinculen con muchas marcas, como el caso de Aitana? ¿Es contraproducente para su carrera musical?

Es posible. Saturar las cosas no viene bien cuando quieres tener una carrera a largo plazo porque puede cansar. Siempre abogo porque dediquen el mayor tiempo posible a sus canciones, más que a la sobreexposición. Pero es un tema en el que hay mucha gente involucrada y no hay que culpar siempre al artista sino tanto a managers como a compañías o intereses que hay detrás. Aitana está en manos de gente muy profesional en Universal, pero luego claro, también hay padres, familiares y opiniones de todo tipo. Si me pides la mía, yo sería cauteloso.

Tengo entendido que hoy acudes a La Resistencia y no me resisto a fastidiarle a David Broncano su pregunta estrella: ¿cuánto dinero tienes en la cuenta?

No más de cuatro cifras porque tengo muchos gastos al ser padre de tres niños maravillosos y tener muchos proyectos en los que invierto mis recursos como es el documental [In the name of Satan, primer capítulo de Jon & Joe en Movistar +] que presento en La Resistencia. [Ríe y repite] No más de cuatro cifras.