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Once cosas que hay que saber sobre Lola Kirke

La hermana pequeña de Jemima, Jessa en Girls, será una de las estrellas más solicitadas en Sundance y una de las novatas estrella de 2015

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Imdb

Con una serie, dos pelis que se estrenarán en Sundance y un proyecto mainstream de ciencia ficción en cartera, su nombre va a empezar a sonar con insistencia. Más vale estar preparado para no llegar tarde al club de fans de la pequeña de las Kirke.

 

 1. Si su cara resulta familiar es porque se parece mucho a su hermana Jemima, es decir, Jessa, de Girls. Además, tienen otra hermana mayor llamada Domino que es música y doula (consultora de parto y crianza) para todas las modernas de Brooklyn. Sus padres son el músico Simon Kirke, que formó parte del grupo británico Bad Company, y de Lorraine Kirke, una diseñadora de interiores que tiene la tienda de vintage Geminola en Nueva York.

2. Las Kirke son primas de las Dellal, la modelo Alice y la diseñadora Charlotte, de la firma de zapatos Charlotte Olympia, así que se mueven en ese punto en que lo bohemio se cruza con lo extremadamente pijo.

Al igual que sus hermanas, Lola Kirke ha posado para los catálogos de la marca de su madre, Geminola.

Eléonore Hendricks para Geminola

3.  Lola, que vive en Nueva York desde los 5 años, no parece tener el mismo acento británico pasado por el West Village de su hermana Jemima pero cuando no está interpretando habla con un levísimo ceceo.

4. Tiene un papel estelar en la serie Mozart in the Jungle, que ha rodado Roman Coppola para Amazon. Allí interpreta a Hailey, una intérprete de oboe que acaba haciendo de asistente de un director de orquesta famoso.

5. Ha contado que, mientras preparaba el papel, se dedicaba a parar a todas las personas que veía en el metro cargando con estuches de instrumentos y les pedía que le contasen cosas sobre la vida de los músicos. Mayoritariamente, la trataron de loca.

6.  En Perdida, de David Fincher, es Greta, (ojo, leve spoiler) la chica que se encuentra Amy (Rosamund Pike) en la cabaña durante su huida. Ha asegurado que le encantó interpretar a una chica “muy putilla y callejera”. En su opinión, Greta “eructa y come demasiado y fuma sin parar cigarrillos mentolados. Se siente muy cómoda con su cuerpo porque no se le ha ocurrido lo contrario”. 

7. Intentó ser estrella infantil pero se frustró cuando no le dieron un papel que al final fue para Kristen Stewart. Dice que siempre ha querido actriz, por lo que debió hacérsele raro que la que acabase en una serie de la HBO fuese su hermana, que siempre ha dicho que se considera pintora y no le interesa para nada hacer carrera en el cine.

Kirke, en ‘Perdida’ y junto a Gael García Bernal en ‘Mozart in the jungle’.

Cordon Press

8.Todo indica que se lucirá en Mistress America, la próxima película que han coescrito Noah Baumbach y Greta Gerwig, que se estrenará este mes en Sundance. Kirke tiene un papel que recuerda poderosamente al de la propia Gerwig –con la que comparte un aire de vulnerabilidad que las hace muy creíbles– en Frances Ha, una chica recién licenciada de la universidad y algo perdida que se deja liar por su inminente hermanastra.

9. Cree que “pesa 4 kilos de más para hacer papeles de tía buena”, o eso dijo en una entrevista a I-D.

10. Aparece en Fallen, una de esas adaptaciones de novelas fantásticas de ficción juvenil por las que Hollywood ha perdido el Norte. La cosa esta vez va de ángeles pero ella hace, en sus palabras, de “chica nada mágica, amiga de la chica mágica y guapa”.

Lola Kirke y Lina Esco, las dos protagonistas de ‘Free the nipple’, en un momento del film. Esco también dirige y guioniza la cinta.

Cortesía de Bérénice Eveno. Copyright Disruptive Films.

11. Protagoniza Free The Nipple, la película que también estará en el festival de Utah sobre la campaña contra el doble estándar para la desnudez femenina en las redes sociales. Interpreta a la lideresa de un movimiento feminista. En un acto de promoción de la peli, formó parte de una protesta en topless en Nueva York aunque ha confesado que hizo trampas poniéndose pegatinas en los pezones: “fue muy raro. La gente sacaba fotos, los hombres miraban, las madres gritaban y la policía ni siquiera nos arrestó, sólo nos pidió amablemente que protestáramos más lejos de los niños que hacían un taller de ciencia al otro lado del parque”.

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