Nuria Roca: «Necesitaría otra vida para usar todos mis vaqueros»

Nuria Roca tenía 20 años cuando empezó su andadura en televisión presentando un concurso en el valenciano Canal 9. Ha tocado todos los palos: radio, ficción televisiva y ha publicado varios libros. Ahora ha vuelto a la pequeña pantalla para conducir El millonario en La Sexta.

Qué prefiere, ¿armario o vestidor?

Vestidor gigantesco. Reconozco que uno de los sueños de mi vida era tener toda mi ropa a la vista: la de verano, la de invierno, los zapatos y los bolsos. Ahora veo hasta las maletas.

¿Y se organiza bien?

Sí, y en eso ha sido de gran ayuda mi amiga Magda Sestelo, que es mi estilista y me enseñó a guardar y a comprar.

¿Y eso se aprende?

Pues sí. Me encanta ir de compras, sobre todo cuando viajo. No veas cómo me muevo en mercadillos y tiendas vintage.

Presuma de un hallazgo.

Un vestido fabuloso que compré en una tienda de Brooklyn. Queda bien con todo… ¡y me costó nueve dólares!

Así que es de las que sabe encontrar chollos.

Sí, he de confesar que soy muy buena en eso. Y compro mucho por Internet. Veo algo que me gusta, lo anoto y espero a que esté rebajado para pedirlo. El otro día me hice con unos pantalones de seda a un precio buenísimo y la primera vez que los vi costaban un dineral.

Vamos, que es usted la compradora perfecta.

¡Tampoco es eso! A veces me compro ropa que luego no me pongo. Soy mucho de «por si acaso». Y se me va la mano con los vaqueros: necesitaría otra vida para usar todos los que tengo.

¿Qué es lo último que se ha comprado?

Por mi 40 cumpleaños me regalé unos Manolo Blahnik de charol negro que me hacían ilusión desde hace tiempo. Pero es que creo que me gustan demasiado los zapatos.

Aclare eso de «demasiado». ¿Cuántos pares tiene?

Pues seguramente más de 100. Pero tiene una explicación: hace muchos años que no tiro ningún par.

¿Hay alguna firma que le guste especialmente para el calzado?

Los de Jimmy Choo y los de Stuart Weitzman. Showrooms fantásticos, como Finally, me han descubierto marcas maravillosas, no solo de zapatos sino también de ropa, como Lebor Gabala.

¿Qué es lo más bonito que hay en su armario?

Un vestido que tiene muchos años. Es estampado, con flores, algo ajustado y con un largo a media pierna. También atesoro una camisa de seda negra que el día menos pensado se me va a caer a trozos. Pero no pienso tirarla hasta encontrar otra igual.

¿Qué es lo que nunca se pondría?

No iría con un vestido ceñidísimo. Y conste que me gusta verlos en otras mujeres. Pero sé que ese no es mi estilo.

¿Y qué cree entonces que es lo que mejor le sienta a usted?

El talle alto y las prendas que marcan cintura.

¿Tiene alguna pieza heredada?

Una cazadora vaquera Levi’s que en su momento fue de mi padre y que me pongo desde que iba a la facultad.