_
_
_
_

8 razones por las que nadie queda indiferente ante Gandía Shore

Así es el zoo absoluto del que todo el mundo habla. Analizamos cada uno de los concursantes.

Gandía Shore

El segundo episodio del nuevo reality de MTV ha dado más munición si cabe a la turba enardecida de las redes sociales. El incendio que se declaró el domingo pasado sigue devastando los nervios de las gentes que presumen de sentido común y ven en Gandía Shore una auténtica declaración de guerra a la inteligencia. Desde su estreno, las opiniones más benévolas han tachado al programa de sencillamente prescindible, mientras que los espectadores más difíciles de complacer han descargado litros de bilis sobre las ocho joyas que componen este impagable elenco de malos actores. Ocho motivos -a cada cuál más salvaje- personificados en ocho concursantes que responden a motes como Alberto "Clavelito", Cristina "La Gata" o Abraham "Tanga-Boy". ¿Resultado? Cotas sin precedentes en la audiencia de la cadena y telespectadores satisfechos con tan sabrosa carnaza. No sabemos por qué, pero parece que lo que nos gusta importar es siempre lo menos ejemplar: Eurovegas, Wendy Sulca… y ahora Jersey Shore. Así son los integrantes de este nuevo culto al chonismo.

Cordon Press

Ylenia
"Soy Ylenia de Benidorm", decía sin más adornos en su presentación. Suficiente tarjeta de visita, ¿verdad? De risa fácil -e incontinencia verbal-, la rubia de tinte nuclear ya se ha echado un ligue en el programa, Labrador. Otra joya como ella que, entre drama y cama, juntos acabarán firmando una de esas típicas historias de amor que nadie en su sano juicio querría protagonizar. De todas maneras su buen rollo es incondicional, y eso siempre se agradece.

Cordon Press

Labrador
El toy-boy de la anterior concursante tiene nombre de raza canina, lo que puede darnos una idea de los afilados molares que gasta y el arranque salvaje de tipos como él. Es el típico malote de los que no les cabe el corazón en el pecho -pero por la ingesta masiva de proteínas y BCAA que han cebado sus pectorales-. Su look se compone de tank tops ceñidos y colgantes tribaleropoligoneros -¡que no falte un rosario!- capaces de reflotar el mismísimo Costa Concordia.
 

Cordon Press

Arancha
"Soy una choni con mucho glamour", afirma. Valga esta maravillosa contradicción de una Aldonza Lorenzo contemporánea -¿o era Dulcinea del Toboso?-. Ya ha dado instrucciones muy claras de lo se debe hacer con sus cenizas el día que le toque marcharse al otro barrio, esparcirlas a través del megatrón del Fabrik (sic). Gustos sencillos para una princesa de barrio que se autoproclama "reina de las tarimas". Toma ya.

Cordon Press

Abraham
Si no fuera por esa cara tan bien hecha y ese pelazo de fijación catatónica, guardaríamos nuestras pertencias por miedo a perderlas al ver pasar al madrileño. Se esfuerza en no parecer un delincuente, pero el pelo de la dehesa es lo que tiene. Sin duda, un seudodandy al que cualquier adjetivo seguido del sufijo "azo" le va bien: chulazo, cuerpazo y… ¿garrulazo? Eso sí, en comparación con sus compañeros, Abraham bien podría vivir en el Upper East Side.
 

Cordon Press

Cristina
Se autodenomina "la gata", pero en realidad es la típica maleducada con perfilador a mano y mirada de perdonavidas como seña de identidad. No parece que tuviera muy claro dónde se metía, ya que según asegura tiene novio formal. Pero quizás sea más lista de lo que aparenta. En el primer episodio echó de su casa a una chica que se negó a darle un cigarrillo, así que cuidado con la rubia. ¡Muerde!

Cordon Press

Alberto
Romántico, soñador y clichés por el estilo definen la personalidad del buenazo de la casa. Clavelito, su mote, podría simbolizar una personalidad pueril y bastante elemental, pero en realidad quizás resulte ser todo lo contrario. De momento, todo parece indicar que acabará ganándose el cariño de todas y la compañía de ninguna. Por si fuera poco, el ayuntamiento de Gandía lo ha multado por orinar en la vía pública.

Cordon Press

Core
Pendientes de oro, zapatillas flúor y complementos dignos de la mismísima Vicky Polard, la choni más entrañable de la serie Litte Britain. El mote viene de una de sus pasiones, el hardcore, que alimenta con otra de las filias a las que está consagrada: el boxeo. Su primer día en Gandía acabó con una pelea y el amago de marcharse del programa. Sin duda, la estabilidad en persona.
 

Cordon Press

Esteban
Pese a parecer el típico croissant de gimnasio -con mucha cara y más espalda-, el fornido valenciano esconde muchos secretos detrás de esta pétrea fachada. Cualquiera diría que lleva tatuados los rostros de Marilyn Monroe y Audrey Hepburn en su cuerpo. Reconocemos sus agallas, que hay que tener mucha personalidad para llevar a cabo semejante idea.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_