¿A dónde van a parar mis datos cuando navego por Internet?

Ciudades inteligentes, gadgets de salud, criptomonedas y pagos electrónicos… todo forma parte de la evolución de la tecnología en la era de la información. Una era en la que el uso de los datos para ofrecer productos y servicios personalizados se traduce en comodidad, ahorro económico, mejora de los recursos y una mayor eficiencia. Pero, ¿sabemos qué uso hacen las empresas de nuestros datos?

Incluso sectores primarios como el de la agricultura han experimentado la revolución tecnológica gracias al tratamiento de la información, permitiendo -por ejemplo- observar, medir y analizar las necesidades de los campos, adaptando los cuidados, el riego... Es lo que se conoce como agricultura de precisión, y que lógicamente está teniendo un impacto económico y social.

"En Google tenemos claro que tú eres quien decides sobre tus datos", asegura Esperanza Ibáñez Lozano, manager de Políticas Públicas de Google España y Portugal. "De esta forma, la transparencia y el control por parte de los usuarios son dos principios fundamentales que guían nuestra acción. Por esta razón, hemos creado herramientas como Mi Cuenta donde el usuario, a través de un único lugar, puede administrar su privacidad y seguridad, decidir qué tipos de datos podemos recoger y utilizar. Cuáles quiere borrar. O cuáles quiere llevarse de Google a otros proveedores".

Según últimos datos de que dispone la compañía :

• 40 de cada 100 personas que navega por Internet no utiliza medidas de seguridad activas al considerarlas innecesarias.
• 69 de cada 100 personas que habían sufrido un incidente de seguridad no habían realizado ningún cambio después de la incidencia. Es decir. Una persona a la que le habían robado la contraseña, por ejemplo. No hacía nada.
• Y aquellos que sí hacían algo, consideraban que la única y mejor solución para estar protegidos cuando navegaban en Internet era usar un antivirus.

"Existe una falsa creencia acerca de que solo el servicio que se ofrece de manera gratuita es el que hace uso de datos, cuando la realidad es que la inmensa mayoría de servicios con presencia digital hace uso de ellos. De hecho, el que los usuarios puedan acceder a un gran volumen de información y servicios online, se traduce en tener más opciones, más oportunidades económicas y una mayor libertad.