Plantaciones de maría enchufadas de Granada a Polonia
76 personas acaban detenidas en una macroperacion contra narcos de la marihuana y el hachís en Andalucía y Valencia
En la desoladora cuarta planta de un bloque de viviendas sociales de Pinos Puente (Granada), crecían centenares de plantas de marihuana predestinadas a acabar en Polonia. Los 3.000 kilómetros separan la paupérrima barriada de las Flores de esta localidad andaluza de 10.100 habitantes con su destino final no amilanaban a los 76 narcos y colaboradores de una organización de tráfico de drogas con ramificaciones en Cádiz, Málaga y Valencia que acabaron detenidos este martes en una macrooperación de la Guardia Civil en la que que participaron más de 500 agentes.
En la calle Madreselva de Pinos Puente olía a marihuana nada más girar la esquina. Allí, en la misma vía donde los alumnos del instituto Cerro de los Infantes debían acudir diariamente a clase, al menos 200 agentes desplegaron decenas de furgones, coches patrulla e incluso drones y un helicóptero para desarticular una potente organización de traficantes que había optado por diversificar los prolíficos cultivos de marihuana granadinos para mover hachís procedente del Estrecho de Gibraltar. Pasadas las 5.30 de la madrugada, el barrio se desperezaba tímidamente con la presencia de los efectivos que efectuaron hasta 27 registros, mayoritariamente ubicados en viviendas sociales reconvertidas en cultivos de maría que, pese a la dedicación a otras drogas, seguían constituyendo la principal vía de ingresos de la mafia.
Aunque el centro de la operación se encontraba en Pinos Puente, a 20 minutos de la capital, los agentes irrumpieron también en decenas de domicilios en más de dos docenas de localidades de las provincias de Granada, Málaga, Cádiz y Valencia hasta sumar 69 registros, 40 de ellos en localidades de la primera provincia. El resto ha abarcado a tres poblaciones de Málaga, cuatro de Cádiz y diez de Valencia, incluida la capital de la provincia, en una maratoniana jornada de entradas y localización de sospechosos
Desde las claras del día y hasta la caída de la tarde, el número de detenidos fue en ascenso hasta llegar a las 76 personas, la última cifra confirmada por la Guardia Civil en la tarde de este martes y que todavía podría varias. La redada pilló de improviso a algunos de los implicados, como los dos sospechosos apresados en una nave cárnica de un polígono de Atarfe (Granada) que, con rostro visiblemente desencajado, subían a los coches del Instituto Armado que les llevaron hasta dependencias de la Comandancia para tomarles declaración. “Hemos encontrado indicios de su participación en la organización”, sentenciaba un agente poco después de salir de la fábrica.
Granada está acostumbrada a la proliferación de cultivos ilegales de marihuana que defraudan cantidades millonarias a las empresas eléctricas, también a los constantes operativos policiales que se realizan contra ellos. Sin embargo, lo novedoso de la llamada operación ‘Mocy’ radica en que la investigación liderada por el OCON Sur -el Organismo de Coordinación del Narcotráfico desarrollado en Andalucía para luchar contra el creciente tráfico de drogas- ha conseguido determinar el viaje que las sustancias estupefacientes realizaban desde España hasta Polonia. De hecho, el despliegue en Andalucía y Valencia estuvo acompañado por actuaciones -no precisadas debido al secreto de sumario de las pesquisas- en este país con la colaboración de su policía y coordinadas por Europol y de Eurojust.
“La importancia de la investigación se encuentra precisamente en todas esas conexiones que se han conseguido establecer”, aseguran fuentes cercanas al caso. La organización estaba liderada por varios capos que se habían asociado para poder llevar a buen puerto sus alijos y que la Guardia Civil da por localizados en este amplio despliegue. El refuerzo en medios y agentes para el control del narcotráfico en el sur ha provocado que distintas bandas de la zona lleguen a acuerdos en el que se reparten los beneficios para así poder acceder a lugares que le son ajenos o a negocios de tráfico de drogas que habitualmente no realizaban.
Los cultivos de marihuana en Granada y su conexión ilegal al tendido eléctrico provoca importantes fraudes económicos o cortes de luz. Tras el despliegue de los más de dos centenares de agentes, que han localizado también armas y dinero en los registros, hasta tres operarios de la suministradora eléctrica han acudido al barrio de las Flores embozados y con gafas de sol para desenganchar las instalaciones precarias que robaban electricidad desde las plantas altas de los edificios.
Para cuando el martes comenzó a clarear y los jóvenes del instituto llegaban a clase impresionados por el despliegue policial -con vuelo bajo del helicóptero policial incluido-, el grueso del operativo ya había concluido. La calle Madreselva intentaba regresar a la tranquilidad, no sin el sobresalto de algunos vecinos que intentaron agredir con piedras a los agentes que quedaban aún en la zona. Ver peligrar el ilegal sustento es lo que tiene.
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