La Audiencia Nacional pide a Francia la entrega de Josu Ternera
El juez pide la extradición del etarra por el atentado contra la casa cuartel de Zaragoza
Ismael Moreno, juez de instrucción de la Audiencia Nacional, ha pedido a Francia la entrega a España del exdirigente etarra José Antonio Urrutikoetxea Bengoechea, Josu Ternera, para ser enjuiciado por el atentado perpetrado en 1987 contra la casa cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza. A través de un auto y a instancias del ministerio fiscal, el magistrado solicita la extradición del terrorista, detenido el pasado 16 de mayo por la mañana cuando llegaba a un hospital de la localidad francesa de Sallanches.
Ternera, en paradero desconocido desde 2002, fue procesado ese mismo año por el ataque a la casa cuartel, cuando se le acusó de un delito de atentado terrorista con resultado de muerte, 10 de asesinato y otros 73 de tentativa de asesinato.
En el escrito, el juez incide en que los delitos no han prescrito. Según argumenta, si bien los hechos se produjeron el 11 de diciembre de 1987, la declaración en rebeldía y la orden de detención de Ternera se dictaron en 2005 y, por tanto, es a partir de ese momento cuando empezó a correr el plazo —de 20 años, según la lectura más favorable de la actual legislación española—.
Ternera, que fue jefe político de ETA, tiene cuatro causas abiertas en la Audiencia Nacional. También fue procesado en 2005 por el asesinato de Luis María Hergueta Guinea, directivo de Michelin, en 1980; por la causa de las herriko tabernas; y por una tercera de lesa humanidad por los atentados de la banda a partir de 2004, cuando entró en vigor esta figura penal.
"Esclarecer otros atentados"
En la causa de la casa cuartel de Zaragoza, Moreno ha aceptado también la personación como acusación popular de la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), que asegura querer “defender los intereses de todas las víctimas que este terrorista ha dejado a lo largo de sus 50 años en ETA”. “Y muy especialmente a nuestros compañeros, a sus hijos e hijas y a sus mujeres asesinadas la madrugada del 11 de diciembre de 1987 mientras dormían en la casa cuartel de Zaragoza”, afirma el colectivo en un comunicado, donde respalda la petición de entrega firmada por el juez Moreno: “La extradición para el interrogatorio a la cabeza intelectual de los atentados más sangrientos de ETA podría permitir esclarecer otros atentados que aún esperan justicia”.
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