Garicano: “Estuve cómodo en la manifestación de Colón”

El economista Luis Garicano (Valladolid, 52 años) habla español, francés, holandés e inglés, aunque puede que sea más liberal incluso que políglota. Encabeza la lista de Ciudadanos a la UE. Y ha hecho campaña con sus dos hijos —Pieter (17 años) y Marten (14)— mirando de reojo la crisis del PP.

Pregunta. ¿El liberal nace o se hace?

Respuesta. Yo nací liberal. Mi primera experiencia política la tuve a los 11 años, pegando sellos junto a mi madre para buzonear la candidatura de Ruiz Giménez en la Federación Democrática Cristiana. Obtuvo exactamente cero escaños. Ya de universitario me movilicé en la candidatura liberal de Roca y de Garrigues Walker. Obtuvieron cero escaños.

P. Vaya ojo para apostar.

R. Pero eso era de pequeño. De mayor he acertado con Ciudadanos.

P. ¿Es usted quien le dice a Rivera las cosas que menos le gusta escuchar?

R. Rivera tiene un modelo de liderazgo muy bueno porque escucha, integra, asimila. Pero, cuando se toma una decisión, el camino lo respetamos todos.

P. ¿Es usted el líder de Ciudadanos que más se opuso al cordón sanitario al PSOE?

R. Tuvimos una discusión, una conversación, en la ejecutiva del partido. Es un partido con mucha democracia interna. Se habla, se debate. Pero vamos todos a una. Este PSOE lo pone muy difícil. El sanchismo, su giro hacia las exigencias independentistas, tiene muy poco que ver con el partido de responsabilidad y sentido de Estado con el que habíamos encontrado tantos puntos de consenso.

P. ¿Y es usted la personalidad política de Ciudadanos más alejada de Vox?

R. Creo que compartimos todos la misma visión hacia Vox. Un partido antieuropeo cuyo programa supone un retroceso en derechos civiles y sociales.

P. ¿Puede decirse ya que la foto de Colón fue un error?

R. Estuve en la manifestación y estuve cómodo en ella. Nos pareció que la deriva del PSOE obligaba a salir a la calle para defender la unidad de España y la igualdad de los españoles. La manifestación de Colón fue un acierto.

P. ¿Y no le resulta problemático en Europa que Vox sea un actor necesario en pactos y alianzas, como en Andalucía?

R. Nuestros socios liberales nos felicitaron por el cambio de Andalucía. Urgía una nueva época, despolitizar la Administración, acabar con los chiringuitos. Hicimos un pacto de Gobierno con el PP, no con Vox.

P. ¿Le han plagiado ustedes el programa al PP? Es lo que anda diciendo Pablo Casado.

R. Para nada. Nuestro programa es reformista. Y el PP no tiene la menor intención de reformar nada.

P. ¿Le sorprende la beligerancia de Casado? Se supone que van a tener que llegar a acuerdos entre ustedes.

R. Casado tiene miedo a perder su sitio. Se le nota ansioso. Busca culpables, cuando el culpable es él. Mire la descapitalización humana de su partido. Ha hecho limpieza de todas las personalidades de más experiencia. Un buen ejemplo lo ofrecen las listas europeas. Casado lleva a Europa a la gente con la que no sabe qué hacer. Para el PP, Europa es un retiro dorado. Y podría decirse lo mismo del PSOE.

P. ¿A qué se refiere?

R. Los partidos nacionalistas y populistas españoles conciben Europa como el lugar donde escenificar la propaganda, mientras que los partidos tradicionales, como el PSOE y el PP, la conciben como el mejor lugar para jubilarse. Esa es la razón histórica de la falta de influencia de España en la Unión Europea.

P. ¿Puede ser un problema para España en el contexto europeo que Podemos entre en el Gobierno de Sánchez?

R. Lo sería. Y demostraría que el PSOE es un partido muy poco alineado con la socialdemocracia continental. La visión económica de Podemos, sus reproches a nuestra democracia, no casan con un proyecto europeísta.