La Generalitat valenciana autoriza el regreso escalonado de los 3.000 evacuados en Gandia
Tres urbanizaciones siguen cerradas al considerarse inseguras
La Generalitat valenciana ha autorizado este jueves el inicio del regreso de los 3.000 evacuados por el incendio de Llutxent. Aunque la intención del Gobierno autonómico era que pudieran hacerlo todos, tres urbanizaciones de Gandia permanecerán cerradas por motivos de seguridad, por lo que cerca de la mitad de los evacuados deberán pasar al menos otra noche fuera de sus casas.
El análisis sobre el terreno realizado por el Ayuntamiento de Gandia ha concluido que las urbanizaciones de Montesol, Montepino y Las Cumbres presentan todavía "peligro real" debido a los efectos del incendio: postes eléctricos caídos, piedras en las calles y casas en ruina.
El director general de Emergencias de la Generalitat, José María Ángel, ha agregado que determinados circuitos deben permanecer despejados de vehículos para garantizar el paso de los equipos de emergencia.
Los residentes y los turistas sí pueden ya volver, en cambio, a las urbanizaciones de La Ermita de Marxuquera de Gandia y La Drova (en la vecina población de Barx), así como al municipio de Pinet, que fue completamente evacuado el martes por la noche.
Después de tres días de espanto, las perspectivas del incendio de Llutxent (Valencia) son por fin optimistas. La evolución del fuego es favorable, si bien los responsables del operativo de extinción han advertido que no pueden descartarse complicaciones si se producen "cambios climatológicos bruscos".
Las llamas han afectado a unas 40 parcelas y al menos una decena de viviendas han quedado completamente destruidas, ha indicado Ximo Puig, presidente de la Generalitat. Puig ha prometido que quienes han perdido su primera vivienda recibirán ayudas de forma inmediata.
El presidente del PP, Pablo Casado, ha visitado el puesto de mando avanzado de coordinación de las tareas de extinción. "Pido al Gobierno de España, al de la Generalitat, la Diputación y a todos los alcaldes que estén muy presentes en estas cuestiones, que la extinción también dé paso a una prevención. Quedan semanas complicadas por las temperaturas en este verano", ha dicho.
La ausencia de viento y la alta carga de humedad registrada durante la noche del miércoles ha resultado clave para que los 800 bomberos y soldados y los 30 helicópteros y avionetas desplegados en la zona hayan conseguido estabilizar el incendio. En lenguaje técnico, las fases de un incendio forestal son, de mayor a menor gravedad, activo, estabilizado, controlado y extinguido.
El comité que coordina las tareas de extinción ha descartado el peor escenario que contemplaba el miércoles: que las llamas se desplazaran hacia el oeste impulsadas por el viento de levante y alimentadas por la masa forestal de la sierra de Quatretonda avanzaran de forma imparable hasta Xàtiva.
La preocupación reside ahora, sobre todo, en que la entrada de viento de poniente, más seco, pueda reavivar el incendio en algún sector, que abarca más de 3.000 hectáreas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.