La madre de Gabriel: “Pido que no se extienda la rabia”
Patricia Ramírez afirma que siempre sospechó de Ana Julia: "Yo temía que fuera así. No se podía decir nada, porque era parte de la investigación"
Patricia Ramírez, la madre de Gabriel Cruz, ha pedido este lunes, "en memoria del 'Pescaíto", como se conocía al niño cuyo cadáver fue localizado este domingo en Almería tras 12 días de búsqueda, que "no se extienda la rabia, que no se hable de esta mujer más y que queden las buenas personas", en referencia a la mujer detenida como supuesta autora del crimen, Ana Julia Quezada. El cuerpo del niño, de ocho años, fue hallado envuelto en una manta en el maletero del coche de Quezada, de 43 años y pareja del padre del niño. Según fuentes de la investigación, la sospechosa, que se cree que actuó sola, recuperó el cadáver de un pozo por temor a que lo hallaran.
Los padres de Gabriel han dicho en una entrevista en Telecinco que se sienten "destrozados" y que tienen "un vacío muy grande". "Si algo ha conseguido Gabriel es que estemos más unidos y que aprendamos a andar de nuevo, no sé cómo, pero vamos a andar de nuevo”, ha añadido la madre. Ambos han destacado que quieren "quedarse con lo positivo" y agradecer el "cariño y apoyo" recibido. "Teníamos la ilusión de que Gabriel estaba vivo y de que le íbamos a encontrar”, afirma Ángel Cruz, padre de la víctima.
La madre de #Gabriel nos atiende en directo:
— Más De Uno (@MasDeUno) March 12, 2018
"Quiero agradecer a todo el mundo su apoyo y sus mensajes de cariño. Aunque no haya habido final feliz; el pescaíto se nos va nadando hacia el cielo". https://t.co/d58QQXgA2j #DEPPescaíto pic.twitter.com/ULzqpzsqmH
La madre ha intervenido esta mañana en directo en Onda Cero, donde ha agradecido las muestras de cariño y solidaridad y ha expresado su deseo de que cesen los mensajes de odio contra la detenida. A su juicio, la novia de su expareja "no se merece que se le dé cobertura y no se merece que se hable de ella". "Que nadie hable más de Ana Julia. Que no aparezca en ningún sitio y que nadie retuitee cosas de rabia porque ese no era mi hijo y esa no soy. Que pague lo que tenga que pagar, pero que lo que quede de este caso sea la fe y las buenas acciones que han salido por todos lados y han sacado lo más bonito de la gente. No puede quedar todo en la cara de esta mujer y en palabras de rabia", ha dicho en la entrevista.
"No quiero que todo termine con la rabia que esta mujer ha sembrado. Me gustaría que terminara en ese mar de gente que se ha movido: todos por Gabriel", ha pedido, al tiempo que ha agradecido el apoyo y los mensajes de cariño que ha recibido desde que el menor desapareció: "Aunque no haya habido final feliz; el 'Pescaíto' se nos va nadando hacia el cielo".
La madre ha aclarado que, desde que desapareció el menor, ella solo se ha mostrado en la página de Facebook lanzada por el entorno de la familia para promover su búsqueda, Todos Somos Gabriel así como en la cuenta de Twitter asociada, y ha pedido a quienes están suplantando su identidad en las redes sociales difundiendo en su nombre imágenes de duelo que dejen de hacerlo.
Las frases de Patricia en @HerreraenCOPE, su primera entrevista tras el hallazgo del cadáver de Gabriel: "No sé cómo voy a volver a la normalidad" #DEPPescaíto https://t.co/OE2CgKjObn
— COPE (@COPE) March 12, 2018
"A aquellas personas que han estado utilizando mi foto por el bien de Gabriel y han hecho montajes bonitos se lo agradezco de corazón, pero en este momento hay personas en Facebook e Instagram que están hablando en mi nombre, como Patricia Ramírez, y poniendo fotos para que todo el mundo comparta", ha denunciado.
Ramírez ha pedido a estas personas que "están utilizando la muerte" de su hijo "para que las sigan" en redes sociales, que "reflexionen y borren esas cuentas porque ni se lo merece" su hijo, ni ella ni el padre, que "está destrozado". "Me están causando dolor, porque yo no quiero ver esas fotos que ponen de pérdida y desde luego, no quiero que hablen por mi", ha añadido. La mujer ha incidido en que ella no ha puesto "ni una sola foto para que se comparta, ni un sólo vídeo para que se comparta" con imágenes de duelo y de dolor y el día que tenga que hacerlo, será ella quien comparta su propia fotografía.
Asimismo, ha agradecido "a todo el mundo que se ha volcado tanto en ayudar físicamente" en la búsqueda "como en la investigación o llenando de mensajes de cariño". "No tengo palabras para agradecer a toda la gente y todas las acciones bonitas que han salido", ha dicho Patricia, quien ha instado a colocar en las ventanas, un día más, un "pescadito" con "una palabra bonita" en recuerdo de Gabriel.
En la cadena Cope, Patricia ha asegurado siempre sospechó de que Ana Julia estaba detrás de la desaparición de su hijo: "Yo temía que fuera así. No se podía decir nada, porque era parte de la investigación", ha asegurado. "Tenía la esperanza de ablandarla y de que se viniera abajo. De que en algún momento lo soltara. Por eso, apelábamos a su conciencia en nuestras comparecencias", ha señalado.
La madre ha explicado también que su exmarido está sufriendo mucho tras saber que su actual pareja es la principal sospechosa. "Él es una persona maravillosa, que nadie dude de él. Yo voy a estar a su lado porque tenemos que superar esto los dos juntos. Está destrozado, pero es muy difícil hacer la digestión de la pérdida de un hijo sabiendo que lo ha matado la persona a la que quieres", ha explicado sobre Ángel Cruz.
La detenida, de origen dominicano, había acompañado al padre durante la búsqueda del niño y se mostró conmovida por lo sucedido ante los medios de comunicación. El único rastro que se había hallado del menor fue la camiseta interior que supuestamente llevaba el niño y que la detenida dijo que encontró en una de las batidas de monte, cuatro días después de su desaparición. El hallazgo, más que despistar a los investigadores, colocó de lleno el foco sobre ella. En los últimos días, la mujer ha estado sometida a una estrecha vigilancia.
Hoy se ha sabido que la niña de cuatro años que murió en Burgos era hija de Ana Julia y no otra niña que estaba a su cuidado. La menor murió tras caer por una ventana al patio interior del edificio en el que vivía, hace 22 años. La muerte de la pequeña fue investigada por la Policía Nacional y se concluyó que fue un accidente. Por aquel entonces, Ana Julia tenía 21 años y vivía en la barriada de Gamonal con su otra hija, que tenía dos años, y con su marido, que había adoptado a las pequeñas, según fuentes de la investigación. Tras el arresto de la mujer, la Policía Nacional está revisando el caso.
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