El tuitero que insultó a Pilar Manjón, ante los jueces: “Fue un calentón”
La Audiencia Nacional juzga a dos hombres por publicar mensajes injuriosos en la red contra la víctima de 11-M
La Audiencia Nacional juzgó este jueves a dos hombres –Fernando de Reyna y Tomás Santos- que en 2014 vertieron graves insultos en Twitter contra Pilar Manjón, expresidenta de la Asociación 11-M Afectados por el Terrorismo, por sus posiciones izquierdistas. El hijo de Manjón, Daniel, fue asesinado en la estación de Cercanías de El Pozo, en Madrid, por una de las mochilas bomba que hizo estallar la célula yihadista el 11 de marzo de 2004. En 2014, De Reyna escribió en la red social sobre Manjón: “¿Qué se puede esperar de una mala madre que hace negocio apoyando la impunidad de los asesinos de su hijo?”. En el juicio, Reyna atribuyó este insulto a un “calentón”. La fiscalía solicita una pena de un año y medio de prisión para él por un delito de enaltecimiento del terrorismo en su modalidad de humillación a las víctimas.
En la vista oral, Reyna aseguró que le hubiera gustado ponerse en contacto con Manjón para pedirle disculpas y borrar el tuit, pero que no pudo hacerlo. Sentado junto a él en el banquillo estaba Tomás Santos. Este rechazó tener cuentas en las redes sociales y manifestó que su imputación deriva de un “montaje” realizado por el programa de televisión La Tuerka, del que fue presentador el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias.
Según Santos, La Tuerka mezcló una imagen suya durante su participación en un debate de Intereconomía con una dirección de Twitter (@EnEstadoDGuerra) desde donde se publicaron mensajes como "A Pilar Manjón le tocó la lotería cuando reventaron al hijo. Menuda puta"; "Imagino que el padre del hijo de la Manjón no dice nada porque no sabe quién es..."; "Me alegra saber que pese a tu problema ortográfico apoyas a la puta proterrorista de Manjón".
El fiscal Marcelo de Azcárraga solicita para él una pena de dos años de prisión. Sobre él pesa una serie de querellas por injurias presentadas por el propio Pablo Iglesias, la diputada de Podemos Tania Sánchez, el exvicepresidente del Gobierno Alfredo Pérez Rubalcaba y la exministra del PSOE Leire Pajín.
Pilar Manjón, que ejerce la acusación particular en esta causa, acudió ayer como testigo al juicio. La expresidenta de la asociación de víctimas del 11-M manifestó que el cuadro psiquiátrico que sufre desde el día de los atentados se agudiza cada vez que lee este tipo de expresiones en las redes sociales o en los medios de comunicación. “A mí cuando me insultan me duele pero cuando la víctima de terrorismo es mi hijo, que no eligió ir en los trenes esa mañana, eso no es libertad de expresión eso es llamarle 'hijo de puta' y mi hijo sí tiene padre; está aquí sentado y perfectamente identificado”. Manjón permaneció en la sala de vistas durante todo el juicio pese a que la presidenta del tribunal, María José Rodríguez Duplá, le sugirió que no se quedara en la sala para evitarle el “mal rato” que estaba pasando.
"Algo despreciable"
El fiscal Azcárraga calificó los comentarios supuestamente vertidos por ambos acusados de “algo despreciable” si fuera en el ámbito privado. Al hacerlo en un foro público como Twitter y contra una víctima del terrorismo, las manifestaciones pasan a ser “penalmente reprochables”, afirmó.
En este turno de conclusiones finales el abogado de la acusación particular, Antonio Segura, afirmó que estos comentarios "son frases retorcidas muy pensadas, con un odio muy especial hacia una determinada víctima del terrorismo" y elevó a definitiva su petición de tres años de cárcel para cada uno.
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