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Los kurdos iraquíes guardan silencio sobre dos españoles detenidos

Los Peshmerga les interceptaron cuando viajaban hacia Sinjar para reincorporarse a la milicia en la que combaten al ISIS

Ángeles Espinosa
Soldados 'peshmerga' se acercan a la localidad de Bashiqa en 2016.
Soldados 'peshmerga' se acercan a la localidad de Bashiqa en 2016.AHMED JADALLAH (REUTERS)

Las autoridades del Kurdistán iraquí guardan silencio sobre los dos españoles detenidos por sus fuerzas de seguridad, los Peshmerga, cuando iban a reincorporarse a la milicia en la que luchan contra el Estado Islámico (ISIS) como voluntarios. Su detención fue confirmada sin embargo por la Embajada de España en Irak, que está trabajando para lograr su puesta en libertad. Al parecer, se les acusa de “cruzar ilegalmente la frontera”, aunque todo indica que han sido víctimas de la lucha de poder entre diferentes grupos kurdos.

Los brigadistas, identificados como Robin y Dr. Delil, fueron interceptados por agentes de los servicios secretos kurdos en Zajo, junto a la frontera turca, el pasado sábado, cuando se dirigían a la región de Sinjar, según informó a la agencia Efe otro miliciano español, que responde al alias de Simón. Sinjar, muy cerca de Siria, es la patria ancestral de los yazidíes y fue escenario de una serie de matanzas del ISIS contra esa comunidad que la ONU ha calificado de genocidio. Los tres se habían unido hace meses a las Unidades de Protección de Sinjar (YBS, en sus siglas kurdas), un grupo local afiliado a la milicia kurda siria Unidades de Defensa Popular (YPG, que fue una de las más activas en la defensa de los yazidíes frente al ISIS). De hecho, los detenidos, exsoldados, regresaban de una estancia en España, uno para recuperarse de las heridas sufridas en combate y otro para acudir al entierro de su madre.

La Embajada de España en Bagdad ha rechazado revelar su identidad y remite a la Oficina de Información Diplomática. “Estamos haciendo todo lo que podemos para solucionarlo”, ha asegurado no obstante a EL PAÍS una fuente diplomática. Mientras, los responsables kurdos se mostraban renuentes a reconocer la detención. “No estoy al tanto”, respondía a este diario Aziz Ahmad, asistente del presidente del Consejo de Seguridad kurdo (KRSC), que coordina las diferentes fuerzas y servicios de la región autónoma.

No es la primera vez que los Peshmerga detienen a brigadistas extranjeros en su territorio. “Les interrogan y les expulsan con una multa; tenerles detenidos sólo les crea problemas”, explica un observador europeo con conocimiento del proceso. “Suelen tratarlos bien”, añade.

La acusación habitual, y que parece repetirse en esta ocasión, es haber cruzado ilegalmente la frontera. Simón ha asegurado que sus dos compañeros detenidos tienen permiso de residencia y se encuentran de forma legal en Kurdistán. Sin embargo, las rivalidades ínter kurdas y las complejas relaciones que los distintos grupos mantienen con los países vecinos pueden haberles jugado una mala pasada. El propio Simón apunta en esa dirección al responsabilizar de la detención a las fuerzas de Masud Barzani, el presidente kurdo.

Por un lado, las YBS están respaldadas por la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK, bajo la dirección nominal de Talal Yalabani), socio de Gobierno y principal rival político del dominante Partido Democrático de Kurdistán (PDK, de Barzani). Además, sus respectivas milicias, aunque formalmente integradas en los Peshmerga y con aspiraciones de Ejército nacional, siguen manteniendo cuarteles separados en sus zonas de influencia y, tras haber frenado el avance del ISIS, compiten por dominar los nuevos territorios que han ocupado, en Sinjar o en Kirkuk.

Por otro, las YPG, las milicias con las que están afiliadas las Unidades de Protección de Sinjar, son el brazo armado del partido kurdo sirio de Unión Democrática (PYD), aliado con el Partido de los Trabajadores Kurdos (PKK) de Turquía, que históricamente ha rivalizado con el PDK de Barzani por el liderazgo de los entre 30 y 35 millones de kurdos que se reparten entre Turquía, Irak, Irán y Siria.

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Sobre la firma

Ángeles Espinosa
Analista sobre asuntos del mundo árabe e islámico. Ex corresponsal en Dubái, Teherán, Bagdad, El Cairo y Beirut. Ha escrito 'El tiempo de las mujeres', 'El Reino del Desierto' y 'Días de Guerra'. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense (Madrid) y Máster en Relaciones Internacionales por SAIS (Washington DC).

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