Teresa Romero ya toma líquidos y ha hablado con su marido por teléfono
La familia dice que en el equipo médico hay "optimismo de que superará la enfermedad" Los médicos se quejan de que tienen que atenderla con las persianas bajadas
La auxiliar de enfermería contagiada de ébola, Teresa Romero, ha podido hablar con su marido por primera vez desde el pasado miércoles. A través de los teléfonos de las habitaciones se han comunicado unos 10 minutos pero él no le ha dicho que su perro Excalibur ha fallecido. Romero toma líquido desde anoche y fue ella misma la que pidió comunicarse con su marido, según ha señalado una amiga de la familia, Teresa Mesa, que ha ejercido de portavoz ante los medios a las puertas del Hospital Universitario La Paz-Carlos III de Madrid tras visitar al marido.
Esta amiga ha sido quien ha contado pormenores de la conversación de la pareja, que ha explicado que la paciente tiene "lagunas" y no se acuerda de "muchas cosas" y que los médicos "tienen esperanza" y hay "optimismo de que pueda superar la enfermedad". "Se acuerda de lo más cercano que es el perro, su marido y poco más", ha señalado. De hecho, en estos momentos se encuentra estable dentro de la gravedad, ha señalado este mañana la ministra de Sanidad, Ana Mato.
En la puerta exterior del Carlos III, Teresa Mesa ha contado que la enferma "no sabe la repercusión" que tiene su caso fuera de la habitación de la planta sexta del hospital. "Javier le ha dado hoy algunas pinceladas y le ha pedido que se prepare porque ella lo ve como una cosa natural", ha señalado la portavoz de la familia. Romero, según ha explicado, ha preguntado por su marido, por su madre (que vive en Galicia) y por su perrro, Excálibur, que fue sacrificado la semana pasada. Teresa Mesa ha leído un comunicado de Javier Limón en el que reclama la atención "de las autoridades mundiales" sobre el virus y pide "que a cada niño que muera en África se le de el eco que se le dio a Excalibur".
Según el testimonio de la portavoz familiar, Teresa Romero le ha dicho a su marido que quiere volver a su trabajo. "Ella está deseando volver a hacer su vida normal", según Mesa, que asegura que también ha indicado que está dispuesta a tratar más casos de ébola - Romero atendió a los dos misioneros fallecidos en España, Miguel Pajares y Manuel García Viejo- y que le ha dicho a su marido que ahora será "más fácil" porque "tiene los anticuerpos".
Limón anuncia acciones legales contra Mato y el consejero
Javier Limón, marido de Teresa Romero, estudia emprender acciones legales contra los responsables de Sanidad del Gobierno y de la Comunidad de Madrid, Ana Mato y Javier Rodríguez. Está planteándose, incluso, ir "más arriba".
"Desde luego, más allá del consejero, porque si el consejero está ahí es porqe alguien le ha puesto", ha señalado la portavoz de la pareja, Teresa Mesa. Limón iniciará acciones legales a raíz del contagio de su mujer, que forma parte de la plantilla del hospital Carlos III de Madrid, donde está ingresada."En la habitación no puede entrar nadie, está esperando para hablar con un abogado que él está barajando" para este asunto, ha indicado Mesa.
Mesa ha dejado claro que Limón no va a admitir las disculpas que este martes le pidió, a través de una carta, el consejero de Sanidad, porque —según él— tenían que haberse producido "mucho antes". "Lo único que le va a admitir es la dimisión", ha recalcado la portavoz.
Por su parte, una prima de Teresa Romero ha explicado también que "ya se levanta, ya se sienta, toma líquidos y está muy animada", según la información que le han facilitado a la madre de la paciente desde el centro sanitario.
Esta familiar, en conversación telefónica con Efe desde Becerreá, Lugo, ha añadido que "de momento va todo de maravilla", porque "llegar hasta aquí ya es un triunfo" y, supuestamente, "ya han pasado los días más críticos". En todo caso, ha recordado que "la situación sigue siendo grave" y todavía no se puede cantar victoria, porque "esta enfermedad es imprevisible y podría haber una recaída". Aún así, ha reconocido que gracias a la información que han recibido en las últimas horas la familia está ahora "mucho más animada".
Las palabras de los familiares de Teresa Romero inciden en los indicios de mejora que este miércoles también señaló el director del Instituto de Salud Carlos III y uno de los portavoces del comité científico, Antonio Andreu. Según declaró, la auxiliar ha experimentado una "leve mejoría clínica" y "se encuentra estable dentro de la gravedad".
Por su parte, el comité creado por el Gobierno para gestionar la crisis del ébola también recalcó esta información, reiterando que el estado de saludo de Romero sigue siendo crítico, pero estable. A diferencia de los últimos días, este miércoles no ha comparecido ninguno de sus miembros en rueda de prensa. En una nota de prensa, el comité añade que las 15 personas que permanecen ingresadas por haber mantenido contacto con la paciente se mantienen "asintomáticas".
El comité habla también de las "dificultades añadidas" que supone para el equipo médico trabajar con las persianas bajadas para proteger la intimidad de la paciente ingresada. Uno de los facultativos de Enfermedades Tropicales que la trata, Fernando de la Calle, se quejó el martes de ese mismo problema en el hospital Carlos III. "Debería poder ver la luz", dijo. Durante la reunión diaria del comité se ha hablado de cómo esta situación "supone un perjuicio objetivo para su tratamiento, dificultades para el personal sanitario en el desarrollo de su trabajo e inconvenientes para el bienestar de las personas ingresadas".
El director del Instituto de Salud Carlos III, Antonio Andreu, ha informado de que esta tarde comienza el programa de formación que anunció el Gobierno el lunes pasado. Los cursos se realizarán en la Escuela Nacional de Sanidad, dependiente de este organismo.
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