La policía acusa al pederasta de Ciudad Lineal de dos tentativas de homicidio

La policía acusa al supuesto pederasta de Ciudad Lineal de dos tentativas de homicidio de dos de las niñas que secuestró para abusar de ellas, según fuentes de la investigación citadas por EFE.

Estos dos nuevos delitos se unen a los cinco abusos consumados de menores y otras tres tentativas que se atribuyen a Antonio Ortiz Martínez, quien se ha negado a declarar ante la juez  de Instrucción número 10 de Madrid. A las 20 horas de este viernes, el supuesto criminal ha llegado a los juzgados de Plaza de Castilla para declarar ante la juez María Antonia de Torres Díez-Madroñero.

Al detenido se le tomará declaración en los calabozos de los juzgados de Plaza de Castilla y previsiblemente ingresará en la prisión de Soto del Real, donde hay un módulo de aislamiento, han señalado fuentes judiciales. En concreto, declarará por cinco delitos de agresión sexual, tres tentativas de agresión, cinco detenciones ilegales y dos homicidios en grado de tentativa y un delito de allanamiento de morada. Durante su declaración estará acompañado por su abogado defensor.

Uno de los delitos de homicidio en grado de tentativa se le ha atribuido en el caso del rapto de una niña española de nueve años que fue secuestrada el 10 de abril en la madrileña calle de Torrelaguna, mientras que el otro se corresponde con el secuestro de la menor de seis años y origen chino que tuvo lugar el 17 de junio en la calle Luis Ruiz.

Estos dos nuevos delitos se sumarían a los que, en un principio, le imputó la policía por los abusos consumados de cinco menores y otras tres tentativas. Según las fuentes, el pederasta ha sido acusado concretamente de cinco delitos de agresión sexual consumados y de cinco delitos de detención ilegal en relación con estos casos, así como de tres tentativas de detención ilegal y de un delito de allanamiento de morada.

Este último delito se correspondería con el primer caso que se atribuye al pederasta de los cometidos en el último año, en concreto en julio de 2013. Este caso fue el abuso de una menor que cometió en el propio domicilio de la niña, en la localidad madrileña de Coslada.

Antonio Ortiz se ha negado a declarar tanto ante la juez como ante la Policía Nacional y continúa con una actitud esquiva, según señalan fuentes de la investigación. El jefe superior de la Policía, Alfonso Fernández Díaz, ha explicado que el interés de la Policía es que el detenido pase a disposición judicial en "estado virgen y puro salvaguardando sus derechos de presunción". "No tenemos ningún interés en que declare o no sino determinar el avance de las pruebas, encajar todo el puzzle y que nos lleve a facilitar su culpabilidad", ha asegurado en declaraciones a Onda Cero.

Fernández Díaz ha explicado también que el detenido sigue manteniendo una actitud "displicente", que a veces pregunta "no muy convencido" y que todo lo que habla tiene que ver con frases en las que dice que no sabe qué hace detenido. La semana que viene las menores que fueron víctimas del supuesto pederasta pasarán una rueda de reconocimiento para identificar al agresor, pero harán la prueba de forma individual.

La gestión de la información alrededor del presunto pederasta está provocando cierto malestar entre los jueces de Plaza de Castilla debido a que podría derivar en una posible vulneración de sus derechos fundamentales. Fuentes jurídicas han señalado que algunos jueces están mostrando su disconformidad ante cómo las administraciones están gestionando los datos sobre esta investigación, cuyas diligencias están en el Juzgado de Instrucción número 10 de Madrid. La jueza María Antonia de Torres ya ha decretado secreto del sumario, por lo que no informará de si ingresa o no en prisión.

La Policía Nacional registró ayer el piso de Madrid en el que se cree que el presunto pederasta pudo cometer alguno de los abusos. En la vivienda se encontraron algunos restos de vómito y pisadas de niño. Una de las menores había declarado que vomitó durante el tiempo que estuvo en el piso, además de dar una descripción de la vivienda que coincide con la del piso registrado. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, informaba este jueves de que se están analizando los restos hallados de ADN y algunas huellas parciales de Antonio Ángel Ortiz Martínez.

Los agentes pasaron más de 13 horas inspeccionando el interior del inmueble situado en el cuarto piso del número 3 de la calle Santa Virgilia. El supuesto pederasta salió de la vivienda alrededor de las nueve de la mañana por el mismo garaje por el cual accedió al edificio en un coche azul oscuro con las lunas tintadas.

Las decenas de vecinos y periodistas que permanecieron frente a la puerta del garaje durante horas no pudieron ver el rostro del presunto pederasta de Ciudad Lineal. Lo que sí que se escucharon fueron insultos y gritos. Incluso algunos vecinos se aproximaron al coche para golpearle, pese a que el vehículo salió a gran velocidad del garaje del inmueble.

Por otra parte, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ha aclarado este viernes que el detenido estaba en la lista de pederastas que manejaba el Cuerpo Nacional de Policía en la investigación. Aunque ha reconocido que en ocasiones el intercambio de información entre los órganos judiciales y la Policía "se puede mejorar", ha dicho que en este caso "la información sí funcionó, porque una de las primeras cosas que se comprobó fue a las personas que tuvieran condenas por pederastia, y entre ellas estaba esta persona".