Cinco presos etarras piden a Francia cumplir su condena en España
La nueva normativa europea permite el traslado aun sin la solicitud del recluso
Cinco presos de ETA que cumplen condena en Francia han solicitado a la Administración gala redimir su pena en España. Es la primera vez que presos de ETA hacen una solicitud semejante, coincidente en el tiempo con la reclamación de otra decena de reclusos de la banda, encarcelados en Francia, que han pedido el acercamiento a cárceles próximas al País Vasco francés. Dos de estas ya han sido concedidas, tal como publicó ayer EL PAÍS.
La Administración francesa prevé que la demanda de peticiones de presos etarras de cumplir condena en España aumente en los próximos meses, tras la decisión adoptada el 28 de diciembre por el colectivo de presos de ETA de asumir la legalidad penitenciaria, pese a las resistencias internas del sector más radical del colectivo. La Dirección General de Instituciones Penitenciarias española, preguntada por este periódico, no se pronunció ayer sobre esta cuestión.
El cumplimiento de penas en el lugar de residencia habitual de los penados ha adquirido una nueva modalidad al poder realizarse sin el consentimiento de los afectados. Así está contemplado en una decisión marco de la Unión Europea del 27 de noviembre de 2008. Francia traspuso esa decisión marco a su propia legislación el 5 de agosto de 2013 y España la está tramitando en el Congreso de los Diputados. No obstante, las peticiones de los cinco reclusos se basan también en el convenio de Estrasburgo de 1983, ya que esta es la normativa vigente en España.
El hecho de que España no haya traspuesto aún esta decisión marco a su propia legislación impide abordar jurídicamente los traslados, porque las decisiones marco, a diferencia de las directivas europeas, requieren del requisito de su transposición a la legislación nacional para que tengan valor legal. La Administración francesa está predispuesta a abrir el diálogo oficial sobre esta cuestión con la española cuando se cumplan todas las previsiones que marca la ley, según afirman fuentes judiciales galas.
Ello no es óbice para que la cuestión del cumplimiento en España de las penas de los presos etarras que redimen condena en Francia no haya estado presente en encuentros informales entre representantes de ambas Administraciones. El Gobierno francés, que mantiene una estrecha colaboración con España en los asuntos relacionados con ETA, tiene previsto abrir ese diálogo con el Ejecutivo de Mariano Rajoy, una vez se trasponga la decisión marco de la Unión Europea a la legislación española. En Francia hay unos 200 españoles encarcelados, la mitad de ellos militantes de ETA. Pero en España hay también unos 200 franceses encarcelados, la mayoría por asuntos relacionados con el tráfico de drogas.
La decisión marco de la Unión Europea del 27 de noviembre de 2008 tiene como objetivo básico el cumplimiento de los objetivos de reinserción de los presos encarcelados, que se logra mejor en el lugar de arraigo del penado, en el que vivía habitualmente y seguirá viviendo, según señalan fuentes judiciales francesas. El artículo 8 de la decisión marco del 27 de noviembre de 2008 señala: “Cuando la persona condenada pueda ser transferida hacia un Estado miembro y hacia un tercer país en virtud del derecho internacional, las autoridades competentes de los Estados de emisión y de ejecución deberían examinar si la ejecución de la condena en el Estado de ejecución es susceptible de facilitar mejor la realización del objetivo de reinserción social que la ejecución en el tercer país”.
En el caso del centenar de presos de ETA encarcelados en Francia se produce, además, la singularidad de que algunas decenas de ellos tienen prohibida la residencia en Francia, con lo que serían puestos en la frontera española una vez cumplida la condena. “En un eventual diálogo entre Francia y España no se trataría de realizar una entrega masiva de presos etarras, encarcelados en Francia, para que cumplan su condena en España. Se trataría de estudiar caso a caso, dando prioridad a quienes tengan prohibida su residencia en Francia y a quienes la condena que les queda por cumplir sea por delitos cometidos en España”, precisan fuentes judiciales francesas.
Pero la clave de un traslado de presos etarras encarcelados en Francia a cumplir su pena en España está, según las mismas fuentes, en la reinserción social, que es la clave de la decisión marco de la UE. “Los presos, sean etarras o no, deben cumplir sus condenas en sus lugares de arraigo, dónde pueda facilitarse su reinserción y puedan prepararse para volver a la sociedad”, añaden las mismas fuentes.
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