Urdangarin dice que hizo negocios por su preparación y no por ser yerno del Rey

Iñaki Urdangarin defiende en el recurso que ha interpuesto ante el juez Castro que logró hacer negocios a través del Instituto Nóos y otras empresas por su preparación y por haber sido "deportista de alto nivel" y "no solo" por su condición de yerno del rey Juan Carlos. El duque de Palma niega además ser responsable de alguno de los ocho delitos que se le imputan, y solo admite haber cometido "irregularidades administrativas tributario-fiscales".

En el recurso de apelación, la defensa de Urdangarin afirma: "Es cierto, sí, mi mandante, por matrimonio, desde el año 2004 era yerno del Rey de España y ahora es cuñado del Rey de España, pero esa condición familiar no fue la única tenida en cuenta para que pudiera intentar realizar su actividad profesional".

Urdangarin niega, además, haber cometido delito alguno. El letrado Mario Pascual Vives solicita en su nombre a la Audiencia de Palma que le exonere de las veinticuatro imputaciones por ocho delitos diferentes que le atribuyó Castro en el auto con el que cerró la instrucción el 25 de junio.

En un escrito de dieciséis páginas que registró el pasado miércoles en los juzgados de Palma, del que ha dado traslado hoy Castro a las partes, el abogado de Urdangarin sostiene que de la investigación no se han derivado indicios suficientes para acusar al cuñado del Rey de malversación, prevaricación, fraude, tráfico de influencias, falsedad documental, estafa, falsificación y delito fiscal.

Solo "entiende y reconoce" que en 2007 y 2008 Urdangarin pudo cometer "irregularidades" fiscales que deberían ser resueltas por vía administrativa, "nunca penal, por no rebasar las correspondientes cuotas, en ningún caso, el umbral de los 120.000 euros por tributo y año".

El juez Castro ha citado hoy a declarar al excontable de Nóos, Antonio Tejeiro, que ha confesado por escrito al fiscal Pedro Horrach el funcionamiento real de la malla de sociedades particulares, con sus facturas falsas y contratos laborales irreales para generar beneficios fiscales, así como el caudal de reparto de fondos entre socios. Y de todos los manejos responsabiliza a Urdangarin y a su exsocio, Diego Torres, sin citar a la hermana del Rey.