Acuerdo para que el Congreso rechace el plan secesionista del Gobierno catalán

El Congreso se pronunciará el jueves por primera vez y de forma expresa contra el plan soberanista del presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, que apoyan CiU, ERC e ICV. El debate de la moción de UPyD que propone esa condena se producirá hoy, y la votación, el jueves.

La aprobación está garantizada porque el partido de Rosa Díez llegó ayer a un acuerdo con el Partido Popular para incluir una enmienda de este partido a la moción. No está clara aún la posición del PSOE, que no acepta todos los términos y podría abstenerse, aunque rechaza claramente el plan soberanista de Mas.

Una primera parte de la moción se limita a asegurar que el Congreso “rechaza tajante y expresamente el plan secesionista de la Generalitat de Cataluña aprobado por la resolución 323/IX de 27 de septiembre de 2013 del Parlamento de Cataluña, que desarrolla a su vez la resolución 5/X de dicho Parlamento, de 23 de enero de 2013, por la que se aprobó la llamada declaración de soberanía y del derecho a decidir del pueblo de Cataluña”. A este punto no hay objeción alguna de PP y PSOE.

Para el segundo, UPyD aceptó ayer una enmienda del PP con un texto en el que se insta al Gobierno a “seguir utilizando” todos los instrumentos que prevén la Constitución y el conjunto del ordenamiento jurídico para garantizar el cumplimiento de la legalidad. Expresamente se reclama a todas las instituciones y Administraciones que acaten el mandato del artículo 118 de la Constitución, que establece la obligación de cumplir las sentencias y demás resoluciones judiciales. Ese artículo dice textualmente: “Es obligado cumplir las sentencias y demás resoluciones firmes de los jueces y tribunales, así como prestar la colaboración requerida por estos en el curso del proceso y en la ejecución de lo resuelto”.

Los socialistas creen innecesario votar la referencia expresa a un artículo de la Constitución que todos los grupos están obligados a acatar, y por eso rechazan la enmienda del PP. Su intención es que se voten por separado los dos puntos. Al primero votarían sí, junto a PP y UPyD, de forma que el 86% de la Cámara rechazaría el plan de Artur Mas. En el segundo punto el PSOE se abstendría.

El problema es que si Díez acepta el voto separado no podrá reglamentariamente admitir la enmienda del Partido Popular. Y viceversa: cumpliendo el pacto de UPyD y PP con su enmienda no sería posible votar separadamente los artículos y el PSOE se abstendría en toda la moción.

Hasta el jueves los socialistas tienen en su mano aceptar o no la enmienda del PP. Y, en segundo lugar, UPyD tiene en la suya cumplir el pacto con el PP, evitar una votación separada y dejar en evidencia al PSOE, que se abstendría; o no admitir la enmienda y aceptar el voto separado. El Grupo Socialista sí garantiza esta vez que no habrá voto diferenciado de los diputados del PSC.