España tendrá un consulado honorario en la franja de Gaza
La oficina, que abrirá en los próximos meses, dependerá del consulado general en Jerusalén
España contará por primera vez con un consulado honorario en la franja de Gaza, según ha publicado este lunes el Gobierno en el Boletín Oficial del Estado. El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación ha autorizado la creación de esa oficina, en la que despachará un cónsul honorario, para “ reforzar la presencia del consulado general de España en Jerusalén en esa zona”, según se explica en el BOE.
En 2005, el Estado de Israel se retiró de Gaza, un territorio que ocupaba desde 1967. Tras su victoria electoral en las elecciones legislativas, el grupo islamista Hamas tomó el control de la Franja en 2007. Unos 50 españoles residen en ella, sobre todo cooperantes, además de algunos periodistas, según fuentes consulares. El nuevo consulado abrirá en los próximos meses. Aún no hay una fecha concreta. Recientemente se ha iniciado el proceso para seleccionar a un cónsul honorario que ocupe el puesto.
“La idea es contar en Gaza con una oficina consular honoraria que permita ofrecer una mayor asistencia consular a la colonia española en la Franja y a aquellos que no residan allí pero que se encuentren por distintos motivos en Gaza, y asistir al consulado de Jerusalén en otras funciones consulares”, explican fuentes diplomáticas en Israel. “Se refuerza así el margen de maniobra del consulado sobre todo en situaciones de crisis, como la última operación militar de Israel, Pilar de Defensa, en las que la frontera puede cerrarse sin previo aviso, o cuando se requiere una actuación rápida”, añaden.
Desde ese consulado honorario se asistirá también a aquellos residentes de Gaza que soliciten un visado de entrada en España. Es el consulado en Jerusalén el que tramita esos documentos de tránsito a los residentes de la Franja, que en su gran mayoría no pueden entrar en territorio bajo control israelí. Hasta ahora, los gazatíes solicitaban los visados a través de empresas de mensajería. Cuando el nuevo consulado honorario abra, será su responsable el que reciba las solicitudes para enviarlas a trámite a Jerusalén.
El real decreto correspondiente, de 2007, establece que las oficinas consulares honorarias estarán dirigidas por personas que “no sean un funcionario consular de carrera, y que en el caso de ser de nacionalidad española, no pertenezca a ninguna de las Administraciones Públicas”. Actuarán, en suma, “como auxiliares o delegados del funcionario de carrera del que dependan. Por tanto, sus atribuciones estarán en cada caso determinadas por las instrucciones que de éste reciban”.
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