El PSE-EE ya da por hecho que el PNV gobernará en solitario

El PNV no llega a acuerdos con ningún partido de la oposición y así se agiganta la posibilidad, deseada por Iñigo Urkullu, de gobernar en minoría. Los socialistas ya lo dan por hecho tras mantener este viernes su segunda reunión con los nacionalistas. Rodolfo Ares, que encabezó la delegación del PSE-EE, sostiene que el PNV les confirmó que “gobernará en solitario”, circunstancia que niega la otra parte al asegurar que “el EBB no ha tomado ninguna decisión hasta que se reúna el lunes”. Con anterioridad a esta resolución, los nacionalistas agotarán con el PP la única alternativa posible para un acuerdo, que podría centrarse en firmar un pacto de estabilidad presupuestaria para las Diputaciones de Bizkaia y Álava y el Ayuntamiento de Vitoria.

A las conversaciones del PNV también se refirió Laura Mintegi, que encabezó la acreditación del grupo parlamentario de EH Bildu (22 escaños), en el Parlamento vasco. La portavoz de la coalición abertzale resaltó las “divergencias en el aspecto socioeconómico” que mantienen con los nacionalistas porque “siguen aplicando las mismas políticas que hasta ahora y sabemos la situación económica a la que nos han llevado”, informa Ania Elorza.

Según Mintegi, el PNV “acepta unos principios, pero no se nos dice cómo se aplicarán”. Por ello, reconoce: “Tenemos razones para ser desconfiados en puntos concretos como la fiscalidad; las cosas que nos proponen [otra política fiscal] y lo que están haciendo hoy en día no coinciden”. Como forma de marcar territorio, Mintegi, que no despejó la duda de si presentará su candidatura en la elección a lehendakari advirtió de que trabajarán “como si estuviésemos gobernando”.

Frente a este clima de oposición, el PNV asume que la búsqueda de acuerdos puntuales será una labor “complicada”, aunque cree que existe un clima propicio al entendimiento, según se desprende de las conversaciones mantenidas hasta ahora. De los socialistas, por ejemplo, tiene asegurada su voluntad de seguir hablando. “Estamos dispuestos a estudiar cualquier propuesta que se nos quiera hacer”, pero advierten de que “siempre deberá ser concreta”, dijo Ares al valorar la reunión de trabajo de este viernes con los nacionalistas. Para el PSE-EE, la pretensión nacionalista es “garantizarse la estabilidad y el respaldo de otras fuerzas políticas en el Parlamento al menor coste”. En opinión de Ares, “es la fórmula más cómoda para el PNV, pero la más inconveniente para Euskadi”.

El PSE-EE apuesta por un Gobierno “fuerte y estable” para superar “la crisis económica de forma justa”. El PNV dice que también persigue el mismo objetivo, pero asuntos espinosos como la fiscalidad impiden el acuerdo. “Nuestra idea es que la fiscalidad siga siendo una atribución de las Juntas Generales y ellos insisten en llevarlo al Parlamento”, apuntó a este diario un portavoz nacionalista.

Pese al escaso margen para el acuerdo, en el PNV no se dan por rotas por las negociaciones con el resto de la oposición. “EH Bildu se ha autodescartado con las propuestas que nos ha planteado en el tema socioeconómico, aunque tengamos puntos de encuentro en materia de paz y libertad y en lo del autogobierno”, reconoció este viernes a la misma fuente nacionalista. Desde la dirección del EBB se afanan en negar que ya tengan la decisión tomada sobre el modelo de su próximo Gobierno vasco. La decisión oficial se conocerá el próximo lunes, después de que los nacionalistas mantengan la última reunión con el PP, donde se apurará al máximo la fundada posibilidad, reconocida por ambas partes, de un acuerdo presupuestario.