El contable de UM confiesa tramas corruptas tras pactar con la Fiscalía
Álvaro Llompart señala a Maria Antònia Munar, al empresario Jacinto Farrus y al ex director de IB3, Antoni Martorell
El antiguo contable del extinto partido bisagra Unió Mallorquina (UM), Álvaro Llompart, ha confesado una trama supuestamente delictiva de la dirección de su grupo a través de favores, cobros de comisiones y empleo de activistas electorales por concesionarios públicos. Llompart, detenido en 2010 cuando era jefe del área económica del Instituto de Estrategia Turística (Inestur) del Gobierno de Baleares, ha asumido hechos delictivos y los ha detallado en diferentes y prolijas declaraciones judiciales. El político ha pactado con la Fiscalía Anticorrupción reducciones penales, las atenuantes previstas en los acuerdos de colaboración con la justicia.
Llompart destapó el mecanismo de diferentes supuestos operativos de corrupción gestados en el seno del grupo que presidió Maria Antònia Munar, que se alió indistintamente con el PP y el PSOE desde 1983 hasta su caída en 2010 por el cúmulo de escándalos y detenciones de sus dirigentes. La cúpula de UM está implicada en más de media docena de casos judiciales: caso voltor, caso peaje, caso maquillaje, caso son oms, can Domenge, caso ayudas, entre otros.
El contable arrepentido ha señalado que la exlíder Munar, a través del que fue director de la televisión balear IB3 y su ex jefe de prensa, Antoni Martorell, le ordenó beneficiar al empresario inmobiliario y de medios audiovisuales Jacinto Farrús, con contrataciones, adjudicaciones públicas de hasta 3,5 millones. Farrús, quien gestionó el negocio de la producción de informativos de IB3, fue detenido y está imputado.
Martorell, que fue socio de Farrús en una empresa de publicidad, según el colaborador de la Fiscalía, planteó esta estrategia como una manera de compensarle al empresario la ayuda ofrecida a UM, en la campaña electoral de 2007. Llompart narró la supuesta financiación ilegal del partido y la posible trama de caza de votos y los pagos de agentes electorales. Un director general, Antonio Oliver y un consejero y líder circunstancial de UM, Miguel Àngel Flaquer, según la narración de Llompart, le invitaror a asesorar a Farrús para la presentación de proyectos en la áreas de Turismo que manejaba su formación. Farrús ganó los concursos y el contable afirmó en Fiscalía que era "un tema directo de Maria Antònia Munar", según una transcripción de Europa Press.
El imputado Álvaro Llompart señaló que UM pactó con Farrús contratos por 3,5 millones: 2,5 millones se pagaron a través de proyectos adjudicados desde el Inestur mientras que el otro millón se tramitó en proyectos del Instituto Balear de Turismo (Ibatur) y de otras instituciones públicas en manos de UM.
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