Fomento avisa de que su prioridad ahora es pagar las deudas del AVE

En apenas unos días, el PP ha pasado de mostrarse inflexible en su exigencia de unos plazos concretos para terminar la conexión por AVE entre Galicia y la Meseta a dejar en la incertidumbre el proyecto largamente esperado. Las dudas volvieron a acrecentarse este viernes con unas declaraciones de la ministra de Fomento, Ana Pastor, en las que subrayó que su prioridad ahora es pagar las deudas que, según ella, todavía tiene su departamento por tramos ya inaugurados o todavía en construcción.

La pontevedresa Pastor hizo estas manifestaciones en Santiago, donde la abordaron los periodistas a la salida del velatorio de Isaac Díaz Pardo para preguntarle por el futuro de la conexión ferroviaria de alta velocidad. Y sus palabras fueron todo menos concretas. “Estoy ahora ocupada en pagar lo que se ha vendido y se ha inaugurado pero queda todavía por pagar”, apuntó. “Vamos primero a pagar lo que tenemos, a auditar cómo están las cosas y a planificar el presente y el futuro de Galicia”. Pastor se aferró a una frase que también ha repetido en los últimos días el presidente de la Xunta — “Galicia no quiere ser más que nadie pero tampoco menos que nadie”— y en cuanto los periodistas le plantearon los posibles plazos para terminar la obra, puso fin a la conversación con un escueto “muchas gracias”.

La ministra sí reveló que ya ha tenido dos conversaciones con la Xunta sobre la cuestión del AVE a Galicia. Una, el pasado 26 de diciembre, con el presidente Feijóo y otra el 2 de enero con el conselleiro de Infraestruturas, Agustín Hernández. Nadie ha ofrecido hasta ahora detalles de lo hablado en esas conversaciones, aunque el propio Hernández también sembró la incertidumbre el pasado jueves al insinuar que al anterior titular de Fomento, José Blanco, pudo haber ocultado información sobre el estado de las obras y reseñar que la “situación financiera del Estado es peor de lo que se nos había trasladado”.

Tras firmar hace año y medio el llamado Pacto do Obradoiro con Blanco, que estipulaba para finales de 2015 la llegada del AVE, la Xunta emprendió hace meses, cuando la victoria electoral de Rajoy ya parecía un hecho, una ofensiva para deslizar que esa fecha es de imposible cumplimiento. Desde entonces, tanto Feijóo como Hernández han situado su nuevo objetivo en 2018. Pero desde la llegada del PP al Gobierno central y de Pastor al Ministerio de Fomento ni siquiera ha habido ningún compromiso con esa nueva fecha. Tampoco Rajoy quiso comprometer ningún plazo en el debate de investidura.