"Equo no acaba el 20-N. Es un proyecto de largo recorrido"

Juan López de Uralde (San Sebastián, 1963) fue al estadio del Rayo Vallecano a ver el partido contra la Real Sociedad el pasado 6 de noviembre. Allí se dio cuenta de que para conseguir un escaño por Madrid necesita 10 veces más votos que espectadores había en el campo. Aun así no se desanima y parece convencido de que el partido ecologista Equo tendrá representación no solo por Valencia, donde acude con Compromís.

Pregunta. ¿Qué sería un buen resultado para Equo?

Respuesta. Entrar en el Parlamento. Y muy bueno sería formar grupo, con nuestros aliados en Valencia y Cataluña.

P. ¿No entrar por Madrid sería un fracaso?

R. Sería un mal resultado, sin duda.

P. Aun así, es optimista.

R. Estoy convencido, porque lo percibo en la gente y porque muchos sondeos lo dicen. Es muy difícil que las encuestas perciban a un partido nuevo, y sin embargo en algunas ya aparecemos. Mónica Oltra me contaba el caso de Compromís en Valencia. La encuesta del CIS les daba en mayo menos del 2% en la ciudad de Valencia y sacaron un 10%. El CIS infravalora a los nuevos partidos.

P. ¿Si el 21-N no tiene escaño?

R. Equo no se acaba el 20-N. es un proyecto de largo recorrido. Tendríamos que ver cómo seguir adelante.

P. ¿Su objetivo son las europeas?

R. Las europeas son más favorables para nosotros porque contaría todo el voto. Pase lo que pase, no nos vamos a desanimar. Como me dijeron el otro día, somos los vencidos de una causa invencible.

P. Las encuestas sí notan el ascenso de IU, que parece capitalizar el descontento del 15-M.

R. Creo que la subida de IU es más de desencantados del PSOE. El análisis de la influencia del 15-M habrá que hacerlo el 21-N.

P. Hay indecisos entre IU y Equo. ¿Qué les diría?

R. Que entramos en una legislatura tremendamente gris, con un PP con demasiado poder y con el PSOE pendiente de sus problemas internos. Y que ahí hacen falta voces nuevas como Equo. Aportamos frescura.

P. Pero los programas de IU y Equo tiene cosas en común.

R. También hay coincidencias entre PSOE e IU, porque en ciertos aspectos comparten planteamientos. La diferencia de Equo está en la forma y en que representamos una familia política distinta, Los Verdes Europeos. El PSOE ha demostrado que las cosas que lleva en el programa no las cumple, y ese es su principal lastre. Además, hay muchas diferencias. Nosotros, por ejemplo, queremos recortar en infraestructuras. Hemos hecho un programa muy económico, para superar la dependencia del ladrillo. Apostamos por una recuperación encabezada por los sectores que nos ayudarán a salir de la crisis ecológica.

P. ¿Lamenta no haber aceptado la coalición con IU?

R. No, fue la decisión correcta. Con ellos habríamos tenido escaño, pero habría matado a Equo.

P. ¿Ha visto a Rubalcaba pedir el cierre de las nucleares?

R. Sí y me sorprendió, porque en el pasado ha sido pronuclear. En todo caso, bienvenido sea Rubalcaba al cierre nuclear. También ha llegado Merkel.

P. ¿Quién le pone más zancadillas, PSOE o IU?

R. Los dos. Cada uno a su manera, han hecho lo posible para evitar que surgiera Equo.

P. ¿Cree que el PSOE recuperó a Cristina Narbona por Equo?

R. Creo que sí, que lo hicieron para tapar una posible huida de votos a Equo, y nadie mejor que Narbona.

P. ¿Ha hablado con ella?

R. Intercambiamos mensajes antes de verano. Yo la respeto y creo que ella a nosotros, pero cada uno ha elegido su terreno.

P. ¿Cómo financian su campaña?

R. Hemos pedido donaciones y esperamos llegar a 100.000 euros. Solo el cara cara del otro día costó 550.00 euros, que es un disparate.

P. Hablan de república, más impuestos, laicidad... ¿Por qué no optaron por ser solo ecologistas e ir a por un votante más trasversal?

R. El votante verde sabe que Equo es su voto, y no dar una respuesta a los cinco millones de parados habría sido irresponsable.