Rubalcaba: “Si damos la cara, daremos la vuelta a las encuestas”

Al candidato del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, no le preocupan, al parecer, las críticas que ha tenido “de la derecha” por contar con Alfonso Guerra y Felipe González en su campaña. Ambos estuvieron arropándole ayer en Sevilla y hoy González le ha acompañado en Valencia. “Claro que voy a contar con Felipe, es un lujo, él habla con todos los mandatarios, incluidos [Luiz Inácio] Lula, y [José María]  Aznar, el que nombró a Rajoy habla con el Tea Party; claro que somos diferentes”.

Pero ayer, como hoy, el discurso de Alfredo Pérez Rubalcaba se destina singularmente a animar, a agitar a los suyos. No se resigna a pesar de que los sondeos de opinión le dan una ventaja en principio insuperable al PP. “Dar la cara y daremos la vuelta a las encuestas”, ha dicho a más de 10.000 militantes y simpatizantes socialistas reunidos en un pabellón en Valencia. Y ¿cómo se da la vuelta a las encuestas? El recetario de Rubalcaba consistiría en una movilización total de los militantes y los que apoyan al PSOE para explicar a los ciudadanos lo que creen que han hecho bien, también “los errores” que han podido cometer, y sobre todo lo que van a hacer para salir de la crisis.

El reconocimiento de errores lo citó igualmente el expresidente Felipe González para llegar con más credibilidad a los ciudadanos. “Quizá hemos llegado tarde a la adopción de algunas medidas, pero lo mismo que les ha ocurrido a otros países”, dijo González para no cargar las tintas sobre el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. No hay otro camino para Rubalcaba, según se aprecia en el tercer día de campaña, que explicar a los ciudadanos lo que se juegan en estas elecciones. “De la crisis se puede salir de dos maneras, o todos, o solo unos pocos; nosotros defendemos a todos los ciudadanos, pero en especial a los más débiles”.

Aprovechó el candidato del PSOE su presencia en Valencia para hacer las comparaciones de cómo gobierna la derecha en las comunidades donde tiene el poder para dar por supuesto que ese será el modelo de Mariano Rajoy si gana las elecciones. “El modelo privatizador de la sanidad y la educación valencianas serán los de Rajoy y solo comparad los presupuestos de Valencia o de Madrid, gobernados por la derecha, con los de José Antonio Griñán, en Andalucía”.

No se detuvo demasiado Rubalcaba en criticar el modelo valenciano dirigido desde hace más de 20 años por el PP, ya que para eso ya le antecedieron en la palabra el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, y la número uno de la lista por Valencia, Inmaculada Rodríguez Piñero. Esta, además, forma parte del equipo de confianza de Rubalcaba en el área económica. El ejemplo valenciano sí le sirve al candidato socialista para hilar su discurso de cómo se puede salir de esta crisis “tan dura y tan profunda”. Si gana el PP “los beneficios se privatizan y las pérdidas se socializan”, auguró.

Sobre cómo salir de la crisis económica en España y en Europa descansó la intervención de Felipe González que, también aquí, fue vitoreado y aclamado por la militancia socialista. Antes de meterse en la hondura de la crisis se quitó la espina que le había clavado “la caverna” al menospreciar su presencia en la campaña de Rubalcaba. “He ido a todas las campañas del PSOE y ahora con más ganas que nunca porque tenemos al mejor candidato”, confesó González. “Dice la caverna que Alfredo recurre al pasado, el pasado soy yo , y Rajoy el futuro pluscuamperfecto”, ironizó.

Ahora bien, González presumió de que los líderes europeos hace dos años le encargaron que encabezara un comité de sabios para definir el futuro de la Europa del siglo XXI. “Rajoy dicen que representa el futuro, ¿en qué lo representará?”. A partir de ahí el expresidente encadenó un rosario de diatribas, entre la broma y el sarcasmo, sobre Rajoy y el director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, aunque no le mencionó por su nombre. “¿Creéis que Rajoy se ha enterado de los desafíos del siglo XXI y que puede representar el futuro? Para él una buena opción sería la tumbona en el Registro de la Propiedad de Santa Pola”. Aludía González a la plaza que tiene el presidente del PP en esa localidad y en ese cuerpo del Estado.

“Dice Rajoy que hoy no trabaja porque está preparando el debate de mañana [por el lunes] con Alfredo”. Recordaba así que el líder popular ha suspendido sus actos electorales para preparar el cara a cara. Pero más encendido se mostró el expresidente al hablar del director de El Mundo, aunque él de antiguo lo denomina El Inmundo. “¿Nadie se mete con El Inmundo, nadie se atreve con ese desvergonzado, un manipulador de todo desde siempre?; ¿Por qué le tienen miedo a alguien que no hace El Mundo sino El Inmundo?”.

Pero González volvió de nuevo a Alfredo Pérez Rubalcaba para elogiar y asegurar que es el mejor para sacar a España de la crisis, en tanto que con Rajoy se produciría “el salto patrás que dicen en México”. Pasado y presente y quién representa a uno y a otro sostuvieron el discurso de González. “Con todo respeto, no puede ser que Rajoy, con su indolencia, con su aire de señor de casino del siglo XIX sea el presente, no puede ser”.

Una interrupción tuvo González a la que hizo frente con agilidad. Escuchó algunos gritos, miró hacia atrás y vio a un grupo de gente con pancartas de apoyo al pueblo saharaui. “Dejad que se expresen, pero también hay que recordar que los campos de refugiados del Sáhara se sostienen en un 80% por la aportación del Gobierno de España”. El compromiso de González con Rubalcaba abarca la campaña “después de la campaña, al mes siguiente y al otro, porque es el mejor”. Con esta apreciación dejó claro que, pase lo que pase en las elecciones, para él, el futuro del PSOE está en Rubalcaba.